Capítulo ocho

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-Tita- hago el intento de que una sonrisa salga de mis labios,pero en vez de eso me sale una mueca algo rara.

-Oh cariño- acaricia mi pelo y coloca un mechón de pelo detras de mi oreja- tu tío me ha contado lo sucedido con el pasaporte- chasquea la lengua y se da la vuelta- no se puede ser tan despistada.

-No sabíamos que caducadaba hoy- le explico con una mueca de asco

-No te preocupes- me mira y camina con una copa de vino en la mano- te puedes quedar el tiempo que quieras aquí- da un sorbo y se da media vuelta para irse al salón .

Que asco de mujer.

-¡Ainhoa! - me llama mi madre y voy hacia ella quien sujeta todas las maletas.

-¿Y papá y el tito?- pregunto mirando a todos lados.

-Oh, el tito se ha ido a enseñarle una cosa del coche que no puede arreglar-me da mi maleta y suelta una pequeña risa- ya sabes cómo es Papá con los coches.

Asiento en forma de respuesta y voy hacia mi nuevo cuarto-el de los invitados-,entro y observo a una niña limpiando las estanterías.

-No me jodas que mi tía tiene una niña cómo criada- suelto la maleta y la miró asombrada.

Esta suelta una risa y se dirige hacia mi.

-Sus ganas- dice colocando su cabellera detrás de su oreja y mostrando sus blancos dientes.

Es alta, tiene unas piernas de escándalo al igual que su cuerpo y su largo pelo le llega hasta la cadera.Va vestida con unos leggins negros que se le ajustan a las piernas dejando ver sus bonitas curvas, tiene una sudadera que también se ajusta a ella y de cara es preciosa, joder, tiene unos ojos verdes, acompañados de una nariz respingona y una pequeña barbilla.Me siento cómo una mierda a su lado.

-Soy Ainhoa-me presento y sonrío pareciendo amable.

-Mireya- se acerca para darme dos besos- no sabía que Raquel tenía una sobrina tan distinta a ella.

-Gracias - río por el alago que me ha hecho,al menos me lo he tomado así, jamás se me ocurriría pensar en que me parezco mentalmente a mi tía, antes muerta.- ¿Qué haces limpiando si no eres su criada?- pregunto abriendo la maleta.

-Mi madre me obliga a trabajar y conozco a tu tía desde hace dos años y bueno, me ofreció trabajo limpiando- me ayuda a sacar la ropa- a lo que mi madre aceptó encantada- maldice por lo bajito a su madre lo que me hace reír- es una mierda.

-Te compadezco- río.

-Y también es una mierda por que apenas quedo con mis amigas y tampoco puedo ver a mi novio- hace una pausa y me mira triste- también nos perjudica su trabajo.

La miró confusa y no me atrevo a preguntar, pero lo hago.

-¿Tu novio trabaja también? - la miro con miedo a la respuesta que me vaya a dar.

-No debería de contarlo- reclame sus labios y coge aire- es un trabajo- hace comillas con los dedos en "trabajo"- especial- finaliza.

La miro interrogante.

-Y...¿En que trabaja?- preguntó al fin.

-Canta- muerde su labio nerviosa y arruga la nariz esperando alguna pregunta por mi parte.

Me callo y en mis manos sostengo la taza que me regaló mi tía en donde está la imagen de los gemelo. Mireya me mira asombrada y carraspea nerviosa la garganta.

-¿Te-te gustan los gemeliers? - tartamudea y mira la taza y me mira a mi al mismo tiempo.

Asiento y frunzo el ceño ante su raro comportamiento.

-Oye me has caído bien- sonrío y voy guardando la ropa con su ayuda

-Lo mismo digo- la oigo reír.

Es raro que se halla comportado así cuando ha visto la taza.Lo raro también es que su novio cante, haber, que no es raro.Pero no sé.

-¿Te importa si te pregunto sobre tu novio?- la curiosidad me invade.

-Supongo que no- dice nerviosa

-¿Es conocido?-me siento en la cama una vez que termino de guardar la ropa, a lo que ella me imita.

-Nos acabamos de conocer Ainhoa,y ya me caes bien- hace una pausa y juega con el cogin de la cama- pero no se si contarte esto por que además de que te pueda molestar,puedes contarlo por ahí.- me mira con pena, cómo si no pudiera contarlo.

-No te preocupes- la miro extrañada,¿Molestarme? ¿Por qué iba a molestarme? Que raro.

Un silencio invade la habitación. Mireya mira su reloj y se levanta.

-Me tengo que ir- se levanta y me sonríe- un placer haberte concido- me da un abrazo y sale corriendo.

Vale. Esto sí que es raro. En fín.

Bajo dispuesta a irme a dar una vuelta, pero por mi mala suerte mi madre me detiene.

-¿Adónde vas?- pregunta molesta

-A la calle- digo obvia- además tengo el móvil, no me va a pasar nada.

No la dejo acabar acabar por qué ya he salido de casa encntrnadome con el sol impactando en mi cara.

Camino por las calles de Madrid y voy viendo los escaparates de las tiendas, que caras son las cosas. Si los gemelos no tienen ningún concierto está semana...estarán en Madrid. Ahora para que me los encuentre.

Tu sueñas

Que te calles pesada

Que te den

Dios

Sigo caminando y veo una cabellera larga morena que reconozco.

-¿Mireya?- susurro y empiezo a caminar para alcanzarla.

Se mete en un callejón que hace mi vista no visible para ella.La sigo y me adentro en el callejón escondiendome en una esquina para poder ver que entra en una especie de bar donde apenas hay gente.

Doy la vuelta al bar para poder ver atravez del cristal,la veo rodeando una mesa donde no la puedo ver bien,me acerco más al cristal y puedo ver que se siente en frente de un muchacho.

Ainhoa...¿Estás espiando a Mireya?

Joder,es verdad. Da igual.

La veo inclinarse y le da un dulce beso al chico.Ostias,ese tiene que ser el novio. Su cara sí que me suena.

Escucho un ruido en el callejón y veo a un tío mirándome raro.

-Emm...- bajo la mirada nerviosa- yo ya me iba.

Salgo corriendo del callejón con la duda en mente...¿Quién es el novio de Mireya?

____

Tan tan tan!!!

Aquí tenéis otro capítulo

¿Quien creéis que es el novio de mireya?
¿Y por que le suena la cara a Ainhoa?

¿Por que se puso Mireya nerviosa al ver la taza de los gemelos?

Todas las respuestas las tendréis en los próximos capítulos.

ESPERO QUE OS HAYA GUSTADOOO. Bechitosssss








Te Necesito [Jesús Oviedo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora