Capítulo 17

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Akila y Draco estaban en el Callejón Diagon, ambos llenos de bolsas con distintas cosas cada uno.
Aks al fin había cumplido su promesa de comprarse ropa nueva y estaba feliz con eso, Draco compró cosas para su escoba que prometió que pronto irían a volar juntos en ella.

Akila estaba en su habitación colgando en el perchero los bellos vestidos y admirando la lencería tan sexy que se había comprado, se mordió el labio pensando en qué tal vez a Bellatrix le gustaría.

Bajó a cenar y como siempre el clima era de lo más agradable, aunque había algo que no la dejaba muy contenta, Bellatrix no la había mirado ni una sola vez, tenía su vista enfocada en su plato o en algo a su alrededor, se preguntó el Por qué, se había puesto uno de sus nuevos vestidos, este era negro con un poco de escote y ajustado. "Bueno tu te lo pierdes" pensó, aunque su mente empezó a crear escenarios donde Bellatrix le arrancaba la ropa interior, sacudió la cabeza golpeándose mentalmente

Cuando levanto la vista se encontró con los ojos de Bellatrix mirándola profundamente, pensó que la bruja iba a poner una sonrisa ladina como hacía siempre, pero esta solo se dedicó a mirarla seria y directamente a los ojos, fue demasiado para la menor y rompió el contacto visual.

El malestar de Bellatrix era a causa de que estaba insatisfecha, todas las malditas noches se masturbaba con Akila en la cabeza, quería hacerla suya de una vez pero las veces que lo intento las interrumpieron, cuando por fin levantó la cabeza para mirarla (aunque ya la había visto con ese hermoso vestidos que solo aumentaba su deseo de follarla) vio que la chica la miraba así que aprovecho y se metió en su mente, ahí fue cuando vio que los deseos de la chica eran igual a los de ella, así que se le ocurrió algo.

⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿ ⟿

Akila fue la primera en retirarse de la mesa, los escenarios que estaba creando en su mente fueron suficientes para lograr que se excitara, así que a toda velocidad se dirigió a su habitación, cuando estaba a punto de desnudarse enfocó su vista debajo de la puerta, había un pequeño papel así que se acercó y lo recogió, tenía una letra con perfecta cursiva y bastante elegante.

𝓮𝓷 𝓶𝓲 𝓱𝓪𝓫𝓲𝓽𝓪𝓬𝓲ó𝓷 𝓮𝓷 𝓭𝓲𝓮𝔃 𝓶𝓲𝓷𝓾𝓽𝓸𝓼

𝓑.𝓑.𝓛

Sabía de sobra de quien se trataba.

Había cosas que Akila jamás hubiera imaginado, jamás hubiera imaginado tener otra familia, ni tener magia, pero de lo que estaba segura es que jamás imaginó estar apunto de tocar la puerta de Bellatrix Lestrange.
Tomó una respiración profunda y dio tres toques a la puerta, a los pocos segundos la puerta se abre mostrando a la bruja nuevamente sería,hace un ademán para que entre y la chica obedeció.

Su habitación era más oscura que cualquiera que haya visto, aunque por lo poco que se veía era elegante.
La bruja mayor se paró detrás de la chica tomándola por la cintura, acercó su boca su oído y la susurro

-"Así que querías que te arranque la ropa interior"
Si Akila ya estaba húmeda, ahora lo estaba muchísimo más, no contestó pero cerró los ojos, la bruja movió su cabello igual de rizado que el suyo y empezó a besarle el cuello, aunque no como lo había hecho antes sino que ahora lo hizo suavemente.

Akila soltaba pequeños gemidos pidiendo más, mucho más, así que desesperada se dio la vuelta y tomó a la bruja por la cintura, ella también quería tener el control así que empujó a Bellatrix contra la pared y aprovechó y besó, succiono y chupó su cuello, si Bellatrix quería ir suave, que lo hiciera, pero ella no.

Además tenía que vengarse, por su culpa tuvo que usar vestidos de cuello alto por una semana completa.
Bellatrix se sorprendió un poco por la rudeza de la menor, pero la excitó tanto que le permitió continuar haciéndole creer que tenía el control sobre ella.

𝗉𝖾𝗋𝖽𝗂𝖽𝖺 𝖾𝗇 𝗍𝗎𝗌 𝗈𝗃𝗈𝗌 𝗆𝖺𝗋𝗋𝗈𝗇𝖾𝗌Where stories live. Discover now