Bella Costellazione [Harry Potter - Draco Malfoy]

CAPITULO 10

(Harry)

La mañana comenzo con Hermione muy emocionada, entrenado a la habitación con dos regalos en sus manos. —Despierten!

—Hermione es muy temprano.. y no puedes estar aquí.—dijo Ron tapándose los ojos de la luz.

—Feliz navidad para ti también. —Hermione le tiró el regalo en la cabeza, Ron solto un gemido antes de comenzar a desenvolverlo.—Me levanté hace una hora para añadir los crisopos a la poción. Ya está lista.

Abrí los ojos de golpe y me senté completamente. —¿Segura?

—Del todo, la mejor opción es hacerlo está noche.

En eso entro Hedwig, quién traía un pequeño paquete. —Hola, ¿Ya estamos bien?

Hedwig me dió un picotazo de forma amistosa y luego me salió por la ventana.

Todos los regalos fueron muy generosos, a excepción de los Dursley.

—¿Que dice esa nota?—pregunto Ron tomando la nota que venía con el regalo que recién abría. —Sally-Anne Perks.. ¿La Ravenclaw amiga de Cassiopeia? ¿Por qué ella te manda regalos? Y te desea feliz navidad.

—No lo sé..—mentira.

—Harry, nadie manda regalos a alguien de la nada. —Ron se acercó más a mi.—¿Ahora nos cambias por ellos?

—Ron no seas dramático. Harry fue secuestrado toda la tarde por ellos, debió hacerse su amigo.

—¡Pero le mandó dulces japoneses!

Solo por casualidad, Harry tomo el regalo envuelto de color dorado brilloso. Era un jersey verde esmeralda, también había guantes del mismo color y medias color negro. Todo con las letras H.P grabadas en el dorso, y una caja de golosinas acompañada de una nota que decia

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Feliz navidad.

C.B

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(Draco)

Me levanté de un sobresalto, Goyle cayó de su cama en un golpe seco y decidí que esa era la señal para despertar finalmente.

Pase al baño para tomar una ducha, me distraje un rato acomodando mi cabello frente al espejo y luego me vesti para salir.

Goyle estaba sentado en el suelo mirando a la nada, mientras que Crabbe bajo las cortinas de su cama para impedir el paso de la luz.

Me acerque a mis regalos para elegir cuál abrir primero. —Buenos días..—Goyle me saludo pasando por mi lado rumbo al baño.

—Buenos días.—finalmente me decidí por el regalo de mi madre, los demás podrían esperar.

Ella me regaló un bolso de piel de dragón, también un nuevo libro sobre astronomía  y dulces de mi tienda favorita. Le escribí una carta algo corta preguntándole sobre la camara, le conté como todos se habían vuelto a sus casas y también le agradecí su  regalo.

Al terminar de ver el regalo de mi padre y su carta que venía acompañada de un recorte del profeta, baje al gran comedor. Todo estaba iluminado por velas colgantes, había árboles de navidad cubiertos con escarcha, la nieve mágica caía directamente del techo y se podían ver los muérdagos colgados por todas partes.

Este año no juntaron ninguna mesa, más estudiantes de los cursos mayores se quedaron por navidad sin temor a las amenazas por la cámara. La mesa de Slytherin estaba en su apogeo, cubierta por los colores de la casa y dándole ese tono más glamuroso que la distinguía de las demás casas.