CAPITULO 34

192K 11.2K 3K
                                    

Canción: Lana del rey - Races off to the races.

Oh Dios ¿En serio? Están ahora discutiendo como idiotas, aveces dudo que sean de la mafia

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Oh Dios ¿En serio? Están ahora discutiendo como idiotas, aveces dudo que sean de la mafia.

- ¡Basta! Basta todos -Les grito. - Señor Novikov la persona con la que negocio fui yo, así que es a mí a la que me debe una respuesta.

- Esta en lo correcto señorita Steinfeld. Sólo controle el collar de su novio y todo estara bien.

- Tú mujer es más inteligente en esto que nosotros,mira como lo convenció - escucho que le masculla entre dientes Dimitri a Bruno.

- Los ayudaré, pero bajo mis condiciones.

- ¡Si! - Grito dando un salto. - Lo siento es sólo, que me alegra.

- Eres como una niña - susurra Bruno.

- Por supuesto - responde Dimitri. - ¿Cuantos hombres puedes enviar para culpar a otras personas de el asesinato de Maksim y los demás? Pueden ser unos veinte.

- ¿Veinte? - Dice soltando una carcajada en el el aire. - Serán diez.

- ¿No son muy pocos?

- Son francotiradores, todos. Me alegra escuchar que la rata esa,este muerta.

- Acá mi amigos se encargo de él - Dice Dimitri tomando a Bruno por el hombro mientras él se lo quita de encima.

- Maksim tenía muchos enemigos yo mismo lo hubiera matado.

- ¿Así como lo hiciste con Vitaliy?

Los ojos de Novikov cambian completamente.

- Vitaliy merecía más que la muerte.

- Después de lo de Penélope...

- No la menciones. No sabes lo que es perder a una persona.

- Lamento haberlo dicho. Te enseñaremos las rutas.

- Hoy no, no seas aburrido tengo una fiesta en mi mansión ¿Porque no me acompañan?

- Yo no iré a nada - responde Bruno. - Esas cosas no van conmigo.

- Habrá alcohol, mujeres y póker, les explicaré como trabajo a mi manera en Rusia y Estados Unidos.

- Iremos - respondo.

- Usted está cordialmente invitada señorita Steinfeld - Dice danome una sonrisa.

- Escuchame, ella es mi prometida, buscate a otra mujer.

- Lombardi yo respeto las mujeres ajenas,a diferencia de otros - Dice volteando a mirar a Dimitri.

- No era una de tus mujeres, sólo era una dama de compañía. Ella estaba ahí como" <<oye que lindo cabellos rubios tienes>>  y yo bueno, no me resisto a una mujer y era una rubia preciosa.

Pasión Italiana (Ya en Físico)Where stories live. Discover now