Cyprien [everybody's changing]

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Has teñido los cielos
de blanco y vacío
porque nada pesa tanto como la juventud
enamorada de sí misma,
apuñalando a la luna por la espalda
descolorida gracias al llanto.

Alma arrugada,
oculta como poema sin vida
aguarda esperando ser el arte
del pasado y los deshojados árboles
de recuerdos arrancados.

Los relojes hablan mientras cuentan sus muertes,
ellos son miseria
y frialdad.

Con desprendida libertad cuestionas a los ríos imperturbables,
conteniendo un odio irremediable por la vida
pero clamas tener la inmortalidad
de astros que suelen estar ahí para ti.

El sol abraza con brazos gélidos
a los secretos que las sombras desconocen
y las mentes piensan,
malditas por ver lo que nadie observa.

Meditando frente al futuro, invisible para seres pasajeros
de aquí hacia allá,
esperando que alas les crezcan
o que la brisa de otoño marchite los pétalos
con voz de océano.

Palabras que no cicatrizan nunca,
fantasmas no demasiado fuertes
son los que rompen espejos
y observan a los monstruos en el techo,
sentándose con sentimientos agrietados
sin poder hablar,
las estrellas los mantienen cegados.

Frágil el camino
que siempre comienza en el final
mortales los hilos
que sostienen una jaula dorada
en la que siempre has guardado tus tormentos;
saludando como viejos sueños,
indestructibles cual vida en primavera.

Quiebra las ilusiones de lluvias grises
y retratos perdidos,
a pesar de que la belleza
es perdida entre paredes y rincones
por donde corre la nostalgia
de ser alguien.

Agrieta la realidad,
pierde lo que nunca te perteneció;
a veces lo único que pierdes
son ecos roídos de soledad.

Broken PeopleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora