Capítulo 10

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Si Midoriya tendría que haber definido las últimas veinticuatro horas, hubiese usado solo un grito prolongado porque la verdad era lo único que podía salir de su boca

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Si Midoriya tendría que haber definido las últimas veinticuatro horas, hubiese usado solo un grito prolongado porque la verdad era lo único que podía salir de su boca.

Apenas y podía pensar con claridad. En menos de dos días habían ocurrido un sinfín de cosas; algunas buenas, otras malas, unas cuantas muy malas.

El resto... desastrosas.

Pero la que se llevaba la cereza del postre, el Plus Ultra, el premio de un millón de dólares, los calzones autografiados de All Might... era la repentina respuesta de su ladrón.

Y no era solo su respuesta, sino el tener el bendito descaro de poner condiciones a Izuku.

Él no entendía por qué le pasaban esas cosas. Estaba seguro de no haber sido un mal tipo antes —solo era un simple adolescente hormonado.

Había cosas peores en el mundo. Como ser los productores de Gran Torino On Ice y haberlo hecho esperar más de dos años por la nueva temporada. Eso era ser alguien malo. No Midoriya, que solo fantaseaba con chicos guapos como cualquier adolescente.

Si aquello era algún tipo de karma, quería presentar su denuncia. A Dios, a Odín, al universo, a Gran Torino... quien sea que estaba en el más allá.

Pero de nada le servía quejarse y agitar el puño a la vida tal como Kacchan lo haría —no era producente. Izuku no solucionaría su mala suerte de aquella forma.

Así que solo le quedaba una cosa: seguir adelante. Y sufrir en su cabeza.

Era por eso que le pidió a Uraraka que no volviese a tocar el tema del mensaje —al menos hasta que se decidiese, ya que no tenía ni puta idea de cuál de todas las ideas que tenía sería el final de My Hero Academia— e Izuku transitó por la escuela como si fuera el rey de todo —el rey de las burlas, claro estaba— y esperó pacientemente a que fuese la tarde para visitar la casa de Shouto Todoroki, su nuevo compañero de trabajo.

Aquello podía ser tanto algo bueno como algo desastroso en su lista diaria.

—Shouto es buen compañero de estudio —le sonrió Kirishima a la salida de clases—. ¡Ah, te envidio ahora! Él es tan inteligente.

—Bueno, Kacchan también lo es —intentó consolarlo Izuku, aunque en realidad estaba tragándose las ganas de poder ser mejor—. De hecho, saca mejores notas que Todoroki.

—Eso sí, pero se distrae tanto... ¡Ese chico siempre tiene algo para quejarse! Que si hace calor, que si una mosca le vuela cerca, que si la vida es una mierda, que si mi cara le está produciendo jaqueca...

—Créeme, podría ser peor. De niño me robaba los calzones.

—¿Así que Bakugo era travieso desde pequeño, eh?

Kirishima lo observó con diversión. Incluso la manera en que mencionó la palabra travieso se oía muy sugestiva.

—Igual, por más de que Kacchan sea una persona difícil... no la paso tan mal a su lado. Me divierte.

La fantasía de amarte [TodoDeku] - BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora