Irene y Carlo entraron al salón para reunirse con el padre de la chica, al parecer tenía una noticia me darle a su hija.
- Irene, cariño, sé que quizás es muy repentino, pero he decidido que voy a divorciarme de tu madre.
- ¿Y eso? ¿Por qué papá?
- En primer lugar, porque no la amo, y en segundo, por que es muy cruel contigo. No sé como una madre puede ser tan dura con su hija pequeña sólo por que no hace todo lo que ella hizo, casarse por dinero. Tu eres como yo, Irene. Adela, es como tu madre, ambas materialistas que dudo que tengan sentimientos sinceros hacia alguien.
- Papá, lo siento mucho. ¿Estás bien? Sé que esto es muy difícil para ti. ¿Cómo se lo han tomado ellas?
- Se han ido a casa de tus abuelos. Tu madre parecía que iba a lanzarme llamas por la boca, sobre todo cuando le dije hice la separación de bienes. Adela se echó a llorar, sólo cuando supo que no llevará un céntimo más de mi parte hasta que decida trabajar. Estoy cansado de que se vaya de compras con mi dinero.Irene estaba sorprendida de aquella noticia, sobre todo por que su padre nunca se había manifestado cuando tenían las discusiones en las cenas familiares.
- Bueno, papá, sabes que te apoyo y que estoy de tu lado. Pídeme lo que necesites, ¿de acuerdo? Te quiero.
Irene abrazó a su padre.
Carlo estaba apoyado en el marco de la puerta escuchando y observando la escena.Una vez que aclararon las cosas, los chicos se prepararon para volver a la ciudad.
- Carlo, cuida bien de mi hija. Siempre me has gustado para ella.
- Gracias, señor. Haré todo lo que esté en mis manos para que Irene esté bien.
- Adiós, papá. Llámame si lo necesitas y si quieres que venga, lo haré corriendo.
- De acuerdo. Ahora iros antes de que se forme atasco en la carretera.Los chicos, así lo hicieron.
Valentina le había contando todo lo relacionado con Lucas a Claudia, a decir verdad, le había sentado bien desvelarle el secreto a alguien, que aún encima, se había emocionado tanto con ello.
- Valentina, creo que deberías hacer pública vuestra relación. Está más que claro que sois tal para cual.
- Es que es la primera vez que me gusta alguien así y a veces estoy confusa. No sé que piensa él realmente de ésto porque últimamente está centrado en su trabajo. Ya no estamos quedando tan a menudo...
- Sólo dale tiempo a él también. Pero en cuanto eso se solucione, opto porque seáis novios oficiales.Valentina sonrió ante el entusiasmo de Claudia, pero lo cierto es que Valentina empezó a dudar de muchas cosas, ya que la actitud de Lucas parecía haber cambiado, aún así, no iba a desmoronarse antes de tiempo sólo por culpa de conjeturas sin fundamento.
Uriel y Mateo también estaban en versión secreta y no se animaron a contarle a nadie su romance clandestino. Después de su primera noche juntos, repitieron un par de veces más sin ser descubiertos. Para Uriel, sólo era un rollo, pero para Mateo parecía ser algo más. Tal vez ellos dos deberían aclararse primero antes de seguir con algo más serio, porque no se conocían demasiado a fondo en lo que a personalidad se refería.
- Mateo, ésto me gusta. Tú y yo juntos, pero está siendo todo muy repentino y yo necesito espacio para pensar.
- Lo entiendo. Reconozco que no te he dado demasiadas opciones para elegir. Me parece bien ir más lento. Es mejor asegurarse antes iniciar algo sin sentido.
- ¿Crees que podríamos llegar a algo más serio?
- ¡Estoy seguro! De todas formas, me alegro de que hayas sido sincero y me dijeras que prefieres ir despacio y no crear ilusiones que luego podrían ser rotas.
- Nene, mientras probamos como resulta, aprovechemos el tiempo.
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Prometo no volver... A herirte (Prometo #2)
RomanceCarlo e Irene no se soportan. Ambos tienen una guerra desde el primer día en el que se conocen, y por ello, no pueden pasar más de dos minutos uno al lado del otro. La aparición de Sofía y Mateo empeorará todavía más la situación. Pero cuando menos...