Orlando tomó a Abel en sus brazos- ¡Abel! –gritó asustado pues su amado no respondía, salió corriendo sin importarle si estaba desnudo o no, corrió tan rápido, demasiado rápido que ningún Mortal podría superarlo pues era un hombre lobo, Alfa supremo.
Llegó a la hacienda y entró a la mansión- ¡traigan un doctor ahora! –ordenó con desesperación, los sirvientes al ver a Abel en los brazos del amo se espantaron y todos corrieron por ayuda, Orlando subió las escaleras con rapidez y entró a su habitación dejando con delicadeza y lentitud a Abel- te pondrás bien mi amor, por mi vida que así sea –susurró y besó los labios de Abel
Cameron llegó de la nada y miró a Abel, se acercó a él y tocó su frente- tiene fiebre –dijo y Orlando se desesperó aún más, Cameron lo miró- Orlando cámbiate el doctor ya viene –dijo
-¿cómo puedes pedirme que me....? –Cameron lo interrumpió
-hazlo –le ordenó y Orlando con pesar se fue a poner algo de ropa- Abel –susurró Cameron pues sabía que pasaba, le preocupaba que todo se saliera de control
Minutos después Orlando llegó de nuevo a la habitación ya vestido y se sentó a lado de su amado, en eso se abre la puerta de golpe y entra el doctor
-Denme permiso –pidió y los dos se alejaron, el doctor sacó su estetoscopio para revisar los signos vitales de Abel, luego con su mano tocó la frente se Abel, este hizo una mueca y con sus manos presionó el vientre, con cuidado en todas partes, su rostro cambió a uno asombrado y luego sacó algo de su maletín, era un líquido transparente y un algodón, se lo puso cerca de la nariz a Abel y este despertó
-Abel –dijo Orlando haciéndose paso y tomó con delicadeza la mano de Abel
-Orlando –susurró Abel mirándo los ojos de Orlando- estás vivo –sonrió
-Jamás me iría de tu lado –susurró Orlando y besó su frente
-Tengo que decirles algo –dijo el doctor rompiendo el aura romántica
-Claro –dijo Orlando
-Creo que ya se el porqué de su desmayo pero no puedo confirmarlo hasta que se le hagan unos estudios –dijo mirando a Abel, miró más profundo sus ojos- Oh por dios –sonrió
-¿qué pasa? –dijo Orlando confundido
-No necesito de estudios, tengo la respuesta –les sonrió- Abel está en cinta –dijo y Abel se sorprendió tanto al igual de Orlando y Cameron
-¿cómo? –dijo Cameron sorprendido, Pero al contrario de Orlando este solo podía mostrar un rostro alegre
-¡Vamos a ser padres! –tomó el rostro de Abel y lo besó con ternura, jamás en su vida Orlando Aberasturi había sido tan feliz, Abel le sonrió y luego miró al doctor
-¿Está seguro? –dijo Abel
-sí, solo que no sé cuánto tienes –dijo sonriendo- podría deducir que 2 o 3 semanas –dijo
-Quiero saber cuánto tiene y que cuidados debe llevar –dijo Orlando sin despegarse de Abel
-Para empezar no tiene que sufrir de emociones fuertes, no tomar licores, no fumar no levantar cosas pesadas, las vitaminas se las daré cuando vengan a la cita –comenzó a anotar en una pequeña libretita- listo –les dio la nota- en esa fecha los espero –sonrió
-Claro Doctor y Gracias –dijo Abel sonriendo
-Y para tu fiebre solo con paños de agua fría, no es grave solo reposa ¿sí? –dijo el doctor
-Si doctor gracias –sonrió
-Me retiro –guardó sus cosas- nos vemos –se despidió y se fue
Orlando le sonrió a Abel y acarició su vientre- Tú y August tendrán a su bebé casi al mismo tiempo –sonrió
-Sería fantástico –Abel sonrió y miró su vientre aún plano
-Bien, yo me quedaré cuidando de Abel, tú tienes que calmar todo ese alboroto que has cometido Orlando –dijo Cameron
Orlando suspiró y asintió- sí, nos vemos en un rato amor –besó los labios de Abel y el vientre de este
-Cuídate –pidió en un susurro
-Estaré bien cielo –sonrió Orlando y soltó su mano para después irse
Orlando no sabía cómo arreglar el problema que acaba de cometer pues sabía que de alguna manera su padre se enfadaría y no quería matarlo si se enfrenta a él...
Penúltimo Capítulo de la primera temporada
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Embriagante Destino©
אנשי זאבel vino, mi perdición , tú , amor mío eres igual que el vino , dulce y amargo a la vez, que con solo probarte me embriagas, me vuelves adicto a ti, no puedo alejarme de ti ahora, eres mío. una historia narrada por el mas puro amor de un joven huma...