AMARTE ASÍ; CAMREN G!P

CAPÍTULO 31

-POV LAUREN -

Después de haber sobornado al guardia para que no nos llevara detenidos por 'actos inapropiados en lugares publicos',  conduje hasta el centro de Seattle. Ya sé que estuvo mal sobornar al guardia, era corrupto, pero... tenía una sorpresa para mi Bella mujer, y no quería arruinarlo, así que valía la pena.

-Lauren...¿a dónde vamos?-preguntó mi esposa, supongo que ya se había dado cuenta que no era la ruta para ir a casa.

-Esto es un secuestro -contesté con una sonrisa, volteando a mirarla. Ella me miró y soltó una risita.

-Lo siento, no te puedo tomar en serio con ese chichón en la frente. Vamos a casa para curar eso-señaló.

-Es que tú eres una salvaje, por eso tengo esto-señalé mirando unos segundos por el retrovisor -a Alice le encantará, dira que soy un unicornio o algo parecido -soltó en una risita al escucharme.

-O se asustara de ver a su madre con un golpe así- asentí estacionandome una calle antes de su nuevo restaurante. -¿Qué vamos hacer?-preguntó curiosa, mirando hacia la acera del otro lado; tal vez, creía que cenariamos en la plaza que había al frente.

-Mira, ponte esto. Necesito que te vendes los ojos -señalé dándole mi corbata. Ella frunció su ceño con una sonrisa.-Anda, niñita- guiñé un ojo. Ella asintió,desabrochando su cinturón para después tomar la corbata.

-No soy una niñita. Ayúdame -pidió, inclinandose un poco hacía mí. Y así lo hice, le ayudé a vendarse los ojos,

-Muy bien- dije comenzando a andar el auto de nuevo. Ella no dijo nada, sólo tenía una sonrisa enorme su rostro.

Metros más adelante, me detuve en frente al "Bella Gourmet". Sam y Sinu, me habían ayudado a escoger el nombre para el lugar.

-Muy bien, mi Bella y hermosa dama. Vamos a bajar- dejé un beso en su mejilla, para después descender del auto, y correr al otro lado para abrirle la puerta a mi mujer y ayudarle a salir. -Con cuidado, no queremos otro unicornio en la familia -bromeé. Ella soltó un risacogiendo mi mano con firmeza.

-¿En dónde estamos?-preguntó curiosa,sin dejar de sonreír.

-Muy bien, bueno...-le ayudé a moverse un poco; a manera de que quedara frente al restaurante. -Bella, esto es...es una pequeña muestra de lo mucho que te amo, y de lo mucho que estoy agradecida contigo. Esperé este día por más de cuatro años, así que...espero que  te guste mucho -dije abrazandola. Para después comenzar a quitarle la corbata de los ojos- Sorpresa mi amor, Bienvenida al "Bella Gourmet" , tu restaurante.-dije por fin, mirando la fachada del lugar.
No era parecido a aquel viejo club que era antes.

-Oh Dios mío...-susurró en un hilo de voz, volteando a mirarme; con sus ojitos húmedos -Es...es en serio?¿Es real?-asentí con una sonrisa,cogiendo su rostro entre mis manos.

-Es real, este es tu restaurante. Sólo tuyo, de nadie más -le di un pequeño beso en los labios.

-No estás bromeando ¿no?-preguntó. Y yo negué, mirando como descendió una pequeña lágrima.

-No,Camila. Este es tu lugar, tu restaurante, en serio-señalé, haciendo que volviera a mirarlo.

-Oh, Lauren...-dijo entre sollozos, seguido, me abrazó.-No...Yo...-sonreí abrazándola más fuerte.

-Dime que te gusta, ven,mira... Tienes que verlo por adentro, este será el mejor resturante del mundo ¿Sabes por qué? porque tú serás quién lo dirija y... y... para que hagas esos platillos deliciosos, ¡Dios santo! Tus postres, las galletas, los pastelillos y los pancakes que tanto nos gustan a mí y a nuestra hija- Levanté sus rostro, y limpié sus lagrimas- Eso es poco de lo mucho que te has esforzado Camila. Te lo mereces...-ella negó-¿no? Claro que si, Bella, esto te lo mereces. -dejé un besito sobre sus labios, sintiendo lo salado de sus lagrimas.-Te amo tanto -sonreí sobre sus labios, dándole otro beso.