Glimpse of us [Angstpril 2023]

31. The glimpse of us.

Aslan desvía su atención de la pantalla de su teléfono para enfocarse en lo que yace enfrente, un par de ojos verdes amortiguados por el candor de los reflectores en matices fosforescentes lo espera, su delineador se encuentra levemente corrido o quizás sea la mugre en el espejo, es difícil saberlo si su equipo de tramoyas se basa en ese trío, más tarde tendrá que regañar a Bones entonces piensa. Aun con la imagen difusa intenta mantener la barbilla alzada puesto que no desea romper contacto visual pese a las muecas del resto del staff. Pasa un latido. Dos. Tres. No baja la mirada, ni es un desconocido para hacerlo. No más. Nunca más. Sonríe satisfecho.

—Eres tan narcisista, Lynx.

Está en el estadio de Nueva York.

Quiere irse a casa.

Pero Griff está siendo asqueroso con Max en el apartamento y francamente es incómodo espectarles su romance de asilo, ugh, deberían mudarse a una casa de retiro. No lo malentiendan, le alegra tanto que su hermano se haya vuelto un compositor reconocido a través de las poesías gracias a la asesoría de su novio y colega, sin embargo, adora molestarlos y acomplejarlos e incluso antes de encaminarse al concierto de hoy se los dejó más que claro diciéndoles que sino se casaban pronto irán con burritos al altar.

—¿Lynx? —Otra cosa que no le gusta es esa voz chillona y aguda—. ¿Estás escuchando o te quedaste tonto otra vez?

—Deberías tratar con más respeto a tu jefe. —Le memora—. Podría ponerte a limpiar los baños si lo quisiera de esa manera. —Un "ja" es su respuesta.

—¿Mi jefe? —Yut-Lung le da una mirada totalmente asqueada—. No te pases de la raya, es por todos mis amplios conocimientos que pudiste fundar esta empresa, tú solo eres la cara, Aslano.

—Shorter. —Ash aprieta el nombre—. Controla a tu bestia.

—¡¿Qué dijiste, hijo de puta?!

—Me escuchaste. —Sonríe—. Bestia.

—Ya, ya. —Shorter interviene evitando que se maten, acomodándose al medio detrás de bambalinas puesto que antes estaba sentado jugando con una switch—. El show será largo y no tenemos tiempo para cubrir un moretón a estas alturas, pórtense bien.

—Él empezó, bebé. —La víbora esboza un puchero grotesco—. Ash siempre empieza. —Y es ofensivo que su mejor amigo lo traicione de semejante manera pero, ¿qué puede esperar si estuvo detrás del histriónico por años?

—Ash, tú eres el mayor, compórtate.

—No me regañes, bastardo.

—Aww, tu lenguaje del amor. —Aslan rueda los ojos—. Sing hará de telonero y luego vienen ustedes.

—Lo sé. —Gruñe amurrado—. Ni lo menciones.

—¿En serio te vas a enojar con el mocoso por haberse puesto tan guapo?

—Él no...

—Y alto y atractivo y mucho más galante que tú en cualquier otra cosa.

—Tch.

No lo admitirá.

Nunca lo admitirá en voz alta.

—Ash, cinco segundos.

—Ya me tengo que ir. —El aludido se levanta con una sonrisa sañosa frente a la pareja, sus ropas son sencillas y rebeldes, es fiel a su verdadero estilo—. Nos vemos del otro lado.

Ash se prepara mentalmente para lo que viene.

Cinco.

Intenta respirar, es solo otro concierto para promocionar su agencia aún pequeña, cada artista posee un número designado y no son muchas canciones iniciales las que cantará, puede hacerlo, luego Sing lo cubrirá en una colaboración con Shorter, eso le dará descanso. La adrenalina fluye. Quema. Es una superestrella y ama lo que hace.

Cuatro.

Se pone la guitarra a través de la correa, las luces escaldan, el escenario es inmenso y el más inmenso en que se ha presentado, los gritos de los fans lo ensordecen todo, lo aman y más importante es que Aslan adora lo que hace. Con las canciones de Griffin. Con su voz. Son invencibles. Sonríe. Su corazón retumba contra sus tímpanos. Está ansioso. Ansía salir y quemar la pista con su pasión. Toda su alma quema en aquel anhelo.

Tres.

Respira, respira, respira.

Dos.

Los focos se sienten calientes en contra de su cara, las luces caen derritiéndole el maquillaje, al diablo si lo hacen, esto es puro rock and roll, miles de personas se alzan y claman ante sus nombres mientras la cortina poco a poco se levanta, develando el escenario.

—¿Estás listo? —Eiji está a su lado con ese rostro brillante y su sonrisa malditamente terca, su cabello se encuentra atado en una coleta que le sienta de maravilla. Bonito. Su novio es tan bonito.

—Estoy listo, cariño. —Se dan la mano mientras la cortina se levanta.

—Encuéntrame al otro lado del escenario.

—Siempre. —Ríe—. Siempre te encontraré.

La cortina se alza.

—Te amo para siempre, Aslan.

—Te amo para siempre, Eiji.

Uno.

—¡Buenas noches Nueva York! —Eiji relumbra sosteniendo el micrófono y paseándose alrededor del escenario—. ¡Nosotros somos Ash y Eiji y vamos a hacer un eclipse esta noche!

Aslan lo mira con adoración sin soltarle la mano sintiéndose sumamente afortunado de que inclusive estando perdidos se volvieran a encontrar. Se planta con firmeza a su lado. Mira a Max y Griff tras la cortina del escenario. Mira a sus fans. Mira a Eiji.

Y cantan.