Más allá del amor humano

Una gincana

A la mañana siguiente, Saori decidió levantarse muy temprano, casi no durmió. Su mente no paraba, así que fue a la oficina a ordenar unos papeles relacionados con el orfanato, los leyó y releyó y no encontró nada. "Qué raro, todo parece estar en orden" sus pensamientos fueron interrumpidos por un golpe en la puerta.

- Adelante - Saori miró para ver quien era, en realidad esperaba quien le había quitado el sueño, pero era Tatsumi.

- Buenos días, señorita. - Tatsumi la observó preocupado - ¿Se encuentra bien? Estoy preocupado porque al parecer anoche no comió, Jabu dijo que parecía disgustada...

- Gracias por preocuparte, Tatsumi - Saori le miró con cariño - pero estoy bien, sólo estaba cansada, quería darme un baño y acostarme, lo siento si te he preocupado... pero ya que estás aquí necesito de tu ayuda

- Por supuesto, señorita - se acercó Tatsumi - Estos son los papeles del orfanato, ¿pasa algo?

- Sí, ayer me enteré  que el orfanato podría cerrar por falta de fondos, aunque la fundación siempre ha estado detrás de que a estos niños no les falte de nada, pero mirando los papeles, no veo nada malo en las finanzas, ¿cómo puede explicarme esto?

- Déjeme comprobarlo - Tatsumi cogió los papeles y empezó a analizarlos - Señorita, mientras lo compruebo,  ¿por qué no va por un café?, no ha comido desde ayer, creo que tardaré un rato

- Ah, Tatsumi, siempre preocupado - Saori suspiró, y Tatsumi la miró cariñosamente.  - Está bien, ¡ya regreso! - Saori salió de la oficina y se encontró con Jabu.

- ¡Buenos días, señorita! - Jabu se quedó admirándola. Saori llevaba un traje negro con falda hasta la rodilla y camisa blanca, y unos tacones negros completaban el look - Estás muy guapa... ¿Cómo te encuentras? Ayer estaba preocupado - Jabu se acercó y cogió una de las manos de Saori entre las suyas, que se molestó por el gesto.

- Estoy bien, Jabu, agradezco tu preocupación - ella le soltó la mano - Si me disculpas, tengo un poco de prisa - Saori se apartó de él, y estaba a punto de irse cuando fue detenida.

- Saori, respóndeme una pregunta - Jabu la detuvo - ¿Fue Seiya quien te dejó esí ayer, ¿no? Sé que él...

- ¿De qué estás hablando, Jabu? ¿Estás insinuando que Seiya me hizo algo?- Saori se acercó a él enfadada - No hables de lo que no sabes, Seiya nunca me haría daño, tan sólo charlamos, nada del otro mundo. Además, no te debo ninguna explicación - Saori se dio la vuelta y se alejó a toda prisa, Jabu se quedó sin poder decir nada.

- ¿Qué he hecho mal? Sólo estaba preocupado... - Jabu se dirigió al salón, donde ya se encontraban Shiryu, Hyoga y Shun, que vieron que estaba sumido en sus pensamientos.

- ¿Sucedió algo, Jabu? - preguntó Hyoga - ¡Pareces triste, lo sé! Ayer descubriste con quién estaba Saori - Jabu le fulminó con la mirada - ¡Eso es!

- ¡Basta, Hyoga! - Shiryu se acercó - Vamos, necesito hablar con Saori

-¡Muy bien! Vamos -Hyoga siguió a Shiryu, Shun ya se había ido y los esperaba cerca de las escaleras.

- ¿Por qué te gusta burlarte de él, Hyoga? - Shun lo miró desconcertado - Todos somos caballeros, deberíamos unirnos.

- Tienes razón Shun, es solo que a veces me pone de los nervios, es entrometido y se cree un buen tipo - Explicó Hyoga - Pero ya no lo moelstaré más, porque he decidido volver a Siberia.

- ¿Es una broma? ¿No te vas a quedar unos días más?

- Yo también he decidido volver a los 5 picos - dijo Shiryu, en ese momento Saori los escuchó.