Capitulo 30: Amarga traición

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*esperen la señal*

Narra tercera persona:

La ciudad de los cielos se hacía más y más pequeña hasta desvanecerse a medida de que los jóvenes atravesaban las nubes que cubrían el lugar.

La pareja regresó a las tierras creadas por las diosas doradas, mas no fue un descenso seco.

- Link, estas bien? - preguntó María emergiendo con su amado del lago Hylia.

- Si, tranquila estoy bien, y tú?

- Estoy bien - la pareja subió a la orilla y se sentaron a esperar a secarse - Mis alas están empapadas...no podré abrirlas hasta que se sequen.

- Pero conociéndote mi amor, ni eso te detendrá - Link l guiño el ojo y María le sonrió sonrojada.

Ya sus vestimentas secas, se encaminaron al pueblo olvidado. Ahí, en sus formas de bestia y hada, entonaron la canción de la última piedra aulladora.

Ya habiendo invocado al espíritu del héroe del tiempo se dirigiendo al lugar en donde los esperaban: la entrada al castillo de Hyrule. El hyliano avanzó solo hacia al lobo dorado mientras su novia los veía a la distancia.

- Guardiana... - el hada dorada se posó sobre el hombro de la joven - Reúneme con él - María, comprendiendo, esperó el momento exacto para sujetar a su novio de su túnica y juntos estar ante el héroe del tiempo caído.

- El tiempo ha...tú?! Que hace la guardiana aquí?!

- Vine porque alguien te quiere ver! - María abrió las manos y de ellas salió el hada dorada. La luz de esta se intensificó hasta que apareció una joven hyliana de cabello rojizo y ropas parecidas a la guardiana actual.

 La luz de esta se intensificó hasta que apareció una joven hyliana de cabello rojizo y ropas parecidas a la guardiana actual

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- Te dije que nos volveríamos a ver mi héroe - musitó la chica pelirroja con una suave sonrisa. El héroe del tiempo había perdido su voz; su ser y corazón gritaban de agradecimiento y júbilo y sus ojos temblorosos reflejaron esos gritos en lágrimas infinitas.

- Grandísima tonta - fue lo único que el hyliano rubio pronunció para estrecharla con todas sus fuerzas.

- La guardiana anterior...María como...

- Cuando fuiste a darle a Ilia la figura de madera, ella se me apareció; y justo antes de que llegáramos aquí volvió a aparecer y me pidió que la ayudara a reunirse con él.

- Ya veo - los actuales elegidos miraban tiernamente como sus ancestros se abrazaban y se contemplaban constantemente con tanto cariño y amor.

- Muchas gracias guardiana del crepúsculo. Gracias a ti, he recuperado al amor de mi vida.

El héroe elegido y la princesa de las hadasWhere stories live. Discover now