End game [Completa]

CAPÍTULO 21

No puedo de dejar de agradecerles la oportunidad que le están dando a esta historia. Estoy trabajando para que sea algo que disfruten muchisimo como yo disfruto escribiendola.

¡Gracias!

A leer, pequeños demonios.

......................

Summer

Me quedé en silencio durante unos instantes. El pecho de Chase subía y bajaba aceleradamente.

Me acomodé a horcajadas de él.

—Está bien, Chase —le dije y me apresuré a abrazarlo—. No fue tu culpa —le susurré al oído—. No fue tu culpa —repetí.

Sus brazos se aferraron a mí como si buscara refugio. Le acaricié el cabello, pasando mis dedos entre las hebras oscuras. Sollocé con él. Me destruía verlo así, ver como se había estado culpando por una muerte sin sentido, saber que la culpa se lo estaba devorando desde hace mucho tiempo.

Ahora entiendo porque no puede volver a ver a su hermano.

Ahora entiendo su desesperación cuando quise subir al auto mientras discutiamos.

Ahora entiendo muchas cosas.

Volvió a mirarme con los ojos brillosos.

—Nunca podría perdonarme si te pasara algo a ti —murmura tomándome del rostro—. Haría cualquier cosa si supiera que eso te mantendría a salvo —Rodeé su cuello con mis brazos y lo abracé con fuerza—. Entiendo si quieres alejarte de mí, de verdad lo entendería. Pero...

—Shhh, está bien, Chase. No fue tu culpa.

—No me dejes, por favor —respiró contra mi cuello—. Sé que es muy egoísta, y si quieres irte no voy a detenerte, pero no voy a dejar de pedírtelo. No quiero que me dejes.... —dejó un beso allí y se volvió a mirarme—. Contigo tengo ganas de vivir, Summer. De vivir de verdad... Quiero vivir contigo.

Me quedé dura ante su súplica, no dejé de acariciarlo.

—¿De verdad crees que te vas a deshacer de mí tan fácil? Creí que me conocías más que eso, Chase.

Su boca se curvó hacia arriba. Sus brazos me apretaron contra él. Le devolví el abrazo efusiva. Mi corazón no dejaba de acelerarse. La piel me quemaba debajo de donde sus dedos me acariciaban.

Puede que no tenga un tatuaje, pero Chase estaba debajo de mi piel y no podría sacarlo de ahí nunca.

—Haré todo lo que esté a mi alcance para que sigas queriendo estar conmigo todos los días.

—Quiero estar contigo... estoy... —me interrumpí antes de decir una estupidez.

Casi nos mandas al muere, estúpida.

No podemos hacer esto ahora. No en esta situación. Si estamos juntos de verdad vamos a olvidarnos de porqué estamos aquí. Solo necesitamos terminar con esto y luego...

Luego, ¿qué? ¿Todos felices comiendo perdices? No querida, sabes muy bien que ese no es un final posible en esta realidad.

Mierda.

Lo abrazo más fuerte internado ocultar mi miedo. No deberíamos haberlo hecho, no me arrepiento, pero no deberíamos haber dejado que pase. Ahora todo es más complicado. Ya teníamos problemas y lo único que hicimos fue buscarnos un problema más grande sin resolver el principal.

Carajo.

Quizás nunca podamos estar juntos.

Algo se estancó en medio de mi pecho ante el pensamiento de no volver a ver a Chase.