Algunos dicen que la curiosidad puede ser mala, de ahí refrán "la curiosidad mató al gato".
Pero otros, como San, no piensan así. La curiosidad puede traer cosas buenas, como un hermoso tritón.
•San: Top
•Yeosang: Bottom
•M-preg
•Mención de otros id...
Yunho abrió con cuidado la puerta tratando de no mover mucho al cuerpo en sus brazos.
Al ingresar a la casa fue directamente a las escaleras que daban al segundo piso, caminó unos poco metros y entró a la habitación de Jongho. Colocó el cuerpo adormilado sobre la cama, se rio levemente por la apariencia del mayor, Jongho siempre se preocupaba de verse bien pero ahora se veía graciosos con el cabello alborotado, aunque Yunho seguía pensando que era lindo.
Arropó al pelirrojo y se dispuso a salir de la habitación, lo hubiera hecho de no ser por un agarre en su muñeca. Volteó la cabeza hacia Jongho que tenía los párpados levemente abiertos, sus iris se veían acuosos, algo que le preocupó.
-¿Hyung?
-Quédate, Yuyu.
Yunho tomó la mano de Jongho que sostenía su muñeca y la quitó para ponerla en la cama.
-Me voy a quedar hasta que te duermas ¿sí? -el peliazul se sentó en el piso al lado de la cama.
Jongho asintió débilmente, aún tenía sueño.
Desde pequeño, Jongho ha tenido la manía de dormir con alguien o cerca de alguien, a veces las pesadillas se hacían presentes o solamente porque se sentía muy solo. Sus padres habían viajado en Navidad para visitar a sus abuelos y pasar las fechas decembrinas y parte de enero en la ciudad de ellos por lo que no se encontraban en casa.
-Yunho.
- ¿Mmm?
-Tengo un mal presentimiento.
Jongho se sentó en la cama con las sábanas cayendo en sus piernas, Yunho aprovechó eso y se sentó a un lado del mayor.
- ¿A qué te refieres?
-Presiento que algo malo va a pasar, algo grave.
-Que algo… ¿te pasará?
-Eso es lo que más me preocupa, no sé si es a mi o… a alguno de ustedes.
Podía verse el miedo y preocupación en los orbes chocolates de Jongho. Como consuelo, Yunho le tomó la mano que estaba encima de la cama acariciando el dorso de esta con su pulgar.
-Tranquilo ¿qué podría pasar? ¿San se quedará calvo por teñirse? ¿Hongjoong engordará? ¿Ya no seré el número uno de la universidad?
Jongho soltó una leve risa, Yunho sabía siempre como animarlo.
-Prométeme que no me dejarás si algo malo pasa.
Jung soltó la mano del mayor para tomar su cintura y pegarlo a su costado y casi automáticamente, la cabeza del pelirrojo cayó en el hombro de Yunho.
-Pasen cosas buenas o malas siempre podrás contar conmigo.
Y como Yunho lo prometió, se quedó hasta que Jongho volvió a dormirse, ya estaba caminando hacia la puerta de salida y cuando llegó salió sin mirar atrás tratando de acomodar los sentimientos que tenía por el mayor.
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