CAPITULO 10

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Canción: California Dreamin - Sia

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Canción: California Dreamin - Sia

Aquella mañana baje las escaleras de la mansión, la primera imagen que me encontré fue la de Bruno junto a Elisabetta desayunando en la mesa del comedor.

- Buenos días dea – articula mientras da un sorbo a su café.

- Buenos días linda - Elisabetta se sienta a un lado de él y me sonríe.

- Buenos días - respondo mientras aún sigo de pie a un costado de las escaleras.

- Por favor siéntate y desayuna con nosotros Camila - menciona Bruno. Para mí aquella escena era difícil, noche anterior habían sucedido muchas cosas y no podía fingir que las todo estaba bien porque no lo era así.

Me siento a un costado tomando entre mis manos el plato de cereal, Bruno charla con su madre de anécdotas del pasado, ríe a carcajadas y después me regala una ligera vista. Oculto mi rostro de él simulando que no lo he visto observándome con total detalle.

La duda asalta mi cabeza en ese instante ¿Cómo es que un hombre como él, termino metido en ese mundo? ¿Que lo empujo a ser lo que es? ¿Habrá tenido elección...

Son muchas preguntas y ninguna parece tener una respuesta.

Lo miro detalladamente a esas dos gemas azules profundos que adornan su rostro, no es el hombre que se va por las noches a resolver asuntos de la mafia. Definitivamente no lo es... Cualquier persona nunca pensaría que en un importante mafioso, pensaría que es sólo un hombre elegante, alguien que con bastante dinero, pero nunca que se dedica al mundo oscuro que maneja.

Terminamos de desayunar y me levanto de la mesa junto a ellos, Bruno se levanta de su asiento, se acerca hasta donde me encuentro y me toma de la muñeca.

- ¿Te han gustado las flores? - pregunta y mira de reojo a su madre que se ha alejado con rumbo a la cocina-. Lamento si te sientes incómoda.

- Gracias, nunca nadie había tenido ese detalle conmigo. De hecho es la primera y única vez en la que alguien me regala flores.

- Siempre hay una primera vez, te debo un paseo por Sicilia, tengo un yate privado, iremos en el a recorrer el mar junto a mi madre. Claro si no te molesta.

- ¡Ya estoy lista Bruno! – grita Elisabetta desde la cocina-. ¿Debería llevar mi sombrero con pluma violeta o quizás el verde menta?

- Cualquiera estara bien madre - responde él mientras se rasca la nuca.

- Te pedí una sugerencia, ¿Hija tu cual crees que me va mejor? - muestra ambos mientras los sostiene en las manos.

- Quizás el morado resalte más su color de cabello señora Lombardi - le dedico una sonrisa.

- El morado será entonces - chilla de alegría.

- andiamo ambas – atraviesa la puerta mientras toma en las manos las llaves de su auto.

Pasión Italiana (Ya en Físico)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora