The Tutor - Snarry5evr

04.- T.I.M.Os

Remus se quedó hasta mediados de junio, dejando solo unos días antes de que llegaran los representantes del Ministerio para los T.I.M.Os. de Harry. Consideró aceptable el progreso de Harry con la propiedad y le proporcionó material de lectura sobre nuevas técnicas de cultivo y cría de animales. Harry lo rechazó con un suspiro de alivio. Él amaba a su "tío", realmente lo hacía. Pero el hombre a veces trataba a Harry como si todavía tuviese miedo a los doce años. Harry pasó los siguientes dos días revisando y reseñando con Snape. En la tarde del segundo día, hubo un fuerte golpe en la puerta principal. Harry saltó de donde había estado descansando en el salón, leyendo el libro sobre la cría y esperando la hora de la cena. El mayordomo abrió la puerta para revelar dos figuras con largas túnicas sueltas. Hizo una reverencia y dio un paso atrás, permitiendo que la pareja entrara, seguida de dos baúles flotantes. Pusieron los baúles en el suelo y estudiaron la entrada. La figura más alta se quitó la capa para revelar a una bruja más vieja y majestuosa con una larga nariz patricia y un cuello esbelto. La otra figura se reveló como un hombre bajo y calvo con gafas de anteojos y una sonrisa dispuesta.

—Iré a buscar a su señoría—decía el mayordomo.

Harry salió de la sombra de la puerta de la sala—No es necesario, Collier. Escuché el llamador—Lanzó una sonrisa de bienvenida a la pareja—Bienvenidos a Potterstate. Deben ser del ministerio—.

La bruja extendió su mano y Harry la tomó, inclinándose educadamente—De hecho—dijo en un tono amable pero autoritario—Soy Griselda Marchbanks, Gobernadora de la Autoridad de Exámenes Mágicos y mayor del Wizengamot. Mi compañero es el Profesor Tofty, Examinador de la Autoridad de Exámenes Mágicos—.

Harry le sonrió al mago y le ofreció su mano. El profesor lo sacudió con una gran sonrisa—Es maravilloso conocerle, Lord Potter—.

—Igualmente, profesor. Confío en que su viaje fue corto. ¿No hubo problemas para aparecer a través de las barreras? —.

La bruja se quitaba los guantes—No, mi señor. Le agradecemos que nos haya permitido. Parece que fue un paseo por el campo—.

Harry asintió—Sí, y no demasiado agradable por la noche cuando uno no sabe dónde están los agujeros. ¿Puedo hacer que Collier les muestre sus habitaciones para que se refresquen antes de la cena? —.

—Eso suena adorable, mi señor—la bruja le sonrió—¿Y dónde está su tutor? —.

—Estoy aquí, Griselda—El trío levantó la vista para ver al profesor de cabello oscuro bajar las escaleras. Harry se sorprendió de lo asombroso que parecía el hombre con su largo cabello recogido en una cola y la túnica casi formal que parecía adherirse a su cuerpo. Harry sacudió un extraño pensamiento de su cabeza.

La bruja le sonrió y cruzó para encontrarse con él en la base de las escaleras—Debería haber sabido que serías su tutor, Snape. Debo esperar altas calificaciones de este entonces—Ella se inclinó hacia adelante y besó el aire junto a su mejilla. El tutor devolvió el favor antes de mirar a Harry.

—Él conoce mis expectativas, Griselda—Snape cruzó el vestíbulo para darle la mano al otro mago—Tofty, me alegro de verte de nuevo—.

—Igualmente, Snape—el pequeño hombre bombeó la mano del tutor en señal de saludo.

Snape miró a la bruja—¿Te faltan examinadores, Griselda, o sentiste la necesidad de una excursión? —.

Ella rió con un sonido completo y rico—Acido como siempre, ya veo. No. No. Un caso especial, este. Tenía que supervisarlo yo mismo. Además, no todos los días se llega a conocer al famoso Harry Potter—.

Harry podía sentir el sonrojo en sus mejillas—Creo que deseas refrescarte antes de la cena—interrumpió Snape.

Harry hizo un gesto a los lacayos en las sombras mientras los dos examinadores levitaban sus baúles—Por favor, muestren a la examinadora Marchbanks y al profesor Tofty sus habitaciones—Miró a la bruja—¿Será suficiente media hora? —.