Cap. 02

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Cuándo llegamos a la casa de Jay en dónde se realizaba la fiesta, me quedé sorprendido después de todas las personas qué habían, el humo del cigarro se encontraba en todo el lugar, parejas en el centro de la casa se encontraban follando con ropa, unos se besaban de manera salvaje en el sofá.

Jungwon me tomó de la mano y nos adentramos en el mar de gente, sentí pequeños apretones en mi trasero en lo qué llegamos junto a los chicos.

Jungwon llevaba puesto unos pantalones ajustados negros, un esqueleto blanco el cual dejaba ver su piel bronceada y si se movía un poco sus pezones, sus zapatones son negros y lleva puesto el piercing en sus labios. Mientras que yo llevó puesto unos pantalones de Jean ajustados con rotos en los lugares adecuados, una camisa blanca transparentosa la cuál tiene un gran escoté en la parte de adelanté dejando ver mis clavículas y mis pectorales levemente marcados, mis pezones se alcanzan a marcar y por último mis zapatones de charol negros.

—Hola, chicos.—saludó Jake con una gran sonrisa en su rostro.

—Se ven jodidamente calientes.—dijo Jay quién se ganó un codazo por parte de su novio Jake.

Jay es alto, moreno, musculoso, llenó de tatuajes, ojos oscuros, nariz respingona, labios esponjosos, una sonrisa llena de hoyuelos, cabello grisáceo y por último unas piernas largas y esbeltas.

Jake es alto, delgado, espalda ancha, cintura pequeña, piernas largas y esbeltas, perforaciones en ambas orejas y una rosa tatuada en su cuello, ojos celestes, cabello rosa, labios carnosos y rosados, sus rasgos son finos y delicados.

—No esperaba qué vinieran.—dijo Heeseung quién tomó a Jungwon de la cintura pegándolo a su cuerpo y sonreí incómodamente.

—Me dan asco.—dijo Ni-ki burlonamente.

—Eso es porque tu estás sólo.—dijo Heeseung.

Heeseung es mi hermano mayor, el es más alto que Jungwon por varios centímetros, es musculoso, llenó de tatuajes, labios finos y pequeños, sonrisa llena de hoyuelitos, ojos oscuros, cabello anaranjado, y piernas esbeltas.

Ni-ki es alto, delgado, tatuado, con un piercing en su ceja y otro en la nariz, músculos promedió, ojos verdes combinados con miel, labios finos y delgados, nariz respingona, piel lechosa, cabello rubio, piernas cortas y algo esbeltas.

—No esperaba verte acá, Sunoo.—dijo Sunghoon detrás mío y me estremecí al escuchar su voz, se colocó junto con los demás y lo observé fijamente.

Llevaba puesto unos pantalones negros ajustados, camisa blanca algo transparente con los primeros botones desabrochado, unos zapatos negros y por último una chaqueta de cuero negra. Llevaba puesto el piercing en su labio junto a varias perforaciones en sus orejas.

Relami mis labios observándolo y sentí como me escaneo de pies a cabeza.

—Te ves bien.—dijo mirándome fijamente y me estremecí al ver la sonrisa coqueta plasmada en su rostro.

—¿Bien?.—preguntó un amigo de Sunghoon llamado Christopher quién acababa de llegar—¿Sólo eso?.—Sunghoon asintió.—Se ve jodidamente caliente.

Me sonroje y miré hacía otro lado, Jay y Jake se fueron a bailar, Won se sentó en la piernas de Heeseung mientras se besaban salvajemente, Ni-ki se salió a fumar juntó con un amigo llamado Zico.

Suspiré pesadamente.

—Nos vemos luego.—dijo Sunghoon quién se fue juntó a Jackson.

Caminé hasta la barra y pedí un vodka mientras miraba a todos bailando, besándose, tomando y hasta cogiendo con ropa. Maldito Jungwon me trajo y me dejó sólo.

El barman dejó la copa al frente mío la cuál tomé y me la lleve a los labios bebiendo el líquido de un sorbo, sentí mi garganta arder y cerré los ojos.

—¿Por qué tan sólo, bonito?.—preguntó un chico con una gran sonrisa en el rostro.

—¿Quién eres?.—pregunté mirándole.

—Me llamo Scott, y tú?.—preguntó.

—Me llamó Sunoo.—sonreí algo desconfiado.

Es un chico alto, piel lechosa, musculoso, cabello rubio ondulado, ojos azules, y tatuado.

—¿Quieres bailar?.—preguntó y asentí.

Tomó mi mano y caminamos hasta el centro, la música era bastante lenta y sensual, sus manos se dirigieron a mi cadera y empezamos a bailar de manera lenta y pegada, su mirada conectaba con la mía y sentí un calor recorrer mi cuerpo al sentir su respiración contra mi cuello.

Nuestros pasos eran sincronizados y lentos, en todo el momento en qué estuvimos bailando tomé alrededor de 6 copas de whisky y vodka, me coloqué de espaldas y sentí su erección en mi trasero, moví mis caderas lentamente y empezó a dejar besos en mi cuello, ladee la cabeza permitiéndole el acceso a mi cuello mientras molia su erección contra mi trasero. Soltó un gruñido contra mi oreja y sonreí divertido, coloqué mi mano en su cuello meneando mis caderas, baje y subí lentamente torturando su creciente erección.

—Sunoo.—gruño una tercera voz y me estremecí al saber de quién provenía, sentí cómo me tomó de la muñeca y me llevó a otra parte, me solté de su agarré y le miré fijamente.

—¿Qué te pasa, Sunghoon?.—le pregunté y éste sólo me miró fijamente.

—No sabía que eras de esa clase.—dijo notoriamente molestó.—no sabía que le ibas ofreciendo tu culo a cualquiera.

—No estaba ofreciendo mi culo, sólo estaba bailando y no sé cuál es tú problema.—suspiré pesadamente y me acerqué a Sunghoon hasta qué nuestras respiraciones se mezclaban.

—Eres un puto.—dijo arrastrando las palabras, enrede mis manos en su cabello pegando mi cuerpo al suyo.

—Y tú eres un mujeriego.—respondí mirándole fijamente a los ojos.—Y no soy un puto.

Colocó sus manos en mi cadera y pegó su frente con la mía, cerré mis ojos y uni sus labios con los míos.

Sus besos no eran nada dulces, ni suaves, eran todo lo contrario rudos y sin compasión. Su sabor a licor se mezcló con el mío y chupe la punta de su lengua sacándole un gemido.

—Sabes bien.—dijo contra mis labios para empezar a besarlos con fuerza, chupo, lamió y succionó con fuerza hasta el punto de sacarme sangre, gemí contra sus labios y mordí su labio inferior con fuerza hasta reventarlo.

Nos separamos y un hilo fino de saliva combinado con sangre quedó entre nosotros, nos miramos fijamente a los ojos, y la tensión sexual entre nosotros se hizo notorio, me tomó de la mano y me llevó hasta una habitación, cerró la puerta con seguro y me estampó contra la pared besándome bruscamente.

Y una cosa llevó a la otra. Dónde por primera vez nuestros cuerpos se encontraron, dónde mis labios encajaron a la perfección con los tuyos y dónde nuestras miradas sólo expresaban la fascinación y lujuria qué sentíamos.

Tomorrow || SungsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora