||Capítulo 53.

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Doncaster, Reino Unido.

No fui la buena del cuento Louis, no hice las cosas como debía hacerlas y sobre todo lastimé a la única persona que se preocupaba por mí, que me quería. Me enteré de la relación de Des y Troy de una manera abrupta y eso me destrozó para siempre, me nubló el juicio y en vez de sentarme un momento a pensar con lógica me dejé guiar por las excusas que Des me dio porque realmente quería creerle, quería creer que Troy me mentía cuando me decía que ellos eran pareja desde hace muchísimo tiempo que me habían utilizado para tapar su relación, porque realmente quise aferrarme a Des lo suficiente como para pasar por alto todos los momentos extraños que siempre noté en ellos, la tensión, el dolor que a veces emitía la mirada de Troy al vernos juntos...

Cuando me casé con Des en la iglesia Troy llegó a impedir nuestra boda y me dijo todo lo que había pasado entre ellos dos, que Des, el único amor de mi vida y el único hombre que siempre amé me había enamorado a base de mentiras y que ahora nuestro futuro matrimonio iba a estar hecho de todas ellas, me ofreció irme con él y correr juntos y no lo hice porque en mi testarudez quise creer de nuevo que aquello era sólo para lastimarme, para darme en donde más me dolía y quería pensar que Troy simplemente no soportaba verme feliz junto con la persona que él amaba también.

El infierno comenzó después cuando, antes de darme cuenta, estaba sometida a una relación llena de abusos junto a un hombre violento que respaldaba su homofobia por el miedo a sí mismo, Harry siempre estuvo seguro de su orientación sexual y de niño cuando comenzó a descubrirse a sí mismo nos dijo a ambos y Des explotó de una manera que me abrió los ojos y me dije a mí misma que no permitiría que jamás lastimara a Harry, así que decidimos separarnos y Des se quedó con Gemma en Holmes Chapel ya que ella no quiso venir con nosotros porque tenía a sus amigos cerca y nosotros nos mudamos a otra casa en la misma ciudad, nos mudamos a Doncaster mucho tiempo después del fallecimiento de mi hija y del encarcelamiento de Des. 

Estoy arrepentida de muchas cosas Louis, sé muy bien el daño del que soy responsable y lo mucho que participé en que el carácter de Troy se endureciera y pudriera de esta manera, siempre que te veo a la cara me siento culpable y miserable por lo que hice, por no creerle, por no haberme escapado, siempre que hablas de Fizzy se me clavan espinas en el corazón porque yo sé que si ese día en la iglesia hubiera elegido cosas diferentes probablemente habrías tenido un futuro diferente, probablemente ni siquiera habrías tenido que sufrir todo esto al lado de Troy y no te hubiera envenado el alma también, no hubiera hecho lo que hizo con Felicite y lo que le hizo a su pobre novia... Lo lamento tanto, en serio te pido perdón por todo el daño que te causé inconscientemente. 

Te juro que si la vida me permitiera volver de nuevo haría las cosas diferentes, aprendí de mis errores y fueron lecciones muy duras. No quiero que Harry sufra preso de las decisiones que tomé, no quiero arrastrar a nadie a la penitencia que debo... Perdóname Louis por todo. 

A pesar de que Louis estaba temblando visiblemente mientras absorbía toda la información que Anne le había brindado, a como pudo se levantó lentamente del sofá y le envolvió ambas manos con las suyas mientras las lágrimas de Anne rodaban por sus mejillas como cascadas; sin detenerse y en abundancia. Louis hizo ademán de besar sus manos y su gesto compasivo la llenó de consuelo. 

—No tengo nada qué perdonarte Anne —dijo Louis en voz baja aún conmocionado—, nosotros no somos responsables de las decisiones de los demás, sólo somos responsables de nuestras acciones. Troy decidió tratarnos así y nadie lo obligó, el dolor hace estragos en nosotros y decidimos si eso afectará permanentemente en nuestras vidas o si seguiremos a pesar de eso.

Louis se acercó más a ella y la abrazó por completo mientras Anne se desplomaba en su abrazo cálido y consolador. 

—Has hecho suficiente para saldar las cuentas que creías tener, tuviste hijos maravillosos, trajiste a Harry como una esperanza al mundo y mira todo lo que está haciendo, el cambio que está realizando porque tú se lo inculcaste. Llevas cicatrices en el cuerpo Anne, todos las tenemos y probablemente nunca van a sanar, pero no es demasiado tarde para arreglar cosas y para pedir perdón sobre lo que hicimos. 

Detrás del arcoíris ||L.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora