neon → min yoongi

36

  1 mes después.   

  — Sae, ¿me pasas esos documentos sobre el estante? —Pidió el director de la sede en la cual Sae había empezado a trabajar desde su traslado.

— Claro —Ella se levantó lentamente y cogió los papeles. Se distrajo unos segundos mirando por la ventana y notó que el auto que se estaba estacionando delante del edificio se le hacía conocido. 

Taehyung otra vez había venido a saludarla y a traerle el almuerzo. Ya llevaba haciendo los mismo durante quince días. 

  — Aquí tiene —Tendió los papeles y el director que era un hombre que ya pisaba los cuarenta le agradeció con una sonrisa —Si has terminado todas tus cosas hoy, te puedes ir temprano.

La verdad es que dentro de todo haber sido transferida no había sido del todo malo, en la nueva sede los empleados vivían con menos estrés gracias a que la carga de trabajo no era ni remotamente la misma que en la oficina principal, además su nuevo jefe era realmente amable. Claro que todo eso no importaba del todo cuando Sae recordaba que ya no podía ver a Yoongi.

No podía verlo, hablarle o tocarlo. Simplemente se había desvanecido como una gota de agua que se evapora ante el intenso calor del día.

Y ahora cuando más lo necesitaba.

Pero por más que la herida de Sae aún doliera como una cortada con papel en medio de los dedos, ella también tenía orgullo y sabía que si Yoongi había decidido alejarla así de su vida sin siquiera darle una explicación, debía respetar su decisión.

De todas formas, ella ya sabía el por qué de la reciente actitud de Yoongi. Lo había sabido quince días antes cuando vio la noticia en un periódico de empresarios de Corea.

  — Sae ~ —Taehyung ya estaba tocando la puerta de la oficina con las bolsas del almuerzo de ella y Jimin.

Sae miró al director y este le hizo señas con la mano de que podía retirarse junto a su amigo.

— No deberías gastar tanto dinero en mí —Le recriminó mientras caminaban por el pasillo.

— No digas tonterías —Sonrió —¡Ah, ahí está mi mejor amigo gay! —Dijo señalando a Jimin quien iba saliendo del baño.

— Maldita sea Taehyung, si alguien escucha eso vas a generar problemas aquí.

— ¿Qué tiene que seas gay? Me ofendes, pedazo de homofóbico —Dijo fingiendo molestia.

— No es eso, sino que habrá personas que me empezarán a escribir y no quiero lastimarlas al rechazarlas por tus insinuaciones —Jimin clavó la mirada en Sae y su rostro dejó de estar tan tenso.

— Ya, ya. Vamos a comer antes de que todo esto se enfríe —Dijo Taehyung y fueron caminando hasta el cafetín del edificio.

Jimin estaba seleccionando las bebidas mientras que Sae y Taehyung ya abrían los almuerzos en la mesa.

— ¿Sigues sin creerlo? —Le preguntó Sae cuando Taehyung de repente se quedó tieso mirando un periódico viejo que habían dejado cerca del filtro de agua que estaba a pocos pasos de su mesa.

— ¿Tú sí? —Sae clavó la mirada en su plato.

— No encuentro otra explicación a lo que está pasando, además...

— Sae, pero tienes que decirle —Tae ya pensaba que Yoongi había llevado las cosas demasiado lejos, tanto que él mismo empezaba a dudar si alejar a Sae era algo momentáneo o simplemente sería para siempre.