I'll Be

Capítulo 62: No Te Vayas

El último año había sido un gran cambio en mi vida. Fue un año diferente, lleno de diferentes retos y aprendizajes. Conocí nuevas personas y otras simplemente se fueron de mi vida. Unas me hirieron y otras alegraron mi día a día. Pero al final, de todo se aprende ¿no? Todo lo que pasó, pasó por una razón, fuese malo o bueno.

De eso estaba tratando de convencerme el día que tuve que despedir a mi novio y a mi mejor amigo en el aeropuerto.

Todo pasa por algo, vas a estar bien.

Había tratado de pasar la mayor parte de mis vacaciones con ellos, saliendo a diferentes lugares y tratando de crear nuevas historias, nuevos recuerdos, nuevas locuras para recordarnos 5 años despues al volver a Nueva Orleans.

Pero de mientras, tengo que aguantarme. Es el inicio de casi 6 años de universidad, de nuevas experiencias y nuevos retos, aunque no lo quiera.

Y es la verdad. No quería despedirlos. Quería... Atarlos a la puerta de mi habitación con cinta adhesiva para que no se fueran nunca. Quería... Secuestrarlos en el sótano de mi casa y dejarlos allí para siempre.

No tienes sótano..

Pero la realidad era que por mucho que quisiera hacer esas cosas dementes, no podía. Sabía que por mucho que les pidiera que se quedaran, sabía que era su sueño estudiar en su país natal y que debían ir a arreglar las cosas con su padre y todo eso.

Pero mi mente parecía no escuchar las razones y seguía repitiendo "por favor, necesito que se queden".

Dean había estado muy pendiente de mí últimamente. Sabía que en cualquier momento todo esto me iba a derrotar y él, como buen hermano, quería estar allí para recoger las piezas.

Íbamos en camino a la casa de los gemelos en el auto de mi hermano. Todo iba en silencio, pero no nos tomamos mucho tiempo en ello, porque llegamos en cuestión de un minuto.

Al salir del auto, tocamos la puerta de la casa y la madre de lo chicos apareció, abriendo con una sonrisa.

Nos dijo que pasáramos y Dean me dejó en la habitación de Will mientras él iba con Thomas.

Sin tocar o algo, abrí la puerta, encontrándome con Will medio desnudo, sólo con unos boxers puestos.

Suerte que está de espaldas...

—¡Oh por Dios! lo siento.— me volteé esperando a que terminara de ponerse toda la ropa.

Él se rió.

—Hal, me has visto con mucha menos ropa.— me dijo, mientras me volteaba con sus manos en mis hombros.

No pude responder nada, porque era cierto.

—Tárdate todo lo que quieras— dije tratando de no quedarmele viendo— Entre más tiempo estés aquí mejor.

Él sólo me sonrió viéndome con simpatía, mientras sostenía su camisa entre sus manos.

—Sé que no quieres que me vaya, pero entre más lo pospongas, más duele.

No dije nada, sabiendo que tenía razón.

—¿Vas a ponerte la camisa o...?— pregunté luego de un rato.

—¿Te molesta?— me sonrió.