Dejame Quererte~♡ [Sasusaku]

capitulo 11

Abrió lentamente sus ojos color Jade, parpadeo varías veces, la habitación estaba completamente oscura, sintió un brazo que la rodeaba por la cintura y la respiración de Sasuke sobre su cuello. Giró con cuidado para no despertarlo y tenerlo frente a ella, a pesar de no haber luz, pudo ver su hermoso rostro, esbozó una sonrisa al verlo ya que nunca lo había visto así, tenía una expresión serena como si de verdad se hubiera entregado a los brazos de Morfeo, así que retiró la mano de su esposo para liberarse, bajó de la cama y buscó su camisón por toda la habitación hasta dar con él, se lo puso y luego volvió a salir al balcón. La noche era fresca pero no le importó, miraba las calles y eran contados los carruajes que pasaban, una brisa golpeo su hermoso rostro y alborotó sus cabellos color rosa, sin duda iba a extrañar su antiguo hogar pero ahora tenía uno nuevo, tenía a un esposo con la fama de libertino y sinceramente no sabía si lo iba a soportar toda su vida, había sido tierno con ella esa noche pero ¿Con cuantas mas no lo había hecho? ¿A cuántas más no les entregaba sus besos, sus abrazos sus caricias? — ¿Qué haces aquí? Escuchó una voz dulce al mismo tiempo que sentía unos brazos que la rodeaban por la cintura y la hacían girar para encontrarse con él. Sakura al verlo casi se le iba la voz, tenía el pecho desnudo y solo llevaba puesto un pantaloncillo de seda en color negro, sus manos se detuvieron en el ancho pecho de Sasuke y esto hizo que se sonrojara. —No podría dormir – respondió la joven – Creí que tú estabas durmiendo —Eso hacía – el ojinegro asintió – Pero sentí frio, abrí los ojos y ya no estabas, vi las puertas del balcón abiertas lo que me supuso que estarías aquí No hubo más palabras que decir ya que Sasuke se acercaba lentamente a ella, inhaló y exhaló en su oído, el tibio aliento golpeo a Sakura con intensidad que un desgarrador deseo por volver a ser suya atravesó por su mente. Sasuke levantó la barbilla de la joven y acercó sus labios a los de ella. Al sentirla tan cerca su deseo por ella volvió a palpitar con tanta fuerza y furia y Sakura lo pudo sentir como rosaba el miembro de Sasuke en su delgado camisón. Desesperado por hacerla nuevamente suya la tomó entre sus brazos y entró de nuevo a la habitación, no quiso perder tiempo en cerrar las puertas del balcón así que las dejo abiertas, depositó a Sakura en el suelo y el frágil cuerpo de la joven resbaló por sus brazos, acto seguido tiro de un jalón el camisón de la joven para tenerla desnuda ante él, besó la cuerva de su cuello, luego uno de sus suaves y tiernos pezones, con su lengua jugaba con uno de ellos y formaba círculos. Sakura cerró los ojos y se apoyó sus manos en los hombros de su esposo, arqueó la espalda al sentir nuevamente esa sensación que experimentó la primera vez, sabía hasta donde la llevarían esas caricias y besos que Sasuke le daba. Sin dejar de prestarle atención a los senos de su esposa, como pudo se quitó su pantalón para estar parejo con ella. — ¿Te gusta? – preguntó mientras exhalaba por su boca en uno de los pezones ya endurecidos de su esposa —...si...— fue lo único que respondió ya que al sentir el aliento tibio que provenía de la boca de Sasuke provocó que la joven temblara debido a las mil y un sensaciones que comenzaba a sentir Sasuke subió la mirada para ver el rostro de la joven, ella permanecía con los ojos cerrados mientras arqueaba su cuerpo contra él, ya no lo podía soportar más, la deseaba más de lo que la deseó la primera vez, quería apagar ese ardor punzante que sentía en su entrepierna y sabía que ese fuego sería apagado una vez que se hundiera en el interior de la joven. ¡Dios! Era hermosa, más hermosa que cualquier otra mujer que hubiera tenido en su vida, ninguna respondía tan tímidamente a sus caricias, las demás damas no disfrutaban los encuentros y se entregaban a él de una manera fácil, como Karin. Pero no quería pensar en ninguna otra mujer que no fuera Sakura, ¿Por qué se quiso oponer al matrimonio la primera vez que le había dicho su hermano? Sinceramente tenía miedo, miedo de que la buena vida que llevaba se fuera al demonio, ya que la idea de una esposa no estaba en sus planes Dejo de besar sus pezones para retomar su postura y besar a la joven, una de sus manos se deslizó por toda la cintura de Sakura y él la acercó a su entrepierna, donde su fuerte masculinidad rosaba el delicado valle de la feminidad de su esposa. Sakura al sentir ese contacto dejo escapar un gemido. —Te deseo – susurró con voz ronca La respuesta de la joven fue besarlo intensamente y enredar sus brazos por su cuello. Sasuke la tomó entre sus brazos, avanzó con su hermosa carga hacia la cama, la depositó con cuidado y le hizo nuevamente el amor con tanta ternura y pasión, y de nuevo se comenzaba a escuchar esa melodía por toda la habitación. Ambos llegaron al clímax, el joven se tumbó a un lado de Sakura y con su brazo la rodeo por