Hasta que la noche nos separe

Capítulo 19 : Adrenalina

Caminar por la calle, viendo tantos lugares, tantas personas, miles de millones de personas en este mundo, de todo tipo y aun así, en algún momento ves a esa persona, una persona caminando como cualquier otra, respirando como cualquier otra, haciendo lo que sea, pero dentro de todo lo normal, es solamente una persona más, a plena simple vista no hay nada más, pero pasa que si ponemos atención descubrimos nuevas cosas y ahora esa persona que parece ser una extraña total, pasa a ser una persona completamente interesante, quieres saber más, quieres hablar con la persona, quieres descubrir cosas, el olor de su perfume, si le gusta el café o si dentro de esos ojos tan normales, hay algo más que contar, en tan solo un par de segundos las cosas pueden cambiar y si así pasa, si las cosas toman un ligero cambio, puede transformarse en algo infinito, en algo lo suficientemente importante, para que esa persona extraña se convierta en la persona más interesante que has conocido, empiezas a desear que te reconozca, que te mire, que se fije en ti, quieres hacerle saber que tú tampoco eres solamente un extraño y que tus ojos tan normales tienen tantas cosas que contar, empiezas a hacerte una película entera en tu cabeza, cosa que está pasando en cuestión de segundos, entonces ¿Qué es lo que te hizo ser tan interesante? ¿Qué vieron mis ojos en los tuyos? Tal vez fue mi corazón, tal vez y solo tal vez nuestras alamas están conectadas, como imanes, tal vez venimos de vidas pasadas o simplemente esta es la primera de muchas veces en las que te voy a encontrar...

- ¿La amarías en cada una de tus vidas? Claro, si es que la reencarnación existe — decía Chris —.

La reencarnación es real, tengo que creerlo, esta vida no será suficiente, siento que necesitaré mucho más tiempo con ella y prometo que en cada una de esas vidas te amaré, te buscaré y serás mía de nuevo, en cada una de nuestras futuras vidas seremos eternos, seremos estrellas, seremos animales, seremos mar y arena, fuego y leña, hasta lo más normal como dos chicos en una cafetería, en una de esas vidas esos dos chicos no tendrán ninguna idea de lo que les espera, pero pasará, Emilia y yo sucederemos en cada una de nuestras posibles vidas, te amaré hasta la última, hasta la última estrella, hasta que la noche nos separe...

- En cada una... — respondí —.
- ¿Y a mí? — decía Chris riendo —.
- Hermano, tú y yo somos eternos, antes que cualquier cosa, eres mi hermano para siempre — abracé a Chris —.
- Ojalá nuestros hijos sean mejores amigos, para que nuestro legado continúe.
- Chris, tener un hijo no está en mis planes por ahora...
- Lo sé, pero tarde que temprano tu mente cambiará de opinión.
- Lo dudo mucho — tomé de mi bebida — A todo esto ¿Qué nombre quieres ponerles?
- ¿A mis hijos? — Preguntó Chris —.
- No, a tus perros, idiota... — ambos reímos —.
- Theo... — dijo —.
- Dime.
- No, me refiero a que quiero que mi hijo se llame, Theo.

Hubo un silencio largo entre los dos, ponerle a tu hijo el nombre de tu mejor amigo puede ser el acto de amor más grande en una amistad.

- ¿En serio? — Pregunté —.
- En esta y en cada una de las otras vidas, siempre...

Sonreímos y nos dimos un abrazo, Chris siempre será mi hermano, mi compañero de vida, mi cómplice, el único que respeta mis locuras, por siempre en esta y en las demás vidas, seremos familia, serás mi hermano hasta morir, es más hasta después de morir, nos veremos en todas nuestras vidas, este fue uno de mis momentos favoritos con él, estando en la cama de Emilia, pensando en que él fue cómplice de este pequeño deseo, tal vez si no fuera por él no hubiera vuelto a la puerta de Emilia, gracias hermano.

- ¿Estás bien? — preguntó Emilia —.
- Estoy en paz — respondí —.

Estaba en completa paz, acostado aquí contigo, sin ninguna preocupación, no pensaba en nada y al mismo tiempo en todo.

- Theo, no sé qué sea esto, pero es verdad lo que te dije, me da miedo perderte por esto...
- Emilia, nunca me vas a perder, nunca podría dejarte ir, no de nuevo, yo te amo y me costó demasiado tiempo entenderlo, pero estoy seguro ahora, eres la mujer que quiero, eres todo lo que faltaba en mi vida...
- Solamente me da miedo que algo salga mal, que me veas como todo el mundo, se las cosas que se dicen de mí y aunque algunas no sean verdad, siento que las personas siempre están juzgándome.
- Yo no, lo que hayas hecho no me importa, me importa quién eres conmigo, me importa tu presente, me importa la Emilia que tengo aquí frente a mí... ¿A ti te da miedo lo que dicen de mí?
- Por supuesto que no, decían que eras un idiota, él todas mías y que a la semana rompes corazones, pero veo en ti todo lo contrario.
- Sé la fama con la que cargo, pero ese Theo no existe ya, admito mis errores, pero busco algo mejor para mi vida.
- Solo prométeme que no soy otra más...
- Emilia... por supuesto que no, te veo con los ojos de una vez en la vida, no quiero perderte de vista, no quiero estar sin ti, entiendo que todo esto sea complejo de procesar, pero podemos ir paso a paso, hasta poder entenderlo mejor, mientras tanto, soy completamente tuyo.
- No quiero perderte tampoco, soy toda tuya Theo