His (Español)

His. -Capitulo 36

Capitulo 36 -Esa es mi chica.

Me di la vuelta y me acurruqué en el pecho de Kyle. Era tan cálido, duro y acogedor. Suspiré sobre él.

Sus brazos se apretaron alrededor de mi cuerpo, incluso cuando él estaba durmiendo yo podría quedarme aquí para siempre.

Le eché un vistazo al reloj y un grito ahogado en estado de shock salió de mi boca.

-Mierda. -Le susurré. -¡Kyle, son las 11 a.m.! -Le susurré dandome la vuelta y saliendo de la cama. Le oí gemir mientras su brazo salió a agarrarme.

-¿A dónde vas? -Su voz ronca salió.

-¡Kyle, mira el tiempo! ¡Se nos hace tarde! -Antes de que pudiera moverme más lejos, sus brazos me atrajeron a su cuerpo.

-No te vayas, sólo quédate en la cama un poco más. -Declaró. Yo suspiré.

-Tenemos escuela.

-No hará daño perder un día, amor. -Respondió. -Deja de preocuparte y acuéstate conmigo. -Suspiré de nuevo e hice lo que me dijero.

-Bien. -Kyle se sentó un poco y apoyó la cabeza en sus manos detrás de él.

-¿Cali? -Lo mire y me acosté a su lado.

-¿Sí?

-Eres hermosa. -Sonrió con descaro. Negué con la cabeza, pero sonreí también.

-Tu también lo eres. -Su pelo alborotado por la mañana era mi cosa favorita.

Su cuerpo de repente se movió de mi lado y salió de la cama.

-¿A dónde vas? -Le pregunté.

-Es una sorpresa, espera aquí. -Levantó un dedo para indicar que me quede justo donde yo estaba.

-Así que tu me dices que me quede y un minuto después te vas, Kyle, no se cómo sentirme acerca de esto. -Le dije en broma, se rió entre dientes mientras se dirigía a la puerta.

-Soy un hombre.

-Machista.

-Te amo. -Lanzó un beso mientras salía de la habitación.

Yo no sabía lo que estaba haciendo, y no me importaba, yo confiaba en él.

Mi corazón se sentía pesado siempre que Kyle no estaba aquí a mi lado. Mi padre lo dejó pasar la noche, y de todos modos Kyle se queda todas las noches, por suerte, mi padre no le importaba. Sabía que necesitaba Kyle.

Incluso cuando yo sabía que él estaba abajo, él no estaba aquí para alejar mis pensamientos sobre la situación.

Me sentí triste, molesta y muy deprimida. Me imagino que cualquier persona se sentiría igual al saber que su figura paterna está combatiendo una enfermedad tan grande como el cáncer.

-¡Cali! -Kyle gritó desde abajo. Me levanté de la cama y me dirigí al pasillo. Miré hacia abajo por las escaleras y lo vi allí de pie.

-¿Qué?

-Tu padre te necesita. -Baje por las escaleras a un ritmo más rápido.

-¿Todo bien? -Dije tan pronto cuando llegue a la planta baja, Kyle puso la mano en el medio de mi espalda mientras me fui a la sala de estar.

-Sí, iba a llevarte el desayuno a la cama, pero tu padre dijo que él realmente quería hablar contigo. -Se encogió de hombros como si no fuera gran cosa.

Antes de que yo me dirigiera a la cocina, me di la vuelta y pegué mis labios contra los suyos.

-Gracias por las intención. -Le dije antes de que él me sonriera.