CAPITULO 4

304K 17.2K 8K
                                    

Canción: Delicate - Taylor Swift

- ¿El "Don"?

- Así es, es el alto rango en la familia.

- Responde algo ¿has tenido que ver algo con lo acontecido aquella noche en el bar?

- Sí, yo hacía parte de ese grupo de hombres.

- ¿Qué hay del señor Levis?

- Solo diré que su hotel sirve de fachada, entre menos sepas de mis negocios, mejor.

- Yo, yo... – estoy presa de miedo nunca imagine que esto sucediera.

- ¿Porque no cumplió algo tan sencillo como no bajar? Le dije lo que tenía que hacer.

- No lo sé.., pensé que algo malo sucedía, lo mejor es que me vaya, no quiero ocasionar problemas, ni mucho menos tenerlos – empiezo a rebuscar entre el closet la única prenda que traía conmigo cuando me mude a su casa.

- ¿Y a donde iría señorita Steinfeld? No tiene un lugar donde quedarse.

Él tiene razón, no sé dónde quedarme, pero tampoco puedo quedarme allí viviendo con el peligro de ser asesinada por cualquiera de esos tipos.

- Eso no tiene importancia – trago saliva-. Puedo arreglármelas por si sola.

- ¿Por qué en todo este tiempo no ha vuelto a su casa? ¿Qué la ha detenido?

Jamás he sido abierta en lo que ha sucedido en mi vida con una persona que no sea Laurent. No tengo la facilidad de confesarles a las personas las razones que me orillaron a trabajar sin descanso en el hotel.

Suspiro y me mira esperando una respuesta de mi parte.

- Es una historia larga.

- Tengo todo el tiempo del mundo – se sienta en una de las esquinas de la cama dispuesto a escuchar. Su fragancia se mete poco a poco en mis fosas nasales. Este hombre es alucinante, incluso su aroma es como si te elevara a otro universo.

Le confieso todo a Bruno de mi vida, incluso la situación con mi madre, del tipo de relación que ambas manejamos desde hace tres años, de lo sucedido con mi hermana. No se la razón por la cual lo hago, creo que la única que he encontrado es porque él es la única persona a la cual tengo para desahogar mi dolor en estos momentos.

- ¿Porque te culpas de algo que no sabía que iba a suceder? Esa no ha sido tu culpa.

- Porque mi madre ha tenido razón. Debí hacer algo por mi hermana, pero me quede estática viendo como la asesinaban en frente mío. No hice nada.

- No mereces eso, estoy seguro que eres una buena hija para recibir ese trato de su parte.

Tomo un fuerte suspiro antes de acercarme a la puerta.

- Tienes un rostro muy bello para que lo empañe por lágrimas – me toma de la quijada levantando mi vista-. Te quedaras acá, la única razón por la que no te dejo bajar es porque me reúno con hombres muy peligrosos por las noches, si te ven, habrá problemas.

- Y esa es una razón para irme, es peligroso para ti y para mí, más si te meto en problemas.

Bruno me da una leve sonrisa.

- Por el contrario, ellos tendrán problemas conmigo si intentan algo, estarás segura en la habitación. Desde que no salgas de ella.

Esto era completamente una locura. Él era apenas una persona nueva en mi vida, ni siquiera podía clasificarlo como amigo. Solo era un hombre al que había conocido en mis peores circunstancias.

Pasión Italiana (Ya en Físico)Where stories live. Discover now