~PERFECTAMENTE IMPERFECTOS~[EDITANDO]

•CAPÍTULO 41•

VICKI.

Era las 07:00 AM de un lunes. Desperté en casa de Soff.

Le debo la gloria a Vero,su madre,por aguantarme siempre aquí en su casa.

Luego del distanciamiento con Mateo,no quería saber nada. No entendia su ¿enojo? y el rechazo ante mi caricia el día anterior.

Cuando él se fue por la puerta,lloré como imbécil que soy. Tomé una pequeña maleta y mi mochila con los útiles. Comenté con Soff y me permitió quedarme con ella.

A mi padre le oculté la situación respecto Matt y yo. No quería preocuparlo y estaba tan atareado con un nuevo cliente de muy mal agüero. Cuando el momento de la mudanza llegó,solo le dije que Matt estaba en un empleo extra y llevaría yo misma las maletas junto con Blitz,el chofer y seguridad de la mansión.

Al llegar al apartamento de Mateo,abrí la puerta,pues semanas antes Matt ya había creado una copia de las llaves para mí. Coloqué las maletas más grandes en la habitación de huéspedes y me largué de allí. Aún no sabía si viviría con él,si nuestra relación cambiaría o me tendría que mudar al campus,cuando comience en la uní.
Por ahora solo me llevé mis bolsos necesarios a casa de Soff,donde me hospedería unos días,tal vez semanas.

Así que aquí estába. En media hora partiriamos a nuestras distintas Universidades. No quise molestar mucho así que decidí ir en transporte público a Reinhardt y a Soff la llevaría Vero a Clark Atlanta.

[...]

Luego del desayuno con Soff cada una tomó su camino. Nos despedimos y la vi alejarse en la carretera con su madre. Una lágrima había caído en mi,la quité rápidamente y caminé hasta la estación de micro para comenzar mi primer dia universitario.

Compré el pasaje y subi al transporte. Al sentarme tomé mi móvil y miles de llamadas pérdidas llenaban mi fuente de notificación.

Claramente eran de Mateo por lo que no le di atención. Mi padre quería saludarme y estar en mi primer dia universitario,pero se lo negué. No quería que vea mi vida ahora,hecha un desastre.

El no tener a Mateo cerca y que me aporte esa seguridad que él hacia,me llenaba la cabeza de dudas,miedos e inseguridades. Los recuerdos de mi infancia habían abarcado otra vez en mi y Mateo sólo sabía estar con papeleos. Tenía pesadillas nuevamente y Sofi era la única que estaba,y estar con ella significaba beber. Y por primera vez entendía las borracheras que se pegaba Sofía. No sentías dolor alguno con el alcohol en tu sangre y todo era risa y felicidad. La mierda de vida no te ahogaba y podías vivir a pleno. Lástima que su efecto dure tan poco.

Oli llegaría en dos días. Me aferre a esa felicidad para pasar estas horas y este primer gran día,de la mejor manera.

Luego de quince minutos llegué a la gran REINHARDT. Todo era sensacional,pero temia perderme en ese gigantesco edificio. Millones de estudiantes caminaban en su mundo y todos con sus semblantes ansiosos y preocupados. Sujete las tiras de mi mochila con nervios y respiré la brisa que se apreciaba.

Caminé hasta llegar a las escaleras,lugar en donde me estanqué e inmovilicé por completo. No podía dar un paso más. De repente tenía miedo,un terrible miedo.

Me sobresalté tras la voz de una chica.

---¡Ey! ¿primer día?---- asenti con leve sonrisa

----Sé lo que se siente----¡Ven! Te ayudaré--- dijo la rubia. Era joven,pero unos pocos años mayor que yo. Alta y ojos azules claros. Su sonrisa te daba seguridad y parecía saber lo que hacia.

La chica me abrazó así de repente y me ayudó a subir los escalones. Finalmente entramos. ¡Por Dios! Estallaria de nervios. ¡Había entrado!

----Soy Lenna---- se presentó estirando su mano.