No llores, mi cielo

Capitulo 27

-Muy buenas tardes, señora Uchiha - 

-¿Mi hijo esta en su oficina? - 

-Ahora mismo esta en la sala de reuniones - 

-Es urgente que lo vea - 

La secretaria dudo por unos minutos, pero la mirada insistente de la mujer hizo que diera su brazo a torcer. 

-Entonces, acompáñeme - 

La mujer guio a Mikoto a través de dos zonas de oficinas hasta una sala de reuniones muy iluminada, le dijo que esperara allí un momento y le sirvió una taza de café. 

Cuando salió del salón, la secretaria subió primero a buscar al señor Uchiha. 

Sasuke estaba discutiendo algunos asuntos importantes con un socio. Cuando oyó que alguien llamaba a la puerta, su socio le dio permiso de recibir al invitado. 

-No se preocupe por mi - dijo el hombre. 

Sasuke le regalo una sonrisa profesional - Gracias, pase - 

-Señor Uchiha - La mujer asomo la cabeza, abrio la boca para hablar, luego giro la cabeza para mirar hacia afuera, preocupada por la mala influencia de ser escuchada, y entro de todos modos. 

-¿Qué pasa? - 

-Su madre, vino a verlo - 

No hubo ningún cambio en la expresión de Sasuke - Dile que espere - 

-Oh, señor Uchiha no haga esperar a su madre. Podemos terminar de discutir el asunto en otro momento - dijo su socio mientras tomaba su saco del sillón - Nos vemos mañana - 

-Lo acompaño a la salida - 

Mikoto se sentó un rato en el salón y giro la cabeza para mirar a través de la pared de cristal, la oficina de su hijo. 

La empresa "Sharingan" ha crecido demasiado durante estos tres años. Antes cuando su hijo se caso con el rubio, la descuido demasiado y estaba a punto de estar en bancarrota, pero cuando murió, Sasuke volvió a invertir y levantar la compañía desde los escombros.

"Suena cruel, pero que bueno que se haya muerto" Mikoto pensó. No quería que su hijo fuera un fracasado, quería que fuera perfecto, con una esposa perfecta e hijo perfecto. 

Obviamente el niño no creció con una madre y digamos que la persona que lo concibió no era buen ejemplo, pero ahora que no estaba vivo, podía conseguir una esposa perfecta para su hijo y ya tenia a alguien en mente. 

Sasuke y su socio bajaron del piso superior justo a tiempo para ver a Mikoto sentada en el sofá charlando con algunas chicas del departamento de Marketing. 

-¿Y mi hijo como las trata? - 

-El presidente es un hombre muy serio, pero amable. No es tan desalmado como algunos presidentes con los que trabaje - 

-Si, aparte es muy guapo - 

-Shhh, estas hablando con su madre - 

-¡Ay! Lo siento señora - 

Algunas chicas se rieron y bromearon. 

El ambiente de trabajo en el departamento de Marketing solía ser bastante relajado y ellos eran los que a menudo hacían horas extras y viajaban. 

Cuando varias personas vieron a Sasuke, le saludaron y se mostraron ligeramente respetuosos. 

Mikoto se levanto del sofá y le sonrió a su hijo - ¿Como has estado? Hace semanas que no visitas a tu madre - 

Sasuke no respondió y se dio la vuelta para caminar en dirección al ascensor. 

Mikoto le siguió hasta el despacho, cerro la puerta tras el y se sentó en el sillón. 

-¿Qué es lo que deseas madre? - 

Mikoto se acomodo su falda - Como he dicho, ya no vienes a visitar a tus padres. He estado tratando de comunicarme contigo, pero nunca respondes...-

Sasuke arrastro deliberadamente su silla y el sonido muy evidente, interrumpió las palabrerías de su madre. 

-Ve directo al punto - 

Mikoto ya no se anduvo por las ramas y le pregunto - ¿Por que rechazaste el compromiso con la señorita Hyuga? - 

-Porque no me gusta - 

-¿Por que dices eso? La señorita Hyuga es una mujer con clase, amable con los niños y muy inteligente. Sabe cocinar, tejer, hablar varios idiomas... ¡Es una mujer perfecta para ti, hijo! - 

-¿Por qué no la casaste con mi hermano? - 

Mikoto dejo de hablar.

Itachi se había ido a vivir a Estados Unidos y se había casado con un hombre que no podía ni concebir. Por esa razón quedo fuera del testamento y es una vergüenza para la familia. 

-No metamos a tu hermano, además la señorita Hyuga era una niña, porque créeme si hubiera tenido la edad de tu hermano se la hubiera empujado - 

La cara de Sasuke no era demasiado buena -Entonces, como dejaron que mi hermano hiciera lo que quisiera, déjenme en paz - 

-¡Las consecuencias de la libertad de tu hermano, fue ya no pertenecer a esta familia! - Mikoto se dio cuenta que estaba gritando, así que respiro varias veces para tranquilizarse - Además hijo te di la oportunidad de escoger a tu pareja y ves que ni siquiera me metí en tu relación. Lamentablemente murió y tu seguiste soltero durante tres años, me preocupa mucho - 

Sasuke se masajeo las sienes y al igual que su madre, trato de no perder los estribos. 

-Madre, ya estoy grande, ya no soy un niño que tiene que ser guiado -

-¿Estas saliendo con alguien? - 

Sasuke levanto los ojos para mirarla. 

Mikoto sonrió - Hijo, tu madre se preocupa mucho por ti - saco su teléfono móvil del bolso, jugueteo con el un par de veces y luego lo puso sobre la mesa - No quiero que salgas lastimado o que busques a una persona muerta en otro - hizo una pausa - Quien sea a quien estes viendo, solo esta jugando con tu cabeza - 

Sasuke se quedo mirando el teléfono durante unos segundos antes de levantarse, caminar y agacharse para agarrarlo. 

-Ayer alguien envió esto a la casa y se me hizo muy curioso - 

Había varias fotos en el álbum del teléfono de su madre, el Angulo y los pixeles no eran muy buenos, pero se podía ver claramente el exterior de su villa en los suburbios. Deslizando su mano por la pantalla, Sasuke se detuvo de repente en una imagen especifica. Era Naruto que estaba de espaldas, ayudando al jardinero a sembrar algunas flores. 

Su rostro no se veía, pero esa cabellera rubia era difícil de ignorar. 

-Hijo ¿Tus gustos son las rubias? -