Cap 26: La séptima melodía y segundo fragmento. Valor y reunión.

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Narra tercera persona:

Luego de un largo viaje de regreso hasta la entrada del templo lograron poner la estatua en su lugar para hacer que la puerta se abriese, cruzarla y llegar a la puerta del jefe. Link sacó la llave del jefe y se disponía a abrirla; pero algo lo detuvo.

- María que te pasa? - preguntó Midna. El heroe se volteó y miró a la guardiana sujetando con fuerza el cetro con una expresión de terror. Sus piernas temblaban mucho así como todo su cuerpo.

- Mi amor que sucede? - cuestionó el héroe acercándose a su novia.

- Link...no puedo...no quiero entrar...no puedo - habló temerosa la pelicastaño.

- Cariño, ya estamos cerca. Vamos - María negó rotundamente - Bebé, en serio. No quiero tomar medidas drásticas - la chica volvió a negarse. Link soltó un suspiro resignado. Le entregó la llave a Midna quien se fue a la puerta y la abrió. El héroe cargó a su guardiana como sacó y entraron. María pataleaba y gritaba tratando de zafarse; pero frenó al sentir sus pies en el suelo. Miró a su alrededor y vio a las cuatro gigantes estatuas en las esquinas del lugar que eran ilumiandas por los rayos de luz que entraban del techo. La chica rápidamente se escondió detrás de su pareja aterrorizada.

- Que raro. No veo nada aquí. Oye María, segura que el monstruo está aquí? - cuestionó Midna a la chica. Esta le respondió de forma afirmativa - Entonces, donde está?! - de forma temblorosa, la guardiana apuntó con su dedo al techo mirando al suelo. El héroe y la twili levantaron la mirada y se quedaron mudos al ver a la criatura - Ummm...María...porque no dijste que la criatura era...una araña peluda gigante?!

- Porque le tengo demasiado terror!

- Y como lo venciste en el juego?! - dijo Link viendo al monstruo

- De hecho...le pedía a mi mamá o a algunos de mis hermanos que lo venciera y yo le decía como - en ese momento, el enorme arácnido atacó lanzando un rayo de fuego hacia el grupo haciendo que las chicas se separaran del rubio.

- Entonces, dinos cómo vencer a esa cosa! - exclamó la twili. La guardiana estaba por hablar cuando un grito las alertó. Ambas llevaron su vista hasta la fuente del sonido y se asustaron al ver que la horrible criatura había atrapado a Link atándolo y colgándolo con una cuerda de hilo de araña. Midna no tuvo tiempo de reaccionar, ya que había sido atrapada también. La twili y el héroe pedían ayuda y luchaban por liberarse; pero María no podía moverse por el terror.

- Que decepción - Link y Midna miraron a su lado y vieron a Zant en holograma - La diva elegida por las diosas. La guardiana de las melodías. Debería llamarse mejor la cobarde de las melodías.

- Cierra la boca Zant! - le gritó el héroe

- Porque? Si ya vieron por ustedes mismos. Ustedes están en peligro y la chica está temblando como una hoja. Valiente? Más bien es una gatita asustada, y por eso ustedes morirán. Armaghoma, disfruta tu comida - la gigantesca araña abrió su enorme ojo y comenzó a acercar sus colmillos hacia el héroe. Este luchó más por ser libre de sus ataduras; pero al ver demasiado cerca las fauces del monstruo lo hicieron parar. Parecía el fin para el héroe elegido; pero de forma repentina, Armaghoma cayó al suelo retorciéndose - Que?! Que sucedió?! - tanto Zant como Link y Midna estaban confundidos por lo ocurrido, y se llevaron el asombro de ver cómo uno de los puños de las estatuas golpeaba a Armaghoma con fuerza.

- Maldito bicho...mis amigos no son tu cena! - gritó la guardiana con el cetro en una mano y el arco con las flechas en su espalda. Rápidamente, Armaghoma se reincorporó y subió al techo.

El héroe elegido y la princesa de las hadasWhere stories live. Discover now