No llores, mi cielo

Capitulo 20

El sonido de la voz de la mucama, envuelto en una sonda de radio, lleno el pequeño auto y congestiono los nervios del cerebro de Sasuke. Las palabras "Se presento como Naruto" fueron como dagas clavándose en el vientre del Uchiha, hiriendo su interior. 

Nunca pensó que sus sospechas eran ciertas y es que el parecido de Kurama con su ex esposo era tan grande que es como si nunca se hubiese ido. 

Pero la pregunta es "¿Cómo es que está vivo?" él mismo vio su cuerpo en el ataúd, vio como lo enterraron y sintió el enorme vacío al saber que jamás lo volvería a ver. 

Tres años de sufrimiento, tres años en las que tuvo que endurecer su corazón para no enamorarse, ni de sentir cariño en su hijo, porque sus ojos azules le hacían recordar en Naruto. 

Pero pronto, Sasuke se impuso a la razón y aparto los sentimientos de melancolía. 

¡Naruto se burló de él!

Solo al pensar que se hizo pasar por otra persona y que lo había confundido, la furia empezó a albergar en su corazón. 

Pensando en las palabras que dijo el rubio en el parque de diversiones, lo hizo enfurecer más, Sasuke reprimió su temperamento, su voz mantuvo la compostura y bajo su tono - Quiero que se retiren, no quiero ver a ningún trabajador en la mansión -

-¿Qué me dice del joven Uchiha? - 

Sasuke se desato el nudo de la corbata y respiro profundo - Despiértalo y llévalo con mi madre - 

-Señor Uchiha, pero...-

-Obedece y más te vale que no le digas nada a mi madre, porque si lo haces, tendrás muchos problemas - 

-Si, señor - 

Sasuke colgó el teléfono, bajo la ventanilla del auto para calmar su enojo, pero su corazón seguía ardiendo. Rápidamente puso en marcha el auto e inconscientemente aumento la velocidad. 

Cuando llego a casa, el fuego del enojo que se había originado no se había apagado con la brisa nocturna, sino que creció aún más cuando entro a la casa. La luz del salón seguía encendida, pero no había nadie, hasta que escucho sonidos de trastes en la cocina. 

La puerta de la cocina estaba cerrada, aparte que una pequeña luz estaba encendida. Sasuke sospecho de quien se trataba, en el pasado cuando Naruto no podía dormir, tenía la costumbre de prepararse un té para calmar sus nervios. 

Ahora que sabía que Kurama, era el verdadero Naruto, no se sorprendió en verlo husmear en la cocina como una rata. 

Sasuke dio unos pasos hacia la cocina y las venas de su cabeza se empezaron a hinchar. Hizo una pausa, abrio la puerta y entro. 

Naruto ni siquiera se sorprendió al verlo, había adivinado correctamente que Sasuke iba a llegar con el rostro distorsionado.

Los parpados del azabache se agitaron sin control. 

-¿Te divertiste? - 

Naruto no respondió. 

-¡¿Por qué no respondes?! - El enojo en cegó al Uchiha y tomo bruscamente de los hombros al rubio - ¡Dime! ¡¿Fue divertido jugar conmigo?! - 

-No...-

-¡¿No?! Ja - Sasuke sonrió cínicamente y empujo el cuerpo de Naruto en el estante de la cocina - ¡¿Cuál será tu excusa?! ¡Dímelo! -

-Bien - Naruto ni siquiera pensó en sus palabras - ¡Regrese a la vida por tu culpa! - empujo el cuerpo del azabache - ¡Todos estos tres años he estado viendo lo que le hacías a nuestro hijo! ¡Todos estos años cambiando de niñera como calcetín para que lo cuidaran , cuando tu responsabilidad es estar con él! - las lágrimas empezaron a resbalar de sus mejillas, pero no tuvo el tiempo de limpiarlas - ¡¿Sabes cuánto tiempo soporte?! ¡Me dolía demasiado no poder hacer nada y a ti...- hizo una pausa - me daba ganas de golpearte! - 

Sasuke frunció el ceño al escuchar sus palabras, pero no respondió. 

-¿No piensas responder? Entonces voy a seguir hablando - dijo Naruto y se limpió las lágrimas - Estos tres años fueron una tortura para mí, deseaba estar con mi hijo y cuidarlo como se merece, cocinarle, arroparlo, ayudar en sus tareas y darle consejos. Quise ser una buena madre para Menma y que tu fueras un buen padre para él, pero me lleve una gran decepción - 

Sasuke abrio la boca, pero no soltó ninguna palabra. 

-Por eso le pedí a Dios que me diera otro oportunidad, esta vez quiero que Menma se lleve buenos recuerdos y que tu seas un buen padre - 

El azabache aparto la mirada de esos ojos azules, empezó a sentirse avergonzado por las cosas que hizo en el pasado y por haber actuado de una forma egoísta, pero no lo confeso y se guardó todo. 

Naruto lanzo un suspiro - Ahora que sabes la verdad ¿Qué piensas hacer señor Uchiha? - pregunto. 

Sasuke se aclaró la garganta, el fuego que sentía en su corazón se apagó por completo - Esta bien, sigue trabajando como siempre - 

Naruto dibujo una leve sonrisa en sus labios, por alguna razón se sintió decepcionado - Ya - 

El azabache volvió a mirar su rostro y la pregunta que quiso hacerle durante los tres años, salieron de repente de sus labios - ¿Por qué te divorciaste de mí? -

Naruto no se esperaba esa pregunta, así que tardó en responder. 

-Yo... no quería que te quedaras a mi lado y menos en mi estado- contesto con sinceridad - Tu no estabas enfermo, así que no te quería tener atado - 

Un momento de duda brillaron en los ojos del Uchiha y extendió las yemas de sus dedos para tocar ligeramente las marcas en las mejillas del rubio. 

-A mí no me importaba estar a tu lado, aunque sea en los últimos momentos - 

Los ojos de Naruto brillaron como el cielo y de repente se empezó a sentir nervioso. 

-Fui un estúpido, los ojos de Menma se parecen mucho a los tuyos y cada vez que lo veía, me ponía melancólico. Odio sentir ese tipo de cosas - 

Naruto tomo la mano del azabache y lo aparto de su rostro - Sasuke, deja de actuar como un Uchiha y actúa como un padre. Desde que te casaste conmigo y tuvimos un hijo, creamos nuestra costumbre y nuestras creencias, así que ya no tienes que actuar como un robot -