Perfecto Error

Capítulo 20: Honestidad...

Capítulo 20

¡Oh, por Dios! Ustedes los hombres tienen esa tonta inclinación a ser estúpidos con relación a los sentimientos. Te lo informo, sólo hay dos opciones. La amas o no lo haces, decídete ya por la primera y ve a besarla. Idiota.

—Eloise Rivers, cinco años en el futuro hablando con quien para ella es un idiota.

Dormí casi todo el día, e ignore completamente a mi tía Cordelia y las actividades que había planeado para mí, ni siquiera le abrí la puerta.

Seguramente debí encararla a ella o a mi tío Oscar por no decirme la verdad, pero una parte de mi sospechaba que quizás ellos no sabían que yo era hija de Lysander Rivers y no de Arthur Rivers. No quería arruinar las cosas diciéndoselos si ellos no sabían, y aun así ¿Qué podían hacer?

Ya no había forma de cambiar el pasado.

Y la decisión de mi madre, había sido personal, nadie la había impulsado a ello. Suspire en mi almohada, eran casi las nueve de la noche y ahora no tenía sueño.

Algo había aprendido de la vida de mi madre.

Ella había sido incapaz de luchar en contra de la presión social, y no quiso abandonar su cómoda vida para fugarse con quien ella amo; luego vivió una vida de desgracia por no esforzarse, por no luchar.

Quizás si se hubiera fugado con mi padre, ahora estaríamos los tres muy felices.

Pero no lo estamos, su enamorado murió, y ella no lucho por él. Yo no quería cometer el mismo error.

Kayred era a quien amaba, y lograría que se enamorara de mí.

Cuando él me besaba, cuando paseaba conmigo, bromeaba y me abrazaba, yo sabía que tenía sentimientos por mí y aprovecharía esos sentimientos.

Lucharía por él.

—Haré que me ames —murmure para él, aunque sabía que estábamos a kilómetros de distancia.

La decisión se instaló en mí.

* * * * * *

Al día siguiente, me levante a las seis de la mañana y partí rumbo al aeropuerto.

Había comprado pasajes para el primer vuelo del día y no quería perder el tiempo. No me despedí de tía Cordelia, aunque si lo hice de mi tío Oscar, ya que al ser aún menor de edad necesitaba su autorización para volar fuera del país.

— ¿Estas segura? —me miro con atención— no quiero...

—No seré como mi madre —le dije decidida— no seguirá expectativas de nadie más que las mías y te juro tío, voy a luchar por lo que quiero.

Después de eso él pareció satisfecho y dijo que se encargaría de aplacar a mi tía. Y ahora después de casi un día de viaje estaba llegando a la ciudad, y a pesar de que me encontraba muy nerviosa, mi confianza no había disminuido.

Al día siguiente iría a clases y hablaría con James, lo rechazaría apropiadamente y luego hablaría con Kayred y le dejaría claro lo que se avecinaba desde ahora.

Lo amaba, y no lo perdería.

* * * * *

Tenía un plan, despertarme temprano y llegar al instituto con el tiempo suficiente para hablarle a James, antes de poder encontrarme con Kayred.