Las Vueltas de la Vida (camren)

CAPITULO 16

Hace mucho rato ya que estoy despierta, aún es muy temprano para levantarme, pero se que ya no conciliaré más el sueño, por ello me dedico a contemplar a Lauren. Todavía verla aquí, a mi lado, abrazándome con su mano en mis caderas, y su cabeza muy cerquita de la mia, me hace pensar que esto es un sueño y que en cualquier momento despertaré, pero no lo es, por lo pronto es real y haré todo lo posible para que sea para siempre. Rozo su mejilla con la yema de mis dedos y veo como en medio de sus sueños sonríe, e inconcientemente su cuerpo se pega más al mio.

Me deshago de su abrazo muy despacio para no despertarla y me dirijo al baño. Abro la ducha y me meto debajo. Mientras siento el agua correr por mi cuerpo no puedo dejar de pensar en eso que lleva horas amargándome. Este fin de semana, fue como un sueño, ella y yo solas o con personas que nos apoyan. Pero ahora, debemos volver a la universidad y al mundo y tengo miedo, porque ahí estará él, Poncho, y solo de pensarlo noto como me hierve la sangre. Yo nunca había sido una persona celosa y se que no lo seré ahora, por lo menos sin tener motivo, a pesar de que puedo decir que desde hace mucho mi autoestima en ese sentido no es muy elevado, por no decir inexistente. Sin confianza como podremos tener una relación sana, además ella dijo que nunca me haría algo así, y la creo, claro que la creo y confío en ella. Pero ella esta muerta de miedo y si hoy cuando se encuentre con él otra vez, decide que esto no merece la pena, que tener una vida con él es más sencillo que admitir lo que siente por mi, y si sale huyendo nuevamente de mi, no se si seré capaz de soportarlo. Nunca en mi vida había sentido esto por nadie, ni siquiera por Shawn. Ella es la mujer que amo, es la mujer de mi vida, y tengo tanto miedo de perderla

Intento tranquilizarme, salgo de la ducha vuelvo a la habitación y me visto, luego salgo sin hacer el menor ruido. Ella todavía puede disfrutar un poco más de un sueño reparador. Me dirijo a la cocina, y preparo el desayuno con calma y tranquilidad, eso me ayuda a relajarme o por lo menos a disimularlo a simple vista.

Nuevamente regreso a la habitación, pero ahora, me acerco a la cama y la miro, no me canso de mirarla, es tan hermosa Me siento en el borde de la cama y le doy pequeños besos en la cara y el cuello a la vez que susurro en su oído.

- Camila: Buenos días preciosa, es hora de levantarse.

- Lauren: (Abre los ojos un poquito y la mira, estira sus brazos hacia ella y la estrecha entre ellos) No quiero

- Camila: Eres una dormilona?

Lauren: Para nada. (La suelta, se incorpora en la cama y la mira de manera inquisitiva) Que pasa?

- Camila: Nada. El desayuno esta casi listo, te espero en la cocina vale ¿? (se acerca y la besa en la mejilla, pero cuando se va a separar Lauren la abraza muy fuerte y le da un beso en los labios).

- Lauren. Me ducho en un momentito y estoy contigo. (Se levanta rápido de la cama, va a la otra habitación, coge la ropa que se va a poner y se encierra en el cuarto de baño).

Desayunamos tranquilamente, hablamos de cosas triviales, pero noto que me mira extraño, como si quisiera decirme algo. Cuando terminamos de comer, empiezo a recoger la mesa, ella viene por detrás de mi y me abraza, me da un beso en el cuello, apoya su barbilla en mi hombro y se queda así unos segundos.

Lauren: No me vas a decir porque te encuentro tan extraña hoy? Que te preocupa?

- Camila: Porque piensas que me pasa algo ¿? No tengo nada, de verdad.

- Lauren: (hace que se de la vuelta y se miran fijamente a los ojos) Digamos que soy muy observadora Camz. Cuéntame si ¿?

- Camila: (Se abraza a ella y apoya la cabeza en su pecho) No quiero ir a la universidad, ni que vallas tú. No quiero que te encuentres con Poncho.

- Lauren: (acaricia su espalda) Si él es tu único problema, no te preocupes mi castañita que no lo veré. Él si se fue al extranjero, pensó que seria lo mejor las dos. Y aunque estuviese aquí, no te dejaría por nada del mundo.

- Camila: Perdóname, pero tengo tanto miedo de que vuelvas a huir de mi y yo

- Lauren: Shh. Perdóname tu a mi por hacer que mis miedos te hagan sufrir o pensar cosas que no son. (Nos quedamos abrazadas unos minutos).

...................

Ya hace horas que estoy en la universidad. Estoy tranquila y relajada, me ayudo mucho la conversación que tuve esta mañana con Lauren. Y ahora estoy aquí como una loca buscando a Sebas, necesito hablar con él pero hoy solo he podido verlo de lejos. Me dirijo a la cafetería y por fin ahí esta.

- Camila: (sonríe) Hola Sebas, donde te metes que casi no te encuentro

- Sebas: (Se levanta rápido y la besa en la mejilla) Hola Camz, pues ya ves aquí estoy descansando un rato de tantas clases. Para que me buscabas ¿?

- Camila: (mira el reloj) Vamos que empieza la ultima clase.

- Sebas: Vamos.

- Camila: Quería decirte que al final no iré contigo a la fiesta

Sebas: (con mirada triste y decepcionado) Y eso, encontraste alguien mejor ¿?

- Camila: Perdón, sabes que siempre te dije que no sabía si iría contigo. Voy a ir con una amiga.

- Sebas: (sorprendido ahora) No se supone que hay que ir en pareja ¿?

- Camila: Y ella será mi pareja

- Sebas: (pasa su mano por los hombros de Camila y siguen caminando) Pues ni modo. Finalmente fui vencido por una amiga, que remedio. De todas formas, nos veremos por ahí y espero que al menos bailemos juntos alguna canción. Que te parece ¿?

- Camila: Ese baile dalo por hecho. (Miro hacia delante y ahí la veo, en su taquilla, y me mira fijamente, automáticamente me aparto del abrazo de Sebas, como si estuviese haciendo algo malo, pero no, solo es mi amigo. *******) Sebas te dejo que voy hablar con una amiga.

- Sebas : No te entretengas que luego llegas tarde. (sonríe, la besa en la mejilla y se va)

Camino hacia ella. Me mira como la otra vez, con esa mirada que me mata, siento que me atraviesa con ella. Por favor no te enfades mi amor, sino pasa nada. Sebas no es nadie para mí, y tú lo eres todo. Ya casi llego hasta ella, y deja de mirarme, se concentra en su taquilla.

- Camila: (acaricia su mano un segundo con sus dedos) Hola preciosa ¡!

- Lauren: (no la mira y suspira) Otra vez con ese imbécil Camz?