CAPITULO 29:TE DIJE QUE REGRESARÍA

388 38 2
                                    

-Estoy aquí mamá- hablé mientras respiraba hondo entrando a la casa. Arin y yo íbamos con nuestras manos entrelazadas, de vez en cuando me apretaba un poco la mano en signo de apoyo, pero para este entonces no sabía cuál de los dos estaba más nervioso.

-¡Jania! –mamá salió del salón corriendo en mi dirección y tras ella, mi padre en compañía de mis hermanos. Mi madre al llegar a mi lado, lo único que hizo fue cubrirme en un fuerte abrazo. Sin dudarlo pasé mis manos alrededor de su pequeño y frágil cuerpo –Oh amor pensé que te había pasado algo –mamá lloraba mientras hablaba conmigo – Enserio tenía miedo amor, Francisco llamó para decirme que me despidiera de mi hija – me dolía ver a mi madre de esta forma, mi madre es una mujer que yo puedo considerar fuerte. Pero cuando enserio algo le duele, ella colapsa y se pone muy mal, y lamento que ahora yo sea la causa de esta situación

-Tranquila cariño, Jania está bien- dijo papá mientras la agarraba de los brazos– Me alegra que estés bien hija mía – habló mi papá cerrándome en un fuerte abrazo mientras Jerone sostenía a mamá.

-Papá ..- no pude terminar mi frase, porque mi garganta ardía, el nudo que tenía en ella era muy doloroso y terriblemente asqueroso. Solo tenía ganas de gritar al mismo tiempo llorar. Pero sabía que pronto tenía la oportunidad de hacerlo – Francisco ..

-Tranquila amor, ya está, estás bien –habló papá mientras sobaba las parte trasera de mi cabeza.

Todos en la sala nos quedamos en silencio, el ambiente no era cómodo, solo se escuchaba los sollozos de mi mamá. Yo afortunadamente ya había podido calmarme.

Luego que mi papá me separó de su cuerpo, por fin notaron la presencia de Arin con nosotros. Este al darse cuenta que los ojos de mi familia estaban en el carraspeó incómodo.

-Buenos días, mi nombre es Arin –le dio la mano a mi papá- Gusto en conocerlo señor.

Papá solo lo miro con dureza, no creo que los tatuajes ayuden de mucho. Arin vestía un jean oscuro, una camisa de algodón oscura y sus zapatos negros. No es la manera en la que hubiera querido presentarles a mis padres, pero ni modo, ya no hay opción.

-Un gusto muchacho, eh hablado con mi cuñado y me ha dicho que te dé una oportunidad- apretó la mano de Arin, con un poco más de fuerza de lo requerido, pero a Arin eso no pareció incomodarle o hacerlo flaquear – Espero que sepas valorar y cuidar a mi hija, recuerda que es la única que tengo.

-Ya Bradley, asustas al muchacho –mamá que ya se había secado sus lágrimas, estaba frente a Arin sonriéndole con todos sus dientes –Yo soy Issy, Issy Mort, me da mucho gusto conocerte Arin, eh tenido varias opiniones de ti – me giñó el ojo y a él lo abrazo- Me da mucho gusto que estés conquistando a mi hija –lo miró de arriba abajo inspeccionándolo y volvió a sonreír –Tienes un look peculiar, me gusta – rió.

-El gusto es mío señora Mort- habló Arin sonriéndole, enseñando esa hilera de dientes tan perfecta y tan blanca que lo hace tan peculiar.

-Oh no cariño, dime Issy o mamá, cualquiera me gusta – mi madre le dio un pequeño golpe en el hombro.

-Issy está bien –hablaron rápidamente mis hermanos al unísono.

-Jania creo que debemos de hablar –habló papá cambiando el tema –Francisco se ha contactado con nosotros y queremos saber todo, porque nos dijo que tú estabas al tanto de todo lo que ha pasado.

-Sí, creo que debemos de hablar –suspiré- Pero antes que nada-entrelace mis dedos con los de Arin- Quiero que Arin esté con nosotros.

-Cariño pero esta conversación es netamente familiar –habló papá en objeción a lo que yo había acabado de decir.

NO PRINCESA! #WATTYS2018Where stories live. Discover now