~PERFECTAMENTE IMPERFECTOS~[EDITANDO]

•CAPÍTULO 7•

LUNES.

La relación con Mateo había fluido demasiado bien. DEMASIADO para mí al menos. La tarde del beso en la oficina de mi padre,retumbaba por toda mi cabeza sin dejarme pensar en otra cosa o siquiera concentarme en los estudios.

No sé que había pasado,no comprendía absolutamente nada y no quería distraerme en estos momentos de mi vida con el tal "amor". Pero mierda lo rico que se sintió,como enredaba su lengua lentamente con la mía,apretando mis labios y mordiendo el inferior. Jamás había sentido algo parecido y tampoco quería experimentar más de ahí. Tal vez fue un momento de confusión de él,habría pensado que yo era su novia o algo.

Me negaba rotundamente a aceptar aquel sentimiento tan a flor de piel que experimentaba cuando lo tenía cerca. Ni siquiera con Edward me había pasado tal efecto,mi ex novio,el primero y el último por lo menos hasta ahora y dentro de unos años mas.

Era lunes a las 06:00Am,apagué el despertador,me estire en mi cama deseando que fuera fin de semana y dormír un rato más.

Finalmente me levanté de la cama,cepillé mis dientes y lavé mi rostro. Me miré al espejo luego de mojar mi cara y allí me fijé en mis ojos,aquellos que desde hace muchos años,seis más precisamente, estaban apagados. No encontraban el brillo ni la luz al final del túnel pero aún así se abrían cada mañana tratando de disfrutar la luz del día.

Regresé de mis pensamientos y volví a mi habitación para colocarme el uniforme del Instituto. Preparé mi mochila y bajé a desayunar algo rápido. Ya eran 06:30 am,debía apresurarme.

Amaba la soledad. En estos días la había disfrutado tan bien yo sola con mi alma. Y en las mañanas sólo me encontraba yo en la cocina y mi padre,pero este desayunaba en su oficina,era aficionado de estar todo el día allí encerrado entre montañas de papeles.

Terminé mi café con unos bizcochos que encontré y corrí hacia la puerta esperando que salga el chofer del garage.

Si. Mi padre había quedado con el temor del robo por lo que contrató chofer particular para que me llevase y recogiera del colegio. Algo estúpido y aburrido para mi, por que ni siquiera lo conocía,tampoco me interesaba hacerlo. Era mucho mayor,apenas si podía ver con los lentes que llevaba y no disfrutaba del camino. Cuando iba sola veía volar libremente a los pájaros,el sol acompañandome y toda la belleza de la naturaleza.

Llegué 07:005 am,cinco minutos tarde pero no pasaba nada o eso creí. El profesor Whestenden me regaño y escribió una nota en su cuaderno.  Contaba las faltas o llegadas tarde de cada alumno,algo ridículo pero así era él.

Fue hora del receso de 20 minutos,a las 09:00 am.

Fui hacia la cafetería y sólo saqué unas galletas y una Coca-Cola. No me apetecía sentarme en los bancos de allí,por lo que disfrute el día soleado afuera.