Capitulo 37

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Después de que terminaron de cenar, los dos se pusieron a platicar sobre el pasado. Naruto estaba algo arrepentido de haberse separado del azabache de esa forma, pero no quería que estuviera atado a alguien que le quedaba poco tiempo de vida y Sasuke por el contrario quería pasar ese tiempo a lado de Naruto.

-Entonces ¿Por que nunca me fuiste a visitar al hospital? - pregunto el rubio, ya que la persona que le entrego los papeles del divorcio fue el abogado de la familia.

Sasuke le dio un sorbo a su copa de vino - No querías verme ¿No es así? -

Naruto frunció el ceño - Pero por lo menos hubieras luchado un poco - respondió.

El azabache agito la copa - ¿Me ibas a recibir? - pregunto.

El rubio lanzo un suspiro - No es como si pudiera escapar, todo el tiempo me la pase en la camilla -

Sasuke dejo de jugar con la copa y apoyo los brazos encima de la mesa - En realidad estaba molesto contigo -

-¿Por que? -

-Estuvimos cuatro años juntos, pensé que teníamos la suficiente confianza para decir la verdad. Por eso cuando me diste el divorcio, decidí no hablarte nunca más... no, en realidad esperaba que tu me vinieras a buscar y que me rogaras que pasara los últimos días contigo -

Naruto no supo que contestar.

-Pero me di cuenta demasiado tarde. Cuando decidí visitarte, ya estabas dando tus últimos suspiros, Menma fue el único que tomo tu mano -

Ahora que recuerda, Menma ¿Qué hacia en el hospital? Su suegra le había prohibido ver a su hijo por miedo que el niño se traumara, así que nadie lo visitaba en el hospital solo su abogado que veía el asunto del divorcio.

Esa noche antes de su muerte, su hijo lo fue a visitar y tomo su mano aferrándose a la vida. Estaba tan feliz de ver a su hijo, que olvido la prohibición de su suegra.

-Esa noche ¿Tu viniste a verme? -

Sasuke asintió - Solo me quede en la puerta - hizo una pausa - Mi cuerpo no podía moverse -

La apariencia brillante de su esposo había desaparecido completamente, esa figura recostada en la camilla, pálido y sin ningún brillo en sus ojos lo hizo dudar si realmente era su esposo. Parecía un fantasma que se aferraba al mundo de los vivos, pero cuando Naruto sonrió se dio cuenta que ese brillo no se había apagado del todo.

-Lamento no haberme presentado -

Naruto acerco su mano y tomo el brazo de Sasuke - No te preocupes, yo tampoco quería que me vieras en ese estado, si yo te hubiera visto esa noche, me hubiera muerto pero de vergüenza -

Sasuke agarro la mano de Naruto, lo acerco a sus labios y le planto un beso en el dorso - No digas tonterías, seguías de igual de hermoso y todavía lo estas -

Naruto bajo la cabeza algo avergonzado, no sabia si era a causa del vino, pero todo su rostro se sentía caliente.

-¿Quieres ir a casa? - pregunto Sasuke.

Naruto alzo la cabeza, todavía su mano seguía unida con la del azabache -No lo se - en realidad quería pasar más tiempo con el Uchiha, como en los viejos tiempos.

Sasuke pensaba lo mismo y alzo la mano para pedir la cuenta.

Cuando salieron del restaurante, el frio viento de la noche choco en sus rostros. Pronto se acercaba el invierno, algunos establecimientos ya estaban decorando con luces navideñas y otros tenían sus muñecos de nieve frente a la puerta.

Naruto miro hacia el cielo, las hermosas estrellas casi no se apreciaban a causa de las luces de la ciudad.

Sasuke apretó la mano del rubio -¿Quieres ir al parque? -

El rubio aparto su vista del cielo y miro los ojos del azabache - Esta bien - respondió.

Sasuke sonrió, por un segundo pensó que Naruto iba a desaparecer... su mirada parecía algo perdida.

El parque estaba muy animado como siempre, varias parejas se tomaban fotos en los bancos y otros en los columpios. Los niños corrían de un lado a otro, se molestaban entre ellos y competían en quien era más rápido.

También había puestos de comida callejera y dulces.

-¿Quieres un algodón de azúcar? -

Naruto negó con la cabeza, estaba demasiado lleno.

Sasuke no pregunto más y camino a lado del rubio en silencio.

Después de varios minutos en silencio, Naruto por fin hablo.

-¿Te casaras cuando me vaya? -

Sasuke no esperaba ese tipo de pregunta.

Naruto siguió - No todo el tiempo puedes estar soltero, hay muchas mujeres que desean estar a tu lado y Menma... Menma no puede estar tanto tiempo sin una madre y no me digas que vas a contratar niñeras, porque tus elecciones son de lo peor ¿Sabes que le hacia esa tal Sakura a nuestro hijo? Ella lo maltrataba y casi no le daba de comer -

-¿Por qué me preguntas eso? -

El rubio se callo abruptamente y se rasco la cabeza - Es que cuando me vuelva ir, ya no estaré para verlos como antes lo hacia -

-¿A qué te refieres? -

Naruto volvió alzar la cabeza hacia el cielo - Yo ya no seré un fantasma - alzo un dedo hacia arriba - Estaré allí -

Sasuke miro el cielo nocturno - ¿No podrás vernos desde allí arriba? -

-No lo se, algunos fantasmas que han aceptado ir al cielo nunca regresan. Así que no se si podre verlos -

Sasuke no respondió, sentía algo pesado en el corazón... algo lo asfixiaba y hacia arder sus ojos. De repente, sintió algo húmedo resbalar por sus mejillas y bajo la mirada rápidamente.

Naruto no se percato, seguía pensando en el futuro y en lo que iba a suceder con su familia cuando él se fuera.

-Pero se que ya no serás el mismo de antes, estarás más tiempo con Menma y le enseñaras tu mismo ¿Verdad? - Naruto miro al azabache - ¿Sasuke? -

Sasuke lanzo un suspiro y se tallo los ojos - Me entro basura en el ojo, mejor regresemos a casa -




No llores, mi cieloحيث تعيش القصص. اكتشف الآن