la cintura y la atrajo una vez más hacia su pecho, de nuevo los cubrió a los dos con las sábanas blancas y esta vez se quedaron profundamente dormidos. La luz del sol se filtraba por la ventana y Sakura tuvo que verse obliga a abrir los ojos, al despertar se encontró con Ten­ten, una de las chicas que trabajaba para su esposo, ella estaba preparando el baño, sintió un vacío a su lado, giró y no encontró a Sasuke. Sakura se levantó y tomó su camisón se lo puso y saludo a la muchacha que estaba en esa habitación. —Buenos días Ten­ten – dijo mientras se llevaba una mano a la boca a causa de un pequeño bostezo —Buenos días señora – respondió la muchacha al mismo tiempo que vaciaba una cubeta de agua tibia a la tina —Ten­ten ¿No sabes dónde está mi...esposo? —El señor Sasuke salió muy temprano – comentó la mujer – Pero dijo que regresaba a la hora de la comida Los ojos de Sakura se fueron más allá y un millón de posibles respuestas cruzaron por sus ojos Jades, seguramente se había ido con una de sus amantes ya que con ella no se había sentido satisfecho, ese pensamiento atravesó su corazón como si fuera una flecha ¿Si era verdad? ¿Si él estaba con otra como se lo iba a reclamar? — ¿Quiere que le ayude con su baño, señora? —No Ten­ten, lo haré yo– Sakura negó La muchacha se fue no muy convencida con las palabras de Sakura, la noche anterior se reusó a que le ayudara con su vestido de novia y ahora se negaba a que le ayudara a bañarse, vaya mujer con la que se había casado su amo, pero sabía que en el fondo Sakura era una joven buena gracias a su hermana Matsuri que trabajaba en casa de ella. Una vez que Ten­ten se retirara, Sakura se quitó su camisón y se metió a la tina del baño, al instante que sintió el agua tibia por todo su cuerpo comenzó a relajarse un poco y un poco más otro poquito más hasta cerrar sus ojos y quedarse completamente dormida. Sasuke salió de la casa de su hermano mayor, lo había ido a ver para conversar asuntos de negocios, pero por más que permanecía allí los minutos pasaban como si fueran siglos, lo único que deseaba era salir cuanto antes de allí, regresar a su casa y hacerle el amor a su esposa. No era un pervertido si es lo que estaba pensando, de hecho nunca en su vida estaba deseoso de hacerle el amor a una mujer y eso lo comenzaba a experimentar con su joven esposa, a pesar de llevar dos días casados empezaba a sentir cariño por ella. Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por la pelirroja Karin. — ¿Por qué tan solo, Sasuke? – Preguntó la mujer con cierta seducción en su voz — ¿No me digas que tu esposa ya te dejó? Sasuke esbozó una sonrisa al escuchar eso último – No, ella me espera desnuda en nuestro lecho de bodas Todo el buen humor que la joven tenía despareció al oír esas palabras pero prefirió no darle importancia. —Entonces tú la abandonaste ¿eh? – Insistía con su buen humor — ¿Tan mala fue tu noche de bodas? Me hubieras buscado y te aseguro que te habría dejado satisfecho —Para tu desgracia – Sasuke se acercó un poco a ella – Fue una de las mejores noches que he tenido. Si me disculpas, debo regresar a casa, mi esposa me espera Prosiguió su camino, pero la pelirroja lo siguió y lo detuvo. —Espera – lo tomó de un brazo y lo hizo girar – Mañana por la noche habrá una fiesta en casa de los Johnson, porque no vas con tu esposa y la presentas en público El joven se quedó por un momento pensando en si ir o no, no tenía ánimos para asistir a una fiesta y mucho menos si iría Karin, si su esposa notaba algo entre él y ella era probable que le hiciera preguntas y no quería que se enterara que entre la pelirroja y él hubo algo. —Lo pensare – respondió al final – Pero no te aseguro nada —Tienes que ir – volvió a insistir – Dicen que hoy llegó un francés adinerado a Londres y va ser presentado en dicha fiesta ya que toda la sociedad va a estar presente —Gracias – asintió – Pero como te dije, lo pensare —Bien, es tu decisión – antes de irse señaló – Te veo allí cariño – giñó un ojo y se fue Sasuke permaneció en su mismo lugar mientras observaba a la joven retirarse, aunque si no tuviera ese gran animo de ir tal vez Sakura si querría ir, pero primero tenía que hablar con ella y ya después lo que dijera el destino. Después de varios minutos ya estaba en casa, había sido recibido por Sarutobi y lo primero que hizo fue preguntar por su esposa, pero su mayordomo le respondió que la señora un permanecía en su habitación. Subió las escaleras en dos en dos hasta llegar a la puerta de la habitación de recién casado, giró la perilla mucho cuidado, pero vio la cama vacía y fue cuando entró por completo, ella no se encontraba allí, así que la buscó en el cuarto de baño y se detuvo en seco, ahí estaba ella, en la tina de baño con los ojos cerrados ¿Estaría durmiendo? Una sonrisa se dibujó por toda la comisura de sus labios al tener ese pensamiento pecaminoso, sólo faltaba llevarlo a la práctica... ¿Se atrevería a despertarla de esa forma?

ContinuaraӧLc