CAP 26

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Abrí mis ojos y el dolor de cabeza era increíble observe la oscura habitacion toda su decoración era entre negro y rojo vino, espejos con decoraciones de oro y rubis rojo sangre, los pisos negros brillantes juro que podría ver mi reflejo en el, la cama tenia sabanas de ceda  negra los postes de ella daban hasta el techo con cortinas igualmente de ceda negra, su apariencia era de tiempos antiguos habían candeladros de oro y velas negras en el techo había una enorme lampara con velas del mismo color, a pesar de lo antiguo todo se veía impecable  , mire mi ropa y tenia una bata del mismo color de los rubis del espejo y mis , donde estaba no conocía este lugar me puse de pie y me vino un mareo, me sostuve de uno de los postes de la cama un momento hasta que me estabilice camine a l a ventana y la abrí, observe los alrededores y senti nerviosismo al observar que después de unos cuantos metros había una abismo el cielo era oscuro como la noche, donde rayos estaba?, acaso era esto otro sueño?, cerre los ojos fuerte y los abrí de a poco pero no todavía estaba aquí, sera esto el infierno, pero porque si no han pasado los cinco meses que me prometieron?, sentí furia y a la vez nerviosismo combinados no eran nada buenos,  mi estómago crugio como un león y desperté de mis pensamientos debía comer algo, pero primero debía ducharme y saber que hacia aquí y que era este lugar y donde estaban mis amigos y Michael, me metí rápidamente a la ducha observe todo y negué con la cabeza  todo era igualmente negro con detalles en oro y rubis, que manía tenían con estos colores, rodé los ojos me desvesti y abrí el grifo esperando no saliera también liquido color sangre, para mi dicha no era así, y lo que salia era agua tibia y con el calor que hacia aquí me cosinaria a fuego lento me duche rápido y para variar las toallas, jabón y demás eran todos del mismo color que todo aqui, me seque y sali, pero que me pondría si no había traído nada, busque en el closet negro y encontré vestidos rojos y negros, al menos la persona que los escogió tenia un buen gusto busque el que mas me agrado y me lo puse me quedaba justo a la medida, estaba a punto de salir de la habitación cuando escuche la puerta abrirse volvi mi mirada a la puerta y ahí estaba.

Oh, veo que ya despertó señorita. Observándome de pies a cabeza. Y veo que la ropa que te escogi te quedo bien.

Mire a la chica de cabello blanco imitando su acto. Si gracias, me puede decir que rayos hago aquí?

De nada. Con una voz que no diferenciaba si era amable o irónica, o quizás ambas, o amable para cubrir la ironía. Eso te lo debe de explicar el supremo.

Supremo?

Así es si estas lista te puedo llevar ya con el.

Ok. Coloque unas sapatillas bajas que había en la parte baja del closet, y camine detrás de ella cerrando la puerta detrás mio, observe en ella mi nombre con letras doradas, la chica caminaba ágil sobre unos tacones muy altos por el piso negro del pasillo que también parecía espejo como el de la habitacion, la diferencia es que en el pasillo había mas rojo en las paredes, mire gran cantidad de puertas a lo largo del camino.

Tantas personas viven aqui?

En realidad cariño humana y  viva sólo eres tu. Con una sonrisa de medio lado. Todas esas puertas te transportan a lugares a los que no quisieras ir, así que te aconsejó mantenerte largo de ellas, o podrías terminar muy mal. Me miro con burla.

Ok. Trague grueso.

Seguí caminando junto a ella hasta que llegamos a una enorme puerta.

Espera un momento. Y entro por la puerta.

Observe a mi alrededor a mis espaldas había un gran salón como esos de las películas donde hacen grandes fiestas a diferencia de sus colores oscuros, mire hacia arriba y a los lados y era enorme el lugar y el silencio acompañado de una brisa que parecía llantos y quejidos me causaba escalofrios en la piel.

Listo.

Di un salto y volví mi mirada a ella. Ok. La segui pasando la ancha puerta, observe y parecía una oficina estaba llena de libros y en una mesa un libro grande abierto  de paginas negras y letras color sangre, que molestaban a cualquier vista humana, un gran escritorio y su ocupante en una silla dándome la espalda, la chica salio del lugar cerrando la puerta.

Bienvenida. Con una voz gruesa y áspera.

Donde estoy.?

Laureen creo que todavía no entiendes nada.

No, porque crees que preguntó, estaba en la playa con mis amigos y de la nada aparezco aquí con ustedes que son desconocidos para mi, dime que esto es un estúpido sueño.

Dejame sacarte de tu errónea idea. Sonriente se levanto de su asiento y camino hasta mi con su bordón, este hombre tenia al menos unos cincuenta años, su ropa era color negro y muy sofisticado, de apariencia de tiempos ansestrales , me rodeo y tomando un mechón de mi cabello lo paso cerca de su rostro, e inhaló en el. Dulce aroma. Continuo su camino y se detuvo frente a una pintura donde había una  mujer muy bonita su apariencia se me hacia conocida pero no sabia a quien.

Laureen por si no lo sabes estas en el infierno.

Pero porque?, si me prometieron cinco meses, si acaso a pasado un día.

Eso fue una estúpida decisión que tomo mi hijo sin mi consentimiento, y no es así ya pasaron cuatro semanas, solo que desde que te tragimos te la pasaste sumergida en un profundo sueño, creo que tu cuerpo humano es muy debil. Mirándome de reojo.

Esto no es justo. Me cruce de brazos.

Nada es justo. Me miro. En la vida nada es justo, ni en la muerte, mucho menos en el infierno.

Esas palabras me causaron temor por lo que me esperaba.

Que ganas tu con que yo me case con tu hijo?.

Yo nada, solo necesitó que mi descendencia continúe..

Y porque yo y no otra mujer. Alegando.

Me miro  y sus ojos parecían un abismo oscuro y profundo.  Eso ya fue decisión de tu abuelo de alguna manera debía pagar su codicia.

No era codicia, pasaban una mala racha, además quiso ayudar a la ciudad en general.

Si pero la mayor ganancia era para el, tu vez en tu ciudad alguien que viva igual o mejor que tu familia?, sabes que no, tu familia tiene el mayor porcentaje de  ganancia hasta en trabajos que ni tan siquiera ellos realizan.

Baje la mirada tenia razón.

Y ustedes tampoco sobrevivirían un día sin tanto dinero, linda el amor al dinero es la mayor perdición del ser humano, así que acostumbrate y bienvenida.

Y no hay otra manera de pagar esto que no sea casarme con Damian?

No..

Pero..

No. Interumpiendome. Debes tener hambre, en el comedor tendrás algo de comer ahí, te puedes retirar.

Asenti y cuando me disponía a salir, tenia mi mano en la manilla de la puerta.

Y te aclaro, no intentes huir, aquí no hay salida alguna.

Trague grueso. Si,  y Damian?

Valla ya estas preocupada por tu prometido. Con una risa sínica acompañándolo. Tu amado esta con tus padres poniendo la fecha de la boda.

Todas sus palabras herían mis sentimientos, asenti en silencio  y salí del lugar afuera se encontraba la chica quien me esperaba.

Vamos debes alimentarte pronto llegara Damian y debes estar con fuerzas.

La seguí en silencio hasta el comedor, había una gran mesa con toda clase de frutas en ella, panes dulces y salados, a esta hora mi apetito se había perdido así que solo tome una manzana y un jugo de naranja.

Iré a mi habitación.

Sólo eso comerás?.

Asenti y me retire del comedor dejandola en el lugar pensativa, camine por el pasillo esperando no perderme en ese laberinto mire las puertas y quise abrirlas pero recordé lo que la chica me había dicho y temí, me acerque a una y puse mi oído para escuchar en ella, se escuchaban gemidos y el llanto de una mujer.

Ayudame!!

Di un salto y corrí del lugar como alma que lleva, para mi alegría me encontré mi habitación rápido y entre en ella.

Destinada  +18(TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora