Capítulo 13🧧

34 18 0
                                    

No imites lo malo, sino lo bueno.

Para su proyecto de presentación de final de semestre, deberán replantearse lo explicado el día de hoy, quiero ideas funcionales e innovadoras y la solución de problemáticas importantes en el área de la educación, lo deben traer listo a final de mes, en pareja y lo expondrán delante de un jurado sorpresa.

Todos jadearon en expectación a excepción de mí, permanecí inmutada.

Los presentadores de los proyectos más excepcionales recibirán un beca, sobretodo aquellos alumnos internacionales. Eso es todo, pueden retirarse.

Me levanté de mi asiento, recogiendo mis cosas, debo conseguir un compañero para realizar el trabajo y espero con ansias recibir la tan anhelada beca. Con ella podré costear la matrícula y alojamiento en la universidad, no quiero perder esta gran oportunidad, pero temo que nadie quiera hacer pareja conmigo.

Veo como el profesor se marcha y me muevo rápidamente a conseguir mi pareja para iniciar mi proyecto.

Hola—. Me acerco a la chica de lentes sentada a mi lado—¿Quieres ser mi pareja en el trabajo?

—Oh, no, no, ya tengo pareja—. Se levanta y se aleja de mí.

El salón de clases se está vaciando y todos se niegan a ser mi pareja, es tan frustrante. Veo como no rechazan ninguna oferta por parte de sus otros compañeros y la mía sí.

Me abruma y me causa ansiedad.

Hola,¿serías mi pareja en el trabajo final?—. Le pregunto a un chico con bigotes.

No quiero obtener mala calificación por tu culpa —. Se va dejándome en el aire.

Odio que las personas sean así conmigo, pero es mi pan de cada día.

Con las esperanzas hecha ruinas me acerco al único chico que ha quedado en el salón—: Hola, ¿sería mi pareja en el trabajo?—
Pregunto con desánimo.

Miró hacia los lados—: ¿Va a responder o me ignorará?—. Pregunto nuevamente con la inseguridad haciendo mella en mí.

—¿Me estás hablando a mí?—Pregunta confundido.

Usted es el único en el salón, aparte de mí.

—Nadie ha querido hacer grupo conmigo, así que sin ninguna otra opción, acepto.

—¡Gracias, muchísimas gracias!—. Aletee las manos con emoción, luego aplaudí, ¡si tendré pareja para el trabajo está vez!.

Él me miró contrayendo el seño y reprimi mis gestos en un auto reflejo protector de burlas y comentarios indeseados.

—¿Cuando nos podemos reunir?

Ahhh...—Duda un poco—. ¿Qué tal el lunes?, se me haría más fácil en mi departamento, ¿No hay problema?.

—¿Donde queda su departamento, señor...?

—Long Chen.

Sabía perfectamente su nombre, se los nombres de todos mis compañeros aún así ellos no se aprendan el mío, más quería que él me lo dijera.

Mi nombre es...

—No me interesa tu nombre—. Espeta con odiosidad—. Te diré chica, ¿Está bien?.

Asentí temerosa de su carácter y de sus palabras, pensé que era amable.

Me indicó la dirección de su departamento y estaría ahí el lunes a las tres de la tarde con ideas previas para iniciar nuestro trabajo.

Justicia De Dios(Sin Editar)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt