#8 problemas

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Tan solo habían pasado dos semanas de la visita con su padre y Barry se sentía exhausto, su vientre se sentía un poco más pesado para él, incluso ya era un poco notable tras sus holgadas ropas, nadie en la estación paso desapercibido ese hecho, pero tampoco lo quisieron mencionar, y lo atribuyeron a todas las golosinas que consumía constantemente. Aun con la lista de lo que no tenia permitido consumir continuo atiborrándose de comida y lo peor es que ya no podía ocultarlo de sus compañeros.

Antes cuando salían juntos después del trabajo Barry comía apenas lo que una persona normal, fingiendo estar satisfecho con poco y comiendo más al llegar a casa, pero ahora no, en su siguiente salida después del trabajo no se contuvo a la hora de pedir su orden, apenas tomo el menú y la mecerá se acerco pidió dos platillos de entrada y una sopa ligera que según Alfred nunca le debía de faltar, cuatro guisados con complementos como pastas y un postre. Al terminar de pedir volteo a ver a sus compañeros con una feliz sonrisa diciendo algo que sorprendió a la mesera que apuntaba todo.

—¿Y ustedes que pedirán?

Claro que a su pregunta ninguno pudo responder, incluso algunos de los clientes más cercanos a su mesa enfocaron su mirada sobre él, que algo incomodo por la repentina atención que atrajo se encogió en su propio asiento, agacho la cabeza apenado y se disculpo con ojitos llorosos, a eso sus acompañantes reaccionaron, tratando de animar a Barry y pidiendo sus propias ordenes  siguieron con su noche.

Una noche en la que atrajeron absolutamente todas las miradas hacia ellos, ya que su mesa estaba algo llena por lo que el velocista ordeno, los platos iban y venían, desde los y las meseras, como clientes y los mismos compañeros de Barry no dejaban de verlo comer, para todos los presentes era sorprendente la cantidad que estaba consumiendo, gracias a la sopa y las recomendaciones de Alfred no tuvo la necesidad de esa noche salir corriendo al baño, pero no se salvo de una leve reprimenda de parte de Arthur al saber que comió irritantes que estaban en la lista roja.

∞∞∞

A los dos días Barry creyó sentirse bien pero era lo contrario, gracias a las cosas que comió de la lista roja, más los químicos en el laboratorio y el hecho de que en la mañana había corrido a una velocidad entre lo normal y lo súper, cuando nadie lo vio, sentía que estaba por morir, sabía que exageraba pero no solo no soportaba los olores que le provocaron varias idas al baño sino que ya no aguantaba caminar, le dolían los pies y se sentía mareado.

—Deberías pedir el día Allen — le dijo su compañero al ver que Barry notaba muy pálido.
—Creo que me voy a desmayar — musito el velocista — también quiero llorar mi nariz me pica — al decir eso varias lagrimas resbalaron por su rostro.

Su compañero salió del laboratorio y notifico al capitán de la situación de Barry, que para cerciorarse de lo dicho fue al lugar donde estaba el menor encontrándolo llorando con una paleta en la boca.

—Allen si tan mal te sientes no deberías comer golosinas — regaño el jefe.
—No puedo evitarlo, son los antojos — bramo el velocista aún con algunas lagrimas y recostado sobre su escritorio.
—Pues deberías controlar esos antojos — comenzó a reñir el capitán haciendo que el menor le pusiera atención — estas engordando y perdiendo forma, si de por si llegas tarde a las escenas a como estas ahora sin querer moverte no-

El capitán detuvo su regaño al ver como Barry comenzaba a llorar de forma más alarmante, con cascadas en sus ojos y un chillido mesclado con balbuceos de no estar gordo y otras cosas inentendibles, dejando sorprendidos al jefe y compañero.

—No es mi culpa estar así, es solo que no sabía que podía embarazarme, no estoy gordo — soltó sin detener su llanto ni importarle revelar el secreto, solo se sentía mal por lo dicho.

Y si el asombro de ver a un adulto llorar de esa forma no había sido suficiente el shock de lo que les decía era demasiado para los hombres frente a él, el capitán dio la orden de cerrar el lugar y con más privacidad primero calmaron a Barry para después averiguar de que se trataba todo. Paso un rato para que dejara de llorar, los dolores que sentía y sus cambios de humor le jugaron una mala pasada por lo que al dejar el llanto se dedico a comer  bajo la constante mirad de sus acompañantes.

—Explícanos de que va todo esto Allen — pidió el capitán en tono tranquilo para no provocar al menor.
—Antes quisiera llamar a mi novio y padre.
—Sabes, no te estamos interrogando por un crimen, no es necesario traer a nadie — dijo su compañero de laboratorio.
—Pero me siento mal y dije algo que no tenia que decir — dijo en tono triste para seguir con uno casi molesto — así que los quiero aquí conmigo o no diré nada.
—Muy bien llama a tu novio — acepto el capitán — dudo que tengamos tiempo de hacer papeleos para traer a tu padre aquí.
—Bien, aunque no es a ese padre al que llamare — rezongo a lo dicho tomando su teléfono esperando a que contestaran — Wally ¿Puedes traer a Bruce a la estación? Es urgente y decirle a Arthur que venga — tras una afirmación del pelirrojo y un gracias de su parte colgó la llamada.

Los tres se quedaron en un sepulcral silencio, cosa que incomodaba al velocista así que solo seguía comiendo, ofreciéndole algunos de sus dulces a los mayores solo siendo aceptado por su compañero, pasaron cinco minutos y tocaron a la puerta, al abrir los dos hombres no esperaban ver al multimillonario Bruce Wayne frente a ellos, aunque sabían por una visita hacia tiempo, que Barry lo conocía.

—Buenas tardes caballeros, Barry — saludo Bruce entrando al laboratorio.

Ni bien dio un paso dentro el atlante había llegado viendo todo en el interior fijando su vista en su pareja, que con los ojos algo hinchados del llanto le saludo con la mano.

—¿Y ahora qué sucedió? — pregunto Arthur al entrar.
—Por erro les conté todo — respondió nervioso el menor — y también me siento mal.
—¿Exactamente que es todo y que tienes? — pregunto Bruce para saber con que tendría que lidiar.
—El señor Allen dice estar embarazado ¿Es eso cierto señor Wayne? — pregunto el capitán parándose frente a Bruce en espera de una respuesta.
—A mi me duele todo — dijo Barry que se sentía ignorado por los mayores haciendo que el atlante al instante fuera a su lado.
—Es verdad, ahora tendré que hablar con ustedes dos para saber si firmaran una carta de confidencialidad o una de despido, su decisión.
—Llevare a Barry a casa Wayne — dijo Arthur cargando al menor en sus brazos para salir del lugar sin respuesta o aprobación por los demás.

Todo lo posterior a su salida fue rápido, los oficiales aceptaron guardar el secreto después de que Bruce solo les explicara que su estado era máximo secreto y el capitán como jefe que era lo tendría que ayudar o él podría hacer que perdiera su trabajo, una amenaza que el Wayne bien podría cumplir. Por su lado la pareja llego a su hogar con un Barry súper apenado ya que Arthur no lo soltó en ningún momento desde que salió del laboratorio, por lo que todos en la estación lo vieron ser cargado al estilo princesa y no solo ellos sino que cada ciudadano que pasaba a su alrededor ya que el atlante no quiso pedir un taxi o subir a algún trasporte.


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Nunca habia escrito nada que fuera largo y continuo asi que releyendo lo pasado para hacer este senti el cap anterior un poco raro, si quedo mal?
Ahora tambie tengo la duda de si este quedo bien, y es que cuando inicie todo no sabia como hacerlo en oneshot y ahora me vienen varias ideas para mas caps, pero ya no se.

Tambien creo que el doctor, capitan y compañero deberian tener nombres, pero no suelo recordar el nombre de personajes occ asi que a partir de ahora seran el capitan David Singh y Julian Albert (ambos de la serie flash) por el doctor no se.

Bueno ya me “desahogue” espero que lo hayan disfrutado y saludos o/

¿Somos una familia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora