Perfecto Error

Capítulo 6: Nuevos sabores

Capítulo 6

29 de Mayo,2008.

No me prepares pastel para mi cumpleaños, Nana.

Sabes que amo el pastel, en especial el de chocolate, pero tía Cordelia dice que me hará gorda ¿cómo algo tan delicioso y tentador puede ser tan malo?

No me hagas pastel Nana, no me impulses a pecar.

—Nota de Eloise a su Nana, cuando supo que esta le estaba preparando un pastel especial para su cumpleaños n° 10.

La postura de James cambio radicalmente, se puso tenso y el brillo de sus ojos pareció desaparecer completamente, tomo el celular y leyó el mensaje, definitivamente el brillo desapareció y una extraña y fría mirada se instaló en ellos.

—¿algo va mal? —no pude evitar preguntar, el me observo un momento y luego de negar con su cabeza escribió una respuesta.

—La iglesia y su poder está bien para mí —dijo entonces y luego de mirarlo confundida un momento, supe que con ello quería decir que me concentrara en el trabajo y no en su vida social.

—Claro —anote el tema y lo busque en nuestro libro de texto, leería un poco para hacerme una idea de todo, él siguió escribiendo en su celular.

—Demonios —cuando lo escuche susurrar la palabra levante mi vista y la fije en él, me miro y bajo su celular avergonzado— lo siento, en serio...es sólo que...

Parecía realmente contrariado, como si quisiera decirme algo pero no supiera si estaba bien o mal.

—Está bien —sonreí suavemente— no tienes que decirme realmente, pero si puedo ayudarte en algo no pienses dos veces en pedírmelo.

Me observo en silencio unos minutos, como si estuviera evaluando la situación y luego soltó un suspiro.

—¿Crees que cuando cometemos un error tenemos oportunidad de remediarlo?

Lo mire un momento, yo realmente no cometía errores, pero de alguna manera lo que él dijo llego a una parte de mí, así que sin saber porque, le dije.

—Eso depende de a quienes hemos herido con nuestro error —se veía sorprendido.

—¿Por qué supones que alguien salió herido?

Sonreí levemente.

—Hay dos tipos de personas; las que cometen errores y se dañan a sí mismos y aquellos que los cometen y dañan a otros —le apunte— tu no pareces ser de aquellos que pongan su dolor por sobre el de los otros; por lo que puedo decir que si haz cometido algún error e intentas redimirlo es porque en el proceso haz herido a alguien más, sino ¿para qué necesitarías remediarlo?

Jay me miro un momento completamente impresionado por lo que le dije y luego una leve sonrisa apareció en su rostro.

—Vaya —dijo— haz dado en el clavo.

Sonreí y continúe hablando.

—Si al cometer un error; herimos a una persona o a más de una, la redención solo se obtendrá cuando busquemos su perdón, porque así podremos perdonarnos a nosotros mismos. —los ojos de Jay parecieron apagarse y bajo la mirada— supongo que no es fácil, pero...

Me volvió a mirar por un momento e intente tranquilizarle con una sonrisa.

—Creo que cualquiera que realmente este arrepentido por sus acciones, merece ser perdonado.