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Sae Wa tembló un poco en su lugar y si no fuera porque su antifaz era bastante grande y llamativo Yoongi hubiese podido ver la expresión de sorpresa en sus ojos.

Esa voz...

Esa voz indiscutiblemente era del hombre que le quitaba el sueño, del hombre que la empujaba a seguir yendo a Neon y quien la había hecho tener tantas fantasías prohibidas. 

Esa voz era de él. Min Yoongi era el chico del antifaz negro que hoy se dejaba atrapar por las oscuras garras de Neon.

Sae se quedó petrificada cuando lo reconoció y Yoongi simplemente la miraba expectante detrás de su oscuro y negro antifaz sin llegar a decir una palabra más. 

¿Debía tomarlo por un brazo y llevárselo directamente a una de sus habitaciones y cumplir todas sus fantasías?

¿Debía quitarse el antifaz y mostrar su identidad?

¿Debía correr...?

Todas las preguntas golpeaban el cerebro de Sae a gran velocidad y lo que parecían eternos segundos para ella debatiéndose sobre qué era lo que debía hacer, una chica con antifaz y vestido rojo de lentejuelas apareció en su campo visual y se acercó a Yoongi para decirle algo al oído. Yoongi sonrió nasalmente y se levantó de la mesa donde estaba.

— Y...yo... —Las palabras no salían de la boca de Sae.

La chica entrecruzó los dedos con los de Yoongi y a este no pareció importarle mucho aquello ni tampoco que Sae estaba a punto de tener un colapso nervioso.

— Vamos —Le dijo la chica y los dos empezaron a caminar en sentido de las habitaciones.

¡No!

Sae Wa sacó valentía de donde no tenía y tomó el brazo de Yoongi haciendo que ambos individuos se giraran y la miraran confundidos.

— ¿Qué sucede contigo? —Le preguntó la chica —Ya lo había apartado para mí.

Yoongi frunció el ceño y se soltó suavemente del agarre de Sae dejándola con un nudo en la garganta. 

¿Por qué estás aquí? 

Eso hubiese querido preguntarle pero ninguno de los dos le dio chance y siguieron con lo que tenían planeado hacer esa noche. 

Sae Wa se desmoronó allí mismo y su corazón se fragmentó en varios pedazos. Debía estar feliz de saber que Yoongi era cliente de Neon porque así podría tener una oportunidad con él la próxima vez que lo viera pero eso no la dejaba tranquila. 

¿Cómo ese señor Min perfecto para ella se metía en esos lugares? Ella era el desastre, no él. 

¿Cómo el señor Min que lucía como un hombre incorruptible follaba con una desconocida?

Y la pregunta que más vueltas le daba en la cabeza, ¿por qué Min Yoongi le estaba siendo infiel a su esposa? 

***


Jimin se estaba comiendo una salchicha cuando escuchó los incesantes golpes en la puerta.

— ¡Ya voy! —Gritó dejando la salchicha a medio morder en el plato —¡Cielos! ¿Qué mier... —Se sorprendió cuando Sae Wa le brincó encima llorando a punto de tener un colapso nervioso —¿Sae?

— Esto es una mierda, Jimin... —Murmuró en el pecho del chico.

— ¿De qué hablas? 

neon → min yoongiWhere stories live. Discover now