05| Empiezo a creer

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Después de aquel inesperado encuentro en el pasillo la semana anterior, tanto como Kim y Porchay comenzaron a verse más seguido. Porchay ahora escuchaba aquella canción sin tanto dolor y solo con el recuerdo del “como se sentía” en esos días donde más traicionado se sentía.

El miedo de él no desapareció del todo, solo un poco cuando por fin kim se decidió a contarle la verdad. Recuerda ese día con claridad, cuando Kim se acercó a él a pasos lentos pero rápidos. Porchay sintió terror cuando vio la expresión de miedo plasmada en el rostro de Kim; él nunca había sido tan expresivo antes de conocer a Porchay.

Ahí fue cuando Porchay pudo liberar todo ese aire de desconfianza, empezó a confiar en él, en eso fue en lo que estuvo trabajando Kim durante toda esa semana. Pasaba más tiempo con él, lo invitaba a salir si es que tenía tiempo y en los momentos libres dejaba que Porchay —a escondidas de todos— se escabulliese en su habitación dentro de la mansión donde él vivía junto a su hermano mayor Porsche para jugar videojuego, enseñarle alguna canción o algo por el estilo.

Los guardaespaldas de Kim estaban sorprendidos tras el cambió de actitud de Kim que de un día para otro dejó de ser aquella persona que se la pasaba todo el día solo, escribiendo canciones o cantandolas a hacer lo mismo pero con la diferencia de que ahora Porchay estaba junto a él.

Kim se encargó de decirles a los guardaespaldas que nadie más que ellos podían saber acerca de la relación que llevaban. Los guardaespaldas recibieron la orden de no dejar que nadie pasara a la habitación de Kim mientras Porchay se encontraba con él ya que si alguien se llegaba a enterar sobre aquellos encuentros que tenía serían forzados a separarse, más por parte de porsche quien seguramente intentará matar a Kim por haberse metido con su hermano menor.

Transcurriendo aquel mes donde los dos estuvieron juntos todo el tiempo, donde Kim renunció a su propia casa solo para pasar el rato con porchay, a él mencionado ya no le quedaba duda de que aquel sentimiento que él sentía por Kim era mutuo, que los dos se amaban a pesar de las indiferencias y sufrimiento anteriormente causado.

Hasta aquel momento no habían formalizado nada pero los dos ya se hallaban conscientes de los sentimientos del otro, en especial Porchay que no podía pasar desapercibida la forma en la que Kim lo miraba cuando hacía cualquier cosa, cuando caminaba, cuando sus miradas se cruzaban en aquellas cenas familiares que eran llevada a cabo todos los días, en aquellas cenas se encontraban presentes la familia principal y la familia secundaria, entre ellos Vegas y Pete quienes habían llevado una relación un tanto curiosa, causante de que ahora Pete ya no fuera un guardaespalda de la primera familia.

Pero sobre todo, Porchay se encontraba consciente de la forma en la que Kim lo miraba cuando lo tenía entre sus brazos, cuando se acostaban los dos en su cama para mirar alguna película, Kim abriendo los brazos para recibir con felicidad a Porchay entre su cuerpo. Abrazarlo y darle el calor necesario para que su cuerpo dejara de temblar en aquellos días llenos de rigor.

Ahí fue cuando Porchay pudo susurrarle una clara palabra que definiría al cien por ciento sus sentimientos hacía él.

—Empiezo a creer.

Why Don't You Stay? - KimChayWhere stories live. Discover now