19.(HC) nunca se abandona a la familia

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HARRY

LIII

Ron era el que estaba más interesado en saber acerca del tal chico Malcolm.

—Es fan de la adivinación —contó Hermione, sin ocultar su desagrado por la asignatura—. Como el mayor que he conocido.

—¿Peor que Trelawney?

Ella negó con la cabeza, alegando que él era mucho más simpático.

—¿Simpático? —repitió Ron cuando subía las escaleras con Harry esa noche, luego de haber pasado una hora intentando estudiar (sin éxito) y haciéndole compañía a Hermione, quien se quedó en la sala común— ¿Qué significa eso? ¿Yo lo soy?

Harry le dijo que sí le parecía que lo era, pero no estaba del todo seguro de qué implicaba. Entraron en silencio a la habitación. Sus compañeros, Seamus y Dean, ya estaban dormidos y la única luz que entraba provenía de la ventana abierta. Se cambiaron de ropa y, justo antes de meterse en la cama, Harry echó una mirada hacia el exterior. Y allí estaba, el mismo animal de pelaje oscuro que había visto en otras ocasiones.

Sin despegar sus ojos de él, llamó a Ron en un alarmado susurro.

—¿Lo ves?

Tuvo que señalar un lugar en el borde del bosque hasta que lo notó.

Ron dejó de restregarse un ojo.

—¿Qué es eso? —murmuró, asustado.

—Un presagio —respondió Harry, recordando una de sus clases de adivinación— de muerte.

—Según Trelawney, quieres decir —puntualizó Ron, cerrando la ventana y las cortinas—. Podría ser un animal que salió del bosque. Hagrid ha de saber algo. O Hermione. Ella no cree en esas cosas. Creo que nosotros tampoco deberíamos.

Harry no tuvo el valor para decirle que ya lo había visto varias veces ni para recordarle que Black todavía debía de estar detrás de él, planeando su próximo movimiento. Ambos se recostaron, en una calma sepulcral que pronto fue interrumpida por los suaves ronquidos de su mejor amigo. Se removió en la cama, sin saber qué le diría a Black si aparecía en su habitación otra vez. Quiero dormir , pensó, por un largo tiempo .

No podía.

Tenía tantas emociones estancadas en el medio de la garganta.

Si debía estar preocupado por Black, ¿por qué no podía borrarse de su cabeza la expresión de Cedric cuando abandonó el campo de esa forma? Dos sospechas se volvían claras como la luna: las cosas iban a complicarse en cualquier momento y gustar de alguien podía llegar a ser más doloroso de lo que había pensado.

LIV

Definitivamente darte cuenta de que tienes sentimientos por una persona a unas pocas semanas de los exámenes de fin de curso no era buena idea. Menos si se trataba de uno de los chicos más populares, tan inalcanzable como guapo, y no podías dejar de pensar en él. O en el hecho de que no era lo que Harry habría imaginado alguna vez. En contadas ocasiones había visto a dos personas del mismo género que parecían parejas en el centro de la ciudad, y sus tíos hacían todo lo posible para que su primo, Dudley, no los viese, sin poder ocultar una expresión como si hubiesen olido algo en mal estado.

Harry no lo comprendía, aunque así le miraban a veces a él.

Que a ellos les desagradara algo era exactamente lo que necesitaba para saber que estaba bien , porque no había una sola cosa en la que Harry se pusiera de acuerdo con ellos. Ni con sus compañeros en su anterior escuela muggle, que usaban la palabra gay como un insulto, como una broma de la que nadie quería ser el objetivo pero no tenían problema con formar parte.

El chico de mis sueños -HEDRIC (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora