Aquí encontrareis una recopilación de One-shots/Imaginas totalmente originales de nuestros personajes favoritos de la saga de videojuegos, series y películas animadas de Resident Evil.
· Personaje x Fem (Tn = Tu nombre). También puede haber Personaj...
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⚡Dedicado a /Nahirosalya.
P.O.V Omnisciente.
Martes, 12:32 pm...
Los finos bordes de la sabana se deslizaban por el suelo de parquét, bailando con los andares de la atractiva muchacha, que iba camino del servicio con un exhausto, pero cariñoso, castaño tras ella.
– Sabes que no hace falta que te vayas tan pronto, ¿verdad? – Pronunció él, parándose en el marco de la puerta del baño y apoyándose sobre su hombro.
Ella volteó un segundo a verlo.
Leon estaba impresionante vestido tan solo con su ropa interior y rogando por un poco más de atención. Sus musculosas piernas, las sombras que se marcaban por todo su torso gracias a lo bien trabajado que estaba, junto a sus fuertes brazos, que ahora se cruzaban con un poco de desilusión sobre su pecho, lo hacían lucir muy bien.
A estas alturas era evidente que el hombre gustaba no solo de los lujuriosos momentos que ambos pasaban en su apartamento, sino que también había caído en los pequeños encantos de niña buena de su amante, quedando prendado de ella.
– Vamos, Kennedy...sabes que mañana tengo un día ajetreado, no puedo quedarme toda la noche aquí contigo. – Le guiñó un ojo a través del espejo que tenía delante.
– No me llames así... – Se quejó León por la formalidad. – Y yo no lo veo tan mal. – Hizo un intento poco sutil de hacerla cambiar de opinión.
Ella sonrió y en un par de pasos volvió hacia él, mirándolo con unos tiernos ojos de cervatillo. El agente no pudo evitar que las comisuras de sus labios tiraran un poco hacia arriba al verla desde su altura, ella parecía tan risueña, incluso después de haber consumido sus energías en una buena sesión de sexo con él.
– ¿Te importa si utilizo la ducha? Serán cinco minutos, te lo prometo, cielo. – Preguntó con una suave voz, sin apartar su vista de los bellos orbes azulados de él.
– Claro, pequeña, el tiempo que quieras. – Ofreció antes de robarle un cariñoso beso y ver como Tn se alejaba un par de pasos, atando mejor las finas sábanas blancas a su cuerpo para luego centrar su atención en recogerse el pelo en un desordenado moño.
Leon se permitió el delicioso deseo de quedarse unos segundos más para observarla bien desde su lugar. Sus curvas envueltas a través de la tela, dejando algunas zonas sin cubrir y otras casi transparentes, mientras estiraba sus brazos para abrir el grifo del agua y luego volvía a su recta pose, luciendo esbelta, y dejando una imagen hechizante por la cual tragó saliva al notar como su garganta se secaba.
Decidió marcharse y cerrar la puerta tras él, no le convenía tentarse de más si ella iba a marcharse, de nuevo.
Tn también pensaba sin cesar en todas las sensaciones y emociones que llenaban día tras día su piel de actos indebidos. A medida que las calientes gotas de agua caían en ella, llevándose consigo cualquier prueba de sus pecados, analizaba una y otra vez los pequeños gestos que el castaño había estado teniendo para con ella en los últimos dos meses. La forma en la que le hablaba de su día a día o de sus intereses, la forma en la que la abrazaba después de desfogarse con su cuerpo, o los pequeños comentarios que lanzaba oponiéndose a su partida una vez acababa el juego sexual. Todo eran señales evidentes de que empezaba a enamorarse de ella o de que ya lo estaba.
