El error (Kaisoo)

Capítulo 8: ¿Qué ha pasado?

- Kyungsoo... - Los ojos del nombrado se abrieron de golpe, su cuerpo entero se tensó sobre el del moreno. Luego de un minuto de silencio en que no tenía idea de lo que debí hacer, si responder o no, Jongin le llamó su voz sonando gruesa y varonil por la mañana retumbaba en sus oídos. – Kyungsoo, sé que estás despierto

Sí, lo estaba, pero se negaba a responder ¿Qué iba a decir después de todo? ¡Se había acostado con Jongin!

De un momento a otro fue sacudido, Kyungsoo paso de su cómoda posición a estar tocando su espalda contra el colchón, el peso del cuerpo firme de Jongin estaba sobre el suyo y sus manos atrapadas en las suyas por sobre su cabeza.

Los ojos negros de Jongin lo observaron directamente con el ceño arrugado, Kyungsoo no sabía que decirle, se quedaron mirando en silencio, sintiendo las ganas de romper ese ambiente extraño entre ambos.

El menor le apartó la mirada, simplemente no podía mirarlo a la cara, no después de lo que había pasado, tenía en mente muchas cosas pero ninguna era lo suficientemente clara en ese momento, y por supuesto que lo era mucho menos cuando fue consciente de que entre sus piernas había algo que estaba presionando y distrayéndolo.

¿Cómo era posible que estuviera así por la mañana?

- ¿No piensas mirarme?

No. La verdad es que no podía hacerlo. Kyungsoo sentía el cuerpo caliente y ya nada tenía que ver con si tenía fiebre o no. Estar de esa forma con el moreno era tremendamente excitante y aunque no quería admitirlo, se sentía sofocado y si no se apartaba pronto iba a ceder otra vez.

- No tengo ganas de verte ahora mismo

- Bien... - Jongin se quedó en silencio un par de segundos, sin apartar la mirada del bajito hasta que se apartó de su cuerpo dejando solo una corriente de aire frío estrellándose contra su cuerpo.

Kyungsoo se odio por un segundo, podría haber dicho alguna cosa más pero no, lo había arruinado otra vez, pero esa no era su culpa... o eso quería creer.

Jongin se sentó en la cama, sin pudor alguno, ni siquiera intentó cubrirse con las sabanas. Kyungsoo aguantó porque, si lo miraba bien, podría ver perfectamente esa erección de la mañana, su cuerpo tonificado y su rostro atractivo como el demonio con los labios apretados.

El teléfono de Kyungsoo rompió el incómodo silencio, Kyungsoo jaló la sábana para cubrirse un poco antes de levantare a contestar, aunque podía sentir sobre él la mirada penetrante de Jongin

- Papá...

**

- ¡Kyungsoo! Al fin llegas... - Luhan estaba en la entrada de la casa esperando por él y apenas entró el chico le dio un abrazo y una miradita significativa

Como si él no tuviera ya suficientes problemas ahora se sumaba aquello.

- Ya llegó? – Preguntó una vez que Luhan lo había soltado y saludaba a Jongin a su lado.

- Esta mañana... - Confirmó el chico – Dios, no puedo creer que tenga que pasar por esto a mi edad

- ¿Qué quieres decir?

El chico suspiró, dándole una miradita significativa que Kyungsoo comprendió luego de un momento.

- ¿Otra vez con eso?

- No ha parado... y papá está tan de acuerdo que es como si se hubieran pesto de acuerdo a propósito

Jongin no entendía mucho de la conversación, pero se mantuvo a un lado de su esposo y su cuñado viendo como ambos se miraban con cara de desagrado.