Hasta que la noche nos separe

Capítulo 27 : ¿Cómo odiarte?

"Posiblemente, cuando leas esto ya no estaré, me quedo con tantas preguntas ahora y sin tu presencia no podré responderlas, pero ya no puedo ser paciente, no puedo seguir aquí por algo que parece estar en una cuerda floja, al parecer las cosas que prometiste se quedarán en promesas incompletas, como siempre..."

Esta fue la primera de muchas cartas que te escribí, después semanas de no verte, intenté dejarte, siendo este el borrador de lo que te diría, aunque sé que no contestarías, en mi conciencia te dejaría ir para siempre, pero no mandé nada, no fui lo suficientemente valiente, durante toda esta primera etapa, fue de completa negación, de no creer lo sucedido, no lo quería hacer, no quería creer en esto, moría por volver a verte, por tener una explicación, no obtuve nada, absolutamente nada... aun así decidí creer, siendo la esperanza mi único motor de vida, te esperé de verdad, tanto y por eso mismo me arruiné, llegó la depresión.

Esta etapa fue un infierno, mi mente me pedía aceptar que no volverías, pause todas mis actividades y empecé a retomar viejos hábitos, llorar bajo la lluvia con una botella de whiskey se volvía una costumbre, empecé a tomar demasiado, hundido en alcohol y fiestas, pensando que eso curaría mi depresión, pero fue todo lo contrario, me empecé a destruir por ti, por completo, no solamente físicamente, mi mente también cobró el precio, siempre pensé que no fui suficiente, me convencí con la idea de que nunca me amaste en realidad, qué realmente solo fui otro de tus juegos ¿Otro hombre? Eso fui ¿Cierto? Dime por favor que no Emilia, no pude haber sido solo eso, no hace sentido y nunca lo hará ¿Solo fui eso?

Ya lo dije, me perdí por completo, sin amigos, sin apoyo, un fantasma, un hombre lleno de oscuridad y dolor, sé que nunca te imaginaste lo mucho que me dolió, lo sé porque nunca me preguntaste, lo sé porque no regresaste, pero es cierto Emilia y no puedo creer al día de hoy que puedas dormir sabiendo esto, sabiendo que de un día a otro me abandonaste ¡Dios! Hasta estaba dispuesto a ser solamente tu amigo, con tal de tenerte en mi vida, lloraba más de lo que puedo recordar y el dolor me llevó a tener ataques de pánico, ansiedad severa, junto con todas las veces que mi mente no pudo y mi cuerpo se desmayaba, no comía bien, no podía Emilia...

Después vino la etapa más corta de todas, el odio, traté de odiarte lo más que pude, para poder borrarte, para poder sacarte de mi cabeza, ya no te quería ahí, pero era imposible para mí ¿Cómo odiarte? Si me diste todo lo que me faltaba, todo lo qué siempre soñé y hasta lo que no, me enseñaste un mundo de posibilidades, estoy seguro que nunca entendiste lo mucho que te amé, porque si lo hubieras entendido créeme que no te hubieras ido, encontrar a alguien que te amó tanto como yo lo hacía, será una tarea sumamente complicada, mierda, Emilia te acepté por completo ¡Mierda! Por completo Emilia, eras todo para mí...

Te mentiría si te dijera que en algún momento avancé por completo de alguna de estas etapas, junto con las dudas, siempre tuve algo en mí de negación, siempre estuve un poco deprimido y hasta la fecha, te juro que trato de odiarte, al final del camino me tocó enfrentarme a las dos etapas más complicadas de esto, la aceptación y la superación, si Sabrina nunca hubiera llegado, tal vez nunca hubiera podido hacerlo, pero llegó y se quedó para bien.

¿Por qué lo hiciste Emilia?