Monster Hunter : The Apocalypse

11 - La primera prueba

Entre árboles y ramas cruzadas, Lars acumulaba toda la mayor cantidad de Om que le fuese posible en sus piernas para avanzar más y más aprisa. Detrás suyo corría Nanami tratando de seguirle el ritmo. La chica no era tan ágil esquivando los obstáculos de aquel bosque como lo era Lars pero hacía todo lo posible por no quedarse más atrás.
- ¿Vez algo? - Le preguntó a Lras.
- Aún no, tenemos que adentrarnos más en el bosque.
- ¿Por qué todavía nadie nos ataca?
- Debe de ser porque están esperando a que volvamos con la recompensa...

...

- La primera prueba... - Explicaba la wyverian llamada Tan. - Consta de encontrar un huevo wyvern. Hemos escondido alrededor de 10 por todo el bosque. Deben utilizar sus habilidades de búsqueda y rastreo para hubicarlos y regresar aquí con ellos.
- Es obligatorio que hagan equipos de a dos en esta misión, así mediremos en parte su trabajo en conjunto. Como ya deben de suponer aquellos que no consigan traer un huevo wyvern dorado serán descalificados por tanto serían en total 20 ganadores que pasarían a la segunda prueba. - Dijo la gemela Min.
- En esta prueba se permite hacer lo que sea, pueden robar la recompensa a otros equipos que ya la hallan obtenido pero no está permitido que maten a nadie ni mucho menos herir de gravedad.
- Y no está demás decir que si rompen los huevos se irá reduciendo el número de aprobados.
- ¡Que comience el Torneo! - gritaron ambas hermanas levantando las manos, lo que todos tomaron como el inicio de partida.

...

