Sexología Irken.

C.11. El avance (con tostaditas de ceviche).

Habían pasado 4 meses desde que Dib se mudó a la casa de Zim, la dinámica de ambos era muy buena, seguían teniendo relaciones sexuales muy a menudo, lo que seguía enriqueciendo la tesis del pelinegro. Ambos colaboraban con las finanzas y llevaban un trato especial. No eran novios... pero vivían como tal. Dib se mantendría comunicado con su hermana por videoconferencias, realmente no vivían muy lejos, pero el profesor membrana fue demasiado claro con no querer volver a ver a su hijo. 

-Y bien, Dib... ¿Cómo ha sido tu vida desde que te mudaste con el alienígena homosexual? -Preguntó Gaz con tono de sarcasmo.

-Pues, ha sido maravilloso, como lo que quiero, despierto a la hora que quiera, todo excelente... Solo que, no negaré que te extraño, niña problemática y sea como sea... También a papá. 

-Ugh, lo sé, desde que te fuiste ha sido todo muy incómodo, aunque no me creas, también extraño, eehh... ex-t-t-traÑO ¡MOLESTARTE, SÍ, MOLESTARTE! -Respondió la Membrana menor, tratando de disimular su melancolía con rudeza. 

-Vamos, Gaz, no puede ser tan malo.

-Sí lo es, paso la mayor parte del tiempo sola, bueno, con clonbrana pero sabes que no es lo mismo en absolutamente nada. Dib, créeme que todos los días, cuando veo a papá salir hacia el trabajo, intento hablar con él y convencerlo de que está actuando como un tonto. Pero ni siquiera se toma el tiempo de detenerse un minuto a escucharme. 

-Lo sé, Gaz...

-Pero, quiero que sepas que a pesar de todo y lo mucho que te detesto, yo te acepto tal y como eres, un cabezón que le encanta montar hombres. -Ríe- Como sea, espero poder algún día hacerlo entrar en razón... Te dejo, hermano, tengo que salir a comprar lo de la comida de hoy. Nos vemos. 

La chica no le daría oportunidad de réplica a su hermano, sin embargo, Dib se sentía conmovido y feliz de saber que la niña que le hizo sufrir por tantos años, se estaba comenzando a comportar de una manera decente y calmada. 

-Vaya... los extraño, pero ¿Me arrepiento de vivir con Zim? Para nada. -Comentó Dib para sí mismo. 

Pocos segundos después, escucharía golpecitos metálicos acercándose a la cocina del irken, era GIR, preparado para hacer su desastre diario, lo que ponía un poco de nervios al humano, pero trataba de no darle mucha importancia. 

-¡HOLA, MARY! ¡BUENOS DÍAS! -Gritó el robot con emoción.

-Hola, GIR ¿Cómo estás? 

-¡BIEEEEN! OYE MARY ¿CREES QUE PUEDAS ENSEÑARLE A MI AMO A HACER CEVICHE DE ATÚN?

-¿Qué es un ceviche? -Preguntó entre risas. El oji café no sabía, puesto a que casi toda su vida comió pizzas, sushi y lo que vendieran en delivery. No tenía idea del sabor de una comida casera. Por ello, buscó en internet qué era, le salían recetas fáciles, por lo que, se daría a la tarea de tratar de aprender para él, Zim, GIR y Mini alce. 

-GIR, parece ser que... se hace muy fácil, tengo la lista de ingredientes ¿Crees que pueda mini alce ir por lo que se necesita? 

-¡ZAS! -Respondió con entusiasmo. 

En cuestión de segundos, el alce morado traía encima una canasta de plástico con tres tomates grandes, una cebolla, pepinos, cuatro latas de atún y un paquete de chocolates. 

-¡¿Pero qué?! -Cuestionó el irken recién despierto- ¿QUÉ ES TODO ESTO?

-Eh... tu robotito quiso aprender a cocinar ceviche de atún para tí, me preguntó y bueno, pensé que sería gran idea que lo hiciéramos juntos ¿Qué opinas? 

-Ugh, no lo sé, no soy un gran fanático de la comida humana, pero bueno... Intentémoslo. 

Ambos con las manos en acción, seguirían la receta que les indicaba la computadora, Zim cortaría tomate, pero como no había manejado cuchillo (al menos en una situación que involucrara comida), por lo tanto, el instinto protector de Dib se encendería, poniéndose detrás del irken, nada tonto, pegando su cuerpo por completo para ayudar a cortar la tan preciada verdura. 

-¿Qué haces, humano tonto? -Preguntó el alien algo exaltado al sentir a su "roomie" por detrás, mientras le sostenía su brazo derecho para evitar que se cortara de alguna forma. 

-S-solo quiero mostrarte como se hace, pero tu PAK no me deja al cien por ciento. -Rió. 

-¡Tonterías, cabezón apestoso! ¿Crees que éste estúpido vegetal terrícola me vencerAAAAAAAGGH! -Gritó Zim al haberse distraído con Dib y cortarse así la piel por accidente. 

-Te lo advertí, tonto. Debes ver fijamente lo que estás por cortar. -Comentó preocupado.

Sin decir nada, el PAK del irken reaccionaría a la herida de su portador, lo cual comenzaría a parpadear en una luz roja, señal de que enviaría mecanismos de curación para hacerle cicatrizar lo más rápido posible. 

30 Minutos después. 

El desayuno estaría listo al fin, a Zim ni a Dib le parecía apetitoso comer una mezcla de verduras con algo tan apestoso como el atún ¡Y A PLENAS 9 DE LA MAÑANA! La gente acostumbraría a comer huevos revueltos, o hotcakes con fruta. Pero como el robot quería comer saludable para su amo cuando éste jamás se lo insinuó, sólo era una idea de GIR. 

-EWWWW, ¿DIB, QUÉ CARAJOS? -Preguntó el irken con desagrado al probar el ceviche. 

-¿Yo qué hice? -Replicó el pelinegro con el bocado dentro. 

-¿Por qué ésta estupidez sabe a ANIMAL MUERTO? 

-Uhhm... Tal vez porque el atún es un pescado, o sea, un animal, y pues, tiene que estar muerto para poder enlatarse. Además, no es tan malo, es la primera vez que no ordenamos comida de fuera, sólo intenta comer tranquilo. -Sonrió. 

Ante la respuesta del oji café, el oji magenta sólo refunfuñó y procedió a comer en silencio, mientras que GIR y mini alce, disfrutaban el desconocido alimento. Dib no estaba acostumbrado, pero sentía que los diversos sabores de esa receta no le desagradan del todo. 

✿✿✿

Dos semanas pasaron y los chicos estarían adoptando el hábito de cocinar, era emocionante que ambos pudieran pasar tiempo en la cocina. Por otra parte, los sentimientos eran más intensos, como se conoce, ellos tienen poco más de cuatro meses, compartiendo casa, sexo y experiencias culinarias.

Ya estaba siendo momento de que alguno de los dos cediera y aceptara sus sentimientos. 

A pesar de todo, sí. 

Peleas, golpes, persecuciones, declaraciones de odio a muerte. Todo eso quedaría atrás de algún modo. La investigación sobre la función o comportamientos sexuales de los irken, no sólo servirían para conseguir su titulación, sino también para conectarse con la otra parte para explorar sensaciones, pero sobre todo, sentimientos...