VolleyBoy

Saiko 2/3

El calor del verano hacia que los pequeños niños de la primaria estuvieran mas irritables, el calor los alborotaba como a un enjambre de abejas, Todos revoloteaban, saltaban, bailaban y se gritaban.
Pero todo pasaba alrededor de un puesto, una pequeña niña de cabellos azabaches y ojos del color del cielo no hacia mas que dibujar y tararear para ella, era ajena a lo que pasaba a su alrededor. Eso no importaba, ya que nadie parecía importarle su soledad, ella es solo un fantasma.
La repentina llegada de un grupo de niñas la alarmó, se habían colado al frente de su puesto, la más bella de las tres se encontraba en el medio de las otras, La abeja reina del salón, Momoe Sayu.
-EHHHH!- gritó con su voz chillona en busca de la atención de los demás- No veo a la dueña de este puesto, debería de acomodar sus cosas- tomó maliciosamente el cuaderno donde mahiro se encontraba dibujando y lo tiro al suelo junto con sus pertenecías, sus amigas rieron en complot- ese fantasma debería aparecer pronto- sus ojos estaban clavados en los de ella, su sonrisa la asqueo.
-Oi!- un gritó de advertencia llamó la atención de los demás, un niños se acercó al grupo de niñas busca pleitos- Deja ya de molestar a Tachibana!
-no te metas, iwaizumi- la abeja reina fruncio el ceño molesta- porque molestarte en proteger al fantasma de la clase-
-Sayu-chan es muy cruel- de la espalda del moreno apareció otro niño, de cabellos y ojos castaños, con apariencia agraciada- Tachibana no se esta metiendo contigo- la rubia se sonrojo al recibir la reprimenda del castaño.
-oi...oikawa-kun- sus ojos voltearon a mahiro transmitiéndole una mirada de odio y celos, antes de irse a su puesto se acerco a ella susurrando- nos vemos luego, fantasmita- y se largo riendo con sus amigas, iwaizumi y oikawa se acercaron a la azabache.
-estas bien, tachibana?- ella solo asintió e iwaizumi suspiró, desde que ella había llegado solo se limitaba a hablar cuando el profesor se lo ordenaba, no tenia amigos, ni parecía interesada en quererlos. El castaño se agacho agarrando la libreta y demás pertenencias, y las coloco frente a ella.
-Tachibana no debería dejarse intimidar- le regalo una dulce sonrisa, ella se sonrojo levemente ocultando su rostro en su flequillo.
-Oi-ka-wa-Kun- se escuchó a la abeja reina llamar la atención del castaño- Haruka tiene un nuevo pokemon, trae tu gameboy vamos a intercambiar- los ojos de oikawa brillaron al escuchar la palabra pokemon, alzó su brazo y corrió a su puesto en busca de su gameboy, mahiro volvió su cabeza a la reina y ella ya se encontraba mirándola con autosuficiencia.
-Tooru puede ser muy influenciable, no lo malinterpretes- la voz seria de iwaizumi la sobresalto, no era normal que alguien se quedara tanto tiempo intentando interactuar con ella- Tachibana, si quieres Tooru y yo podemos acompañarte hasta tu casa-
Ella se quedo mirando sus cosas, sin decir una palabra, no quería causarle problemas a nadie y hoy era miércoles, ella debe prepararse los miércoles. Iwaizumi aun se encontraba esperando su respuesta, ella negó con la cabeza.
-como quieras, estamos aquí por si cambias de parecer-
∆ ∆ ∆
Ya todos los niños se encontraban yéndose a sus hogares, muchos acompañados de sus padres, mahiro se encontraba atrás de la primaria montada en el tobogán mas alto, cantando la canción que su maestra de lenguaje musical le había enseñado días atrás, mientras lloraba.
-Cantas muy bonito tachibina- la azabache se sobresalto, limpiando sus lágrimas rápidamente, miro a oikawa que se encontraba al lado de ella, en las escaleras del tobogán su rostro estaba adornado por una enorme sonrisa.
Oikawa notó los ojos hinchados de la pequeña, además de sus ropas ennegrecidas y sus cabellos cortados disparejos, su sonrisa se desvaneció y puso su mano en la cabeza de ella acariciándola suavemente, ella empezó a jipiar y sus lágrimas no paraban de caer.
-Dolor sal~ dolor~- oikawa gritó como si estuviera haciendo un acto de magia, mahiro pensó en lo adorable que se veía y sonrió, el castaño la pillo hacerlo y se sonrojo al verla- tachibana es muy bella... No me había dado cuenta- soltó inocentemente, las mejillas de mahiro se encendieron, y oikawa tapó su rostro para que no lo viera sonrojado- ehh uh emm, quiero decir... Tachibana canta muy bien y es linda.. Emm que digo iwa-chan va a golpearme-
La risa de ella lleno el ambiente, oikawa se encontraba estupefacto era la primera vez que la había visto sonreír, volvió a sonrojarse desviando la mirada.
-emm tachibana, no deberías dejarte intimidar por sayu-chan tu también eres muy guapa, sabes dibujar y cantar, eres buena en matemática... Emm podrías llegar a ser muy famosa porque eres inteligente- el se rascaba la cabeza buscando una manera de animarla- tu podrías ser modelo o cantante tu voz es muy hermosa, estoy seguro de que puedes brillar y los demás dejaran de molestarte... Incluso sayu-chan-
-gracias, oikawa-kun-
Ambos niños sonrieron sin dejar de verse.