- Creo que siento algo - dijo Nanami desde atrás de Lars.
- ¿Que cosa?
- Es una presencia muy débil. Es como de un ser que sueña, algo que aún no ha visto la Luz.
- Suena como la descripción de un huevo, tal vez halla alguno de una criatura marina.
- Así es. Pero está muy lejos, tendremos que correr mucho más. - declaró a Lars y este aceleró su paso.
- ¡Espera! ¡Espera! - Gritó Nanami. - No soy muy buena con la energía Om, no puedo ir muy rápido.
Lars se paró en seco, lo cual hizo que Nanami chocase con su espalda y sin ella preveerlo fue cargada por el chico quien empezó a correr aún más veloz.
- Cielos, esto es muy incómodo. - dijo la chica tratando de sujetarse del cuello de Lars.
- Pensé que teníamos confianza.
- No lo digo porque esté nerviosa, es que estar así es verdaderamente incómodo.
- Aguanta un poco. Dime hacia donde queda el huevo.
- Estamos avanzando hacia el noroeste, inclina tu ruta hacia el nornoroeste.
- Entendido.
- Siento la presencia de criaturas marinas cerca del huevo, me parece que está bajo el agua.
Esquivaron árboles, ramas, rocas y avanzaron según las indicaciones de Nanami hasta que finalmente habían llegado hacia un río que atravesaba el bosque.
- El huevo está debajo del agua. A jusgar por la distancia que siento del huevo hacia nosotros el río es profundo, tendré que bucear para traerlo. - Analizaba la joven.
- ¿Estas segura de que quieres hacerlo tu?
- Si, no hay problema. Soy bastante buena nadando, eso tu lo sabes.
- Deacuerdo, entonces ve.
Nanami se desprendió de su arma, sus flechas, su calzado y de todas las partes pesadas de su armadura dejando solo su cuota de malla y sus prendas interiores para luego lanzarse al agua de cabeza.
Lars se quedó allí sentado obserbando el agua del río correr mientras se mantenía alerta por sí algún participante se aparecía para envoscarlo y dejarlo fuera de la competencia.
Nanami tardó aproximadamente 8 minutos en volver con un huevo del tamaño de un valde de agua, era color cián con patrones en forma de espiral a su alrededor.
- Ya me estaba preocupando. - Dijo el muchacho. - ¿por qué la demora?
- Habían unos cuantos peces venenosos alrededor del huevo, no quería acercarme tan precipitadamente. - le contestó ella mientras se colocaba todas las prendas que se había quitado, luego de haberle entregado el huevo a Lars.
- Más que eso parece que te tomaste tu tiempo, ¿por que simplemente no usaste tus "poderes" y alejaste a los peces y listo?
- Tenía miedo de hacerle daño al huevo.
- bueno... De todas maneras ya lo tenemos, vamos rápido...
Antes de que que ninguno de los dos lo viese venir, un sujeto le arrebató el huevo a Lars de las manos y salió corriendo y sin tiempo de reaccionar otra persona los empujó haciéndolos caer al suelo. Un dúo de competidores los había tomado desprevenidamente y les robaron el premio para luego perderse entre los árboles, tal y como habían temido.
- Maldición, bajamos la guardia - se quejó Lars parándose de inmediato.
- El huevo no está muy lejos. - dijo Nanami mirando en la dirección en la que habían huido. - todavía podemos alcanzarlos.
La chica se subió en la espalda de Lars y este acumuló toda la energía Om que le fue posible en sus piernas para arrancar el paso de una manera casi fugas.
La silueta de aquellas dos personas escurriendose entre los obstáculos del bosque poco a poco se hizo visible. Iban camino de regreso al punto de partida, donde serían uno de los equipos ganadores del torneo.
- Esos inútiles. - dijo Nanami tomando una de sus flechas y apuntándole hacia ellos con el arco por encima del hombro de Lars.
- ¡Espera! - le dijo este. - ¿Acaso quieres matarlos?
- Claro que no. - dijo ella sin dejar de apuntar. - solo los dañaré no tan gravemente.
Y disparó la flecha la hacia adelante dejando un silbido tras de sí y atravesó la pierna del compañero del que cargaba con el huevo, en un punto descubierto de su armadura.
El chico pegó un grito y calló al suelo todo adolorido. Su camarada se detuvo sin entender que había pasado hasta que vió aquel proyectil atravesado entre la extremidad locomotora de su acompañante.
- ¡Bien echo! Has mejorado mucho tu puntería. - felicitó Lars a su amiga avalansándose rápidamente contra el jugador y golpeándolo ferozmente con el mango de su espada en la mandíbula.
En ese preciso instante Nanamí había saltado de la espalda del chico y atrapó el huevo en el aire.
El mucho que estaba herido por el disparo de la joven, apretó sus dientes y sacó la flecha entre lágrimas que salían de sus ojos y de uno de los bolsillos de su cinturón sacó un rollo de vendas con el cual empezó a cubrir la zona herida.
- No hagas esfuerzo Percy. - le dijo su compañero frotándose la boca por el golpe que había recibido. - Yo me encargaré de todo, todavía podemos ganar. Después del largo viaje que hemos echo, yo, Trevor Glimens...
Sin prestar atención a las palabras del ladrón del huevo, llamado Trevor, Nanami le Susurró a Lars algo al oído, como si se estuviera vurlando del hombre por lo repentinamente dramático del discurso que había empezado a pronunciar.
- ¡Oye! - Dijo el sujeto ofendido.
- Si vas a atacar aslo y déjate de rodeos, pareces un afeminado con tanta charla.
El hombre llamado trevor se enfureció tanto con aquella respuesta que pasó de paliducho a rojo tomate. Desenfundó su espada con forma espartana que traía colgada en su armadura y se abalanzó contra ella.
Reaccionando justo a tiempo, Lars interpuso su arma, la cual ya estaba desenfundada y con ella le produjo un ligero corte en la mejilla que hizo retroceder al atacante.
- Yo que ustedes mejor me rendiría, no saben con quien se están enfrentan...
Pero antes de tan siquiera terminar su nuevo discurso tornó sus ojos en blanco y calló reventado en la tierra emitiendo un profundo y sonoro ronquido.
- Phiw - dejó escapar Lars. - fue un buen plan, escurrir en mi espada parte del somnífero, que nos dió Hana antes de llegar a la ciudad, para dejarlo fuera de combate. - le dijo a Nanami. Al parecer los susurros al oído no habían sido una burla, si no más bien un pequeño y sencillo plan que apenas les llevó una corta cantidad de tiempo.
Su compañero "Percy", miró horrorizado la escena he hizo ademán de alejarse cuando vió a Nanami acercarse con un frasco de líquido verde hacia él.
- No te preocupes. - le dijo al joven herido dejando el huevo en el suelo para atenderlo. - esto es una posión de curación. Si la bebés estarás mejor.
El sujeto no debía de saber mucho de pociones puesto que miró desconfiado la ofrenda de la chica pero al final cedió y la bebió. Se quitó la venda y contempló como el agujero de la flecha había comenzado a cerrarse muy lentamente hasta cicatrizar completamente y quedar como nuevo.
- Muchas graci...
Pero sin terminar de hablar calló completamente dormido. Tal y como su charlatán camarada, calló rendido en sueño.
- ¿Mesclaste lo que quedaba del somnífero en la poción curativa? - dijo Lars, evidentemente, sin esperarse aquel suceso. - Eres una trampa viviente.
- Que esperabas, así no tendríamos que lidiar con él en caso de que se nos puciera en contra después de curarse, además... el fue el que nos tiró al suelo, todavía me duele la pompa.
Lars golpeó su frente con la palma de su mano y negó con desaprobación.
- No pasa nada, - dijo Nanami, regrsando junto a Lars. - ahora solo tenemos que regresar a la ciudad para ganar la... - Tras dar un segundo paso hacia su amigo un fuerte crujido le precedió, como si algo se hubiese quebrado.
Mirando hacia abajo, ambos contemplaron el huevo por el que habían pasado tanto esfuerzo, destruido por el pié de la chica.
- Acabas de... - dijo Lars con un hilo de voz y con los ojos abiertos como platos.
- No lo digas. - le contestó ella con una sonrisa confusa y con cara de haber visto un fantasma.

- ¡ERES UNA TONTAAAAAAAA!

...

Escondidos en la copa de un árbol Nanami y Lars observaban atentamente la llegada de otros dos competidores más que cargaban un huevo de la competencia. A diferencia del que habían encontrado esta era de color verde y presentaba texturas ásperas.
Debido a que Nanami había pisado el premio que los haría ganar, ahora habían obtado por hacer el trabajo de robar. No era muy limpio pero querían ganar a toda costa. Los dos competidores que se les acercaban eran dos mujeres, una de ellas tenía el cabello castaño claro, con una larga trenza que caía sobre toda su espalda. La joven medía apenas un metro con 50 cm. Tenía los ojos castaños con expresión de timidés, sobre su cabeza llevaba una boina roja a juego con aquel sencillo uniforme con falda y los sapatos que traía que en nada se parecía a la armadura de un aventurero y estaba armada con una especie de vara con patrones de agujeros, tenía pinta de ser una flauta. La otra mujer si estaba bien equipada además de ser muy alta. Sus hombros estaban acorazados por hombreras metálicas, al igual que el resto de su torso, alrededor de su cintura colgaba una elegante malla de pieles que llegaban a la altura de sus rodillas, muy cerca de las botas de cuero que calzaba. Aquella chica tenía características muy peculiares, como su cabellera de color blanco [que estaba recogida en una cola de caballo] o aquellos ojos púrpura que adornaban su pálido rostro, parecía delicada pero cargaba con una gigantesca espada de carbalita, un poderoso y resistente mineral.
Al verla Lars sintió un pequeño vuelco en el estómago y notó como su zona facial comenzaba a arder.
- ¿Estás bien? - Le Susurró Nanami.
- Si... si, si, todo en orden.
- Muy bien, ejecutemos el plan. - Dijo su compañera tensando el arco con una flecha apuntando hacia el dúo.
De repente la chica que tenía el pelo blanco miró fijamente hacia ellos desde la distancia del árbol, fue casi como si hubiese percibido y predicho con exactitud la posición de estos.
- ¡Dispara! - Gritó Lars, víctima de la sorpresa.
Ambas chicas de abajo se pucieron en guardia al ver al muchacho tirarse del árbol y correr hacia ellas, aunque por algún extraño motivo no estaba empuñando su espada.
Al instante él sonido de una flecha cortando el viendo, pasó volando y se enterró en la tierra entre ambas mujeres. Hubo una breve pausa a la que le siguió el sonido de algo quebrándose y todo el suelo bajo sus piés se undió revelando un agujero preparado especialmente para atraparlas. Antes de que calleran por completo Lars saltó sobre la que tenía el huevo, se lo arrebató y con suma agilidad se apolló del borde del agujero y a través de una pirueta en el aire evadió la caída, todo un apenas un breve instante y logrando mantener el huevo a salvo.
Había valido la pena desgastarse cavando aquel agujero, crear una trampilla desatable con bamboo y cubrirla con tierra musgo y hojas, todo era cuestión de que Nanami disparase con precisión hacia el nudo que mantenía la estructura y hacer caer al objetivo, por fortuna todo había resultado bien al primer intento.
- ¡Larguémonos de aquí! - Le gritó Lars a Nanami y ambos salieron corriendo con el premio entre sus manos.

¡¡¡EXTRASSSSSS!!!

- Perdón por la demora publicando este capítulo, es que me atrapó el servicio militar y no tendré tanto tiempo como antes de publicar capítulos.

- Durante estos próximos capítulos nuestros protas estarán afrontando el torneo para ganar dinero lo que me servirá para introducir nuevos personajes importantes en la historia. Hay tantas cosas que pretendo hacer que me siento un poco ansioso, solo puedo decirles que habrá de todo en esta historia.