CAPÍTULO 17

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No había podido dormir durante la noche, y aqui estaba, acostada a lado de Camila. Mi Camila, quién ya tenia un bulto algo grande.,pero le hacía verse aún más preciosa.

Me había enamorado como idiota de esta 'niñita'. Y es que me hace sentir muchas cosas, me hace feliz, me hace ser una mejor persona. Amo la persona que soy cuando estoy a su lado.

Acaricié con delicadeza su bulto. Ya me era una costumbre hablar con Alice por las mañanas, mientras Camila dormía. No me daba vergüenza delante de ella, pero tampoco va con mi personalidad.

-Buenos días, All -murmuré en lo mas bajo, para después dejar un suave beso sobre la barriga. -Mi pequeña, sé que las cosas no han estado bien últimamente, pero... prometo hacer lo mejor para ti y para mami. Nada les faltará, haré lo que sea por ver una sonrisa en el rostro de mami, y en cuanto nazcas, ver tu pequeña sonrisita. Prometo hacerlas feliz. -Dejé otro beso sobre la barriga. Mientras pasaba mis dedos por encima de esta, acariciando de forma circular. -Espero que seas igual de preciosa que tu madre. con esa sonrisa maravillosa, con esos ojitos tan bellos... -sonreí al imaginar a la pequeña Alice. Claro que iba a ser preciosa, los genes de Camila con los Jauregui, por Dios. Será una Diosa.–Carajo... sólo espero que no haya muchos chicos o chicas detrás de ti, eso sí no lo voy a permitir -derepente escuché la risita de Camila.

Levanté mi mirada, y enseguida cerró los ojos, reprimiendo su risa.

- Ya sé que estás despierta. Buenos días princesa - me estiré un poco para poder dejar un beso en su mejilla.

-Buenos días, Lau-contestó con una hermosa sonrisa. Aquella sonrisa que iluminaba mis días, aquella sonrisa que me llenaba de vida.

-¿Cómo dormiste?- cubrí su barriga con la sábana, para después continuar acariciando.

-Bien. ¿y tú?

- No pude dormir mucho ¿sabes? Es... uhm... es un poco incómodo volver a dormir en tu antigua habitación en casa de tus padres -sonreí con tristeza, por un momento se me había olvidado por completo lo que le había pasado a mi casa.

- Siento mucho lo que sucedió con tu Casa, Lo. -acarició mi mejilla con tanto cariño que me apasiguaba.

- Ya lo erreglaré para ti, y para Alice. Lo prometo. -besé rápidamente sus labios.

-Aún no puedo entender cómo es que sucedió todo.-acariciaba el contorno de mis labios.

–Tal vez un corto circuito, bella. Pero... en fin, más tarde iré hablar con los del seguro.–comenté tumbandome aun lado de ella.

- Todo irá bien, Lau. Yo puedo ocupar la herencia de mi madre para cubrir algunos gastos... compraremos lo que haga falta para la bebé, para ti y para mí-cogió mi mano y besó el dorso de esta, haciéndome sonreír.

-No, no, mi bella niña. De eso me encargaré yo. Tú no tienes porqué preocuparte, ni nada de eso. ¿Bien? -acariciaba su mano con mi pulgar.

-Pero Lau...

-Pero nada. Tú déjame a mí. -me estiré un poco para dejarle un beso en la mejilla-Tengo ahorros, algunas personas me deben dinero, y a parte lo de la aseguradora.... y ya está.

-Pero yo también quiero ayudarte, Lauren. No es justo para ti.

-A ver, aquí la bebé y tú son mi prioridad. Y no quiero escuchar más. -dije alzando las cejas de manera retadora.

-Ya veremos... -murmuró. Estuve apunto de refutar, pero tocaron la puerta.

-Lauren, soy Chris. Necesito hablar contigo un momento -volvió a tocar la puerta de manera violenta.

AMARTE ASÍ; CAMREN G!PWhere stories live. Discover now