El rol protagonico

Capítulo 17

Hola mis ternuritas!

Debía subir antes otras cosas pero tengo un extraño sentimiento de fidelidad semanal con este fic.

Sé que hay una persona esperandolo ahora a las 3 am, así que para que veas que cumplo y te quiero además.

Esté capítulo tambien tiene emociones medias mamonas (Sino no lo escribiría yo)

Este lo narra Ichimatsu.

Espero que sea de su agrado!

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"Espero que esta vez seas feliz con él, y logres encontrar lo que yo no te pude dar" ¿Cómo podría siquiera pensar en volver a sonreír sin Karamatsu?

Ese idiota de brillante y dolorosa personalidad devastó a quien solía interpretar para moldear entre versos de amor y plena voluntad un nuevo enfermero. Él me hizo confrontar mis demonios al sostener mis cortadas en una ilusa y confiada mirada, acogió un sucio, mugriento y miserable corazón entre sus cálidas y prometedoras manos, amó un cuerpo apedreado con repulsivas cicatrices, desgarrando el cristal. Él me mostró que sí era posible el volverse a enamorar, y que ni los esquemas, ni las ojeadas eran de importar.

Por eso, ahora, sin él, me siento tan roto y vacío. Muerto, como si se hubiesen esfumado mis fuerzas para respirar y el mundo hubiese perdido hasta su última gota de sentido; como si mis piernas, exhaustas, frenaran en plena carrera dejándose atropellar.

Nunca comprenderé que tanto le entregué de mí, solo supe que él me dejo sin nada cuando su esencia de mis labios se esfumo. Estaba enamorado. Aun tratando de abandonar los tormentos de Osomatsu, y confrontar la mierda de autoestima con la que me solía pisotear quería intentarlo, tratar de avanzar por él.

Pero no debía.

"Tienes una sonrisa tan bonita" Porque terminaríamos en sentencia.

No podía.

El mundo es un lugar cruel, carente de rostro, de palabras cobardes y ojeadas vacías, para el resto es fácil juzgar, impulsar un alma herida hacia la locura y hacerla saltar; bien sé yo a lo que te lleva la cobardía. Por inercia torcí mi boca recostado en el sofá de lo que fue mi apartamento; apretando esas pequeñas y asquerosas cicatrices sobre mi muñeca. No podía permitir que él pasará por esa masacre, por ese carnaval de monstruosidad. No podía permitir que él se convirtiera en lo que yo fui.

"Ichimatsu" Y ahora, cuando ya es muy tarde "Oye" Sé que lo amó, y sé que los prejuicios no me habrían importado "No te dejé entrar a mi hogar para que te sentaras con cara de culo toda la tarde" Pero que egoísta.

"En primer lugar" Negando con la nuca, centrando mi mirada es esas traviesas escarlatas "La renta la pagamos a medias cuando conseguimos el lugar, así que, en teoría, esto sigue siendo de mi propiedad" Socarronas y arrogantes.

"¿En segundo?" Osomatsu se arrojó a mi lado en el sofá, con una apariencia arreglada y una mueca atestada. Una bella farsa.

"Esta es mi cara de siempre" Él rio, dejando que su cabeza colgará por el brazo del sillón "No es como si lo pudiese evitar" Actuación.

"Tú" El ambiente entre nosotros sin previo aviso decayó "Querías mucho a Karamatsu" Ahogándonos en uno denso, sofocante "¿No es así?" Bastó un atisbo para saber que era redundante el preguntar. Cruel.

"¿Quieres que lo niegue para que tu ego siga intacto?" Cuando levante una ceja irónica él retomó su postura, seria "Porque no lo haré" Tan ajena.

"Quiero verte convencido y contento con la decisión que has tomado" Sus dedos se arrastraron por los cojines del sofá, indecisos "Pensé que cambiarías al haber renunciado a la escuela para ponerte a busca algo más" Clamando por el reflejo de un chico que con esas orbes azules falleció "Sin embargo, lo único que has hecho estas semanas es recostarte y actuar como un emo" Estaba cansado.