Mafia In Love (#1 de Bilogía)

CAPITULO 13 -"SÓLO RECUERDOS"

SCARLETT POV'S

Corro por el pasillo a todo lo que mis piernas pueden, mientras que mi cabeza está a punto de estallar.

Abro la puerta de mi habitación bruscamente y cierro de igual manera. Me tiro en la cama y golpeo el colchón con todas mis fuerzas. Me remuevo como un pez fuera del agua en este y me dejo llevar por el enojo.

Una vez descargo todo, las lágrimas y la impotencia reemplazan a la ira. Dejo que unas fuertes oleadas de dolor y frío me recorran como una corriente imparable. El ácido que se instala en mi garganta me quema como el fuego que erupciona de una recóndita parte en mi frágil corazón. Dejo que muchas de las preguntas que tiene mi cerebro se desvanezcan y caigan a un vacío como la arena cuando cae de nuestras manos. Suelto un grito que es amortiguado por la almohada y me descargo con esta, sin piedad y sin mesura...Justo como lo fueron con mi hermano.

-No -murmuro, tratando de convencerme de que todo es una de esas malas pesadillas que me acompañan por las noches cuando todo es sólo una asfixiante bolsa sin respiradero. Más para mi mala suerte esto es tan real como mi dolor.

Me paro de la cama con la cara bañada en lágrimas y miro por la ventana.

El hermoso paisaje que tengo enfrente no combina para nada con mi estado de ánimo.

Un hermoso atardecer. El sol dando una hermosa danza de coloridos colores como el rojo, el amarillo y el naranja, este tiene un brillo especial...casi mágico y mientras que se esconde las montañas lo acompañan con fidelidad. La combinación de estos juntos me recuerda a algo que sólo ayuda a que mi dolor se propague más, se vuelva más fuerte y sea tan irremediable como el temor que se prenso en mi corazón hace mes.

*Flashback*

Los intensos rayos del sol son los que me hacen pararme de mi cama y alistarme para tener las clases de música clásica que mmi padre quiere que tome.

Una vez lista el incesante llamado de mi hermano es el me hace retrasarme unos minutos e ir a si habitación.

-¿Qué pasa? -pregunto, mientras miro impaciente la hora en mi reloj.

-Tienes que ver esto -dice con un extraño brillo en los ojos, un brillo que hace un año que no veía, el brillo que papá que le quito con cada golpe que le daba.

Me acerco a él y me poso a su lado mirando hacía el horizonte justo como él lo está haciendo.

-¿Qué miramos? -pregunto, mientras que el sonido de "tic tac" del reloj suena como una alarme en mi mente.

-Mira el sol -murmura.

Cuando hago lo que me dice veo sólo un amarillento sol que brilla hasta casi llegar a quemar mi vista.

-Hermoso ¿no? -su voz es tan monótona como eufórica.

-¿Qué te pasa, Jas? -mi voz sale con una preocupación que lo alarma.

-No es nada -tarta de esconder su estado de ánimo y me sonríe. Mas su sonrisa no tiene esa característica paz que transmite.

-La verdad -espeto, olvidando por completo que mi clase ya debe haber comenzado hace cinco minutos.

-Es sólo que...-se queda pensando y luego, como cada vez que papá le pega, llora como un niño pequeño.

<<No hay escapatoria, Scar. Estamos condenados a vivir con la furia en carne, a una vida que nos va a matar lentamente.