Capitulo 38:
Me desperté con lagrimas secas en mi rostro, era tan tonta, odiaba llorar, odiaba ser sensible, odiaba quererlo, odiaba confiar en el...
Fui directo al baño e hice todo lo que hago normalmente, me vestí con un blue jeans tubito y una camiseta color verde, me coloque unas zapatillas de color negro y baje rápidamente saliendo de mi edificio. A penas sentí el aire en mi rostro me sentí de alguna manera mas libre. Baje rápidamente las escaleras y me dispuse a correr, si, correr, correr como nunca antes había corrido. Pero no contaba con chocar con alguien tan fuertemente que este cayera al piso conmigo y los dos comenzáramos a reír.
Justin: ¿Por qué siempre terminas encima de mí? –este comentario me hizo sonrojarme, eso si que no me lo esperaba-
_______: ¿destino? –dije levantándome rápidamente-
Justin: digamos que si –ambos reímos- ¿Vamos? –yo solo asentí-
________: ¿y tu auto? –me pare viendo que íbamos a caminar-
Justin: ¿ya te acostumbraste al auto? –rió-
_______: en serio tonto –golpee su brazo juguetonamente-
Justin: lo deje en casa, creí que podríamos ir como en los viejos tiempos –yo solo sonreí y asentí divertida- ¿y por que corrías? –dijo de repente-
_______: no lo se.... Creo que de alguna manera me hizo sentir libre y me olvide de mis problemas por pocos segundos –baje la mirada- hasta que tu enorme cuerpo se atravesó en mi camino –el rió-
Justin: no es tan enorme –reímos-
________: claro que lo es –sonrió-
Justin: ¿una carrera?
________: Hecho –sin notarlo ya los dos estábamos corriendo. En ese momento me sentí mejor que nunca y de alguna manera me di cuenta de que lo extrañe más de lo que alguna vez pensé que lo extrañaría-
El resto del día fue risa, comer y mas risa, helado en la cara, en el cabello y quizás en la ropa. Este sin duda había sido un día que aparecerá en mi memoria por el resto de mi vida.
Y así fue, pasaron semanas, exactamente 2 semanas donde Justin y yo faltamos a ensayos solo para correr por el parque o escaparnos a la playa. El ignoraba las llamadas mientras estaba conmigo y yo evitaba preguntarle ¿Quién carajo lo llamaba con tanta desesperación? Aunque ya sabía la respuesta.
Me preocupaba constantemente por lo que pensarían los chicos, pero Justin me hacia olvidar todo eso solo con sonreírme mientras el sol ponía de alguna manera su cabello mas claro. El me recordaba constantemente lo mucho que me quería y lo importante que era mi amistad para el, lo negativo es que el no sabia que yo lo quería más allá de una amistad, que quería que el me quisiera igual y que desearía ser yo a la que me abrazara por la cintura para luego besarme en la boca y decirme cada 10 segundos cuanto me quería, pero de alguna manera me conformaba, me conformaba con saber que el me quería y que siempre seriamos amigos, mejores amigos y nada mas.
Lunes por la tarde, Justin me recogió en el colegio y fuimos directo a ensayar, estábamos tarde y tenia ya como 2 semanas que no veía a los chicos. Justin aparco en la acera del frente y los dos corrimos por aquel callejón llegando a la puerta algo exhaustos. Tocamos y tardaron algo en abrirnos pero lo hicieron. Todos nos veían extrañamente, Luna me sonreía pero los demás solo me miraban con miradas fruncidas. Joder, ¿ahora que?
Ryan: hasta que aparecen –dijo algo molesto-
Justin: Bro...
Chris: Nada Justin ¿Dónde se supone que estaban? –todos nos miraban esperando una respuesta-
_______: nosotros... -trate de hablar pero nuevamente fuimos interrumpidos-
Vanessa: Justin, Ryan, Chris y Chaz, adentro –dijo señalando una puerta a uno de los lados del salón. Justin me miro y solo camino hasta allá para que luego se escuchara un leve portazo-
Todos temblamos al oír el contacto de la manera de la puerta con la lámina de metal. Pero nuevamente la abrieron y todos voltearon a mirar directamente...
Vanessa: pueden descansar... 10 minutos –me miro- tu, calienta –yo solo asentí y espere a otro portazo pero no lo oí, la puerta había quedado entre abierta-
Mi mirada quedo fijada en aquella habitación, a Justin lo retarían y no podía dejar de pensar que todo era por mi culpa. Mis pensamientos fueron interrumpidos por un jaleo de mi brazo, note que era Luna y esta me llevaba directo a la puerta. Antes de que pudiera hablar ella me hizo un gesto de que guardara silencio y se posiciono a lado de aquella habitación en donde se encontraban Justin y los demás. Me coloque al otro lado y me dedique a escuchar.
Ryan: Joder Justin, te pasaste de irresponsable bro –dijo Ryan algo molesto- sabes que todos amamos a _____ -Vanessa tosió- casi –corrigió- ¿pero por que justo ahora tuvieron que faltar dos semanas?
Justin: lo se...
Chaz: pareciera que no, estamos cerca de los nacionales ¿y tu te escapas con ______ a no se donde carajo? –grito-
Justin: no nos... -lo interrumpieron nuevamente-
Chris: Sabes que nos falta montar coreo y ustedes se dedican a faltar no 1 día, ni dos, ni si quiera una semana, si no DOS –alzo la voz-
Justin: -bufo-
Vanessa: Justin... que decepcionante. Te digo que estoy realmente molesta –bufo- No puedo creer que estas dejando tu sueño de un lado por estar con cualquier niñita de bar –rió irónica-
Justin: no la llames así –bufo-
Vanessa: te estas distrayendo, ella te distrae. Te juro que no la saco del equipo porque ya estamos demasiado cerca de la competición –bufo- ¿en serio vas a dejar que tu sueño se vaya a la basura por una simple chica?
Justin: YA CALLENSE –grito- harto, harto estoy de que juzguen a la gente, _______, ella es solo un chica mas, ella no me distrajo, solo no quería que se sintiera patética y pues la distraje. Mas nada, no paso nada con ella, no va a pasar nada con ella, ella solo es una chica mas del grupo, fin –antes de poder reaccionar, lagrimas rodaban por mi mejilla, joder, ¿Cómo la misma persona que me hacia sonreír como nunca, me podía hacer llorar como nadie?-
Me aleje rápidamente de la puerta y Luna corrió detrás de mi. Me derrumbe en la esquina de aquel grande salón mientras Luna me abrazaba y trataba de calmarme, pero lo que menos quería ahora es dar lastima. Me pare secándome las lágrimas y le dije a Luna que estaba bien, para luego alejarme al medio de aquel salón y empezar a calentar.
Por culpa de un inepto mentiroso, no rompería el sueño de todas estas personas a las que aun llamo amigos